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Ellos llevan exactamente treinta y cuatro semanas saliendo, y en esos nueve meses no habían pasado de agarrarse las manos y, como mucho, abrazarse ¡Ni siquiera un mísero beso en la mejilla!
—¡No ha cambiado nada! —gritó el mentalista golpeando con su puño la mesa.
—Senku no es de expresar sus sentimientos...
—Estoy pensando seriamente en terminar, Tsukasa-chan —el castaño escupió el café que estaba bebiendo. Tosió un par de vez bajo la mirada preocupada de Gen, el cual le tendió un pañuelo— ¿Qué pasó, Tsukasa-chan? ¿Dije algo malo?
—Para nada... —tomó su celular y tecleó rápidamente, luego presionó "enviar" y lo dejó de lado.
"SOS, estás en problemas, Gen planea terminar contigo"
Senku releyó una y otra vez el mensaje de Tsukasa, horrorizado. Nuevamente leyó el mensaje y esta vez entro en pánico, él no había perdido su dignidad el día que se le declaro para nada. Le importó muy poco que ahora mismo estuviera en un debate con el profesor de química, tomó sus cosas y salió disparado del lugar.
Se quedó parado a mitad del pasillo, no lo había pensado mucho, ¿Qué podía hacer para evitar que su novio diera fin a su relación?
Senku, el chico más inteligente de la escuela, el que podía resolver cualquier problema matemático con solo verlo, el mismo Senku que fue reconocido por un científico de la misma NASA, ahora mismo estaba intentando resolver el mayor enigma con el que se había enfrentado: Como demostrarle a Gen sus sentimientos.
"Falsa alarma"
Leyó el mensaje y estuvo a tres segundos de lanzar su celular, hasta que otro mensaje le llegó.
"Pero aún tiene en mente desecharte"
Y volvió a entrar en pánico, pero esta vez, más decidido, se dirigió a la casa de su única amiga mujer, Yuzuriha.
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—¿Por qué no simplemente lo besas y ya? —La castaña golpeó la cabeza de Taiju.
—¿Acaso eres idiota? —Yuzuriha rodó los ojos—Como sea, creo que es algo que ustedes deberían hablar... Son una pareja ¿no? ¡La confianza es lo más importante!
—¡No es fácil! —Senku suspiró— Me da vergüenza —susurró sonrojado.
—¿Tanto por un simple beso?
—Taiju, amor, cállate —Senku solo desvió la mirada, observó su celular mientras sus dos mejores amigos discutían, observó la hora, ya era tarde.
—Me voy, gracias por la "ayuda" —Taiju solo se despidió con su mano al igual que Yuzuriha, estaban muy concentrados en su discusión que ahora era de la castaña reclamándole sobre la chica de la clase B que le pidió prestado el cuaderno de Comunicación un viernes. Simplemente no le tomaron importancia a el científico.
Senku compartía departamento con Gen.
"Mierda, lo olvide" pensó mientras subía al autobús, ahora estaba obligado a hablar con el mentalista si o si, tal vez estaba exagerando, pero, mejor prevenir que lamentar.
—Estoy en casa —se quitó sus zapatos y los cambió por unas pantuflas blancas, dejó su mochila en el sofá y finalmente se quedó mirando a la nada por un largo rato.
—¡Senku-chan! —el mentalista salió de la cocina con dos tazas de té— Tenemos que hablar.
Al de mayor altura se le paró el corazón por un momento.
—¡No puedes terminar conmigo! —gritó sin pensarlo tomando al peli-negro de los hombros.
—¿Eh? ¿Terminar? ¿Cómo...?—un nombre se le vino a la mente— Fue Tsukasa-chan, ¿no? —Senku asintió rápidamente, resopló— Eso lo dije en un ataque de ira, Senku-chan, realmente me gustas, no pienso dejarte ir fácilmente —sus mejillas se tiñeron de rojo, había dicho algo muy vergonzoso.
Ambos quedaron en silencio, Ishigami estaba intentando encontrar las palabras para decirle a Gen todo lo que siente por él, pero no podía, los nervios le ganaban y su corazón palpitaba como si hubiera corrido una maratón.
—Senku-chan... —abrió la boca para de una vez decirle, pero se acobardó— Senku-chan, de verdad, necesito dejar estas tazas sobre la mesa... —el oji-carmín estaba perdido en su propio mundo discutiendo con su corazón para que le dejara hablar— Senku-chan~
—Cariño, por favor, estoy tratando de decirte que te amo, así que deja que mi cerebro convenza a mi corazón de dejarme hablar.
—¡¿Senku-chan?! —Gen estaba más rojo aún. Con temor observó a Senku que pareció procesar lo que acababa de decir.
—¿Lo dije en voz alta? —El mentalista solo asintió con la cabeza lentamente— Mierda... —lo soltó y bajó la mirada— Ya, a la mierda.
Acercó su rostro al del contrario y presionó sus labios contra los de Asagiri, un beso dulce el cual dejó a Gen en estado de shock. Cuando Senku se separó el mayor aún estaba procesando lo sucedido, el menor tomó las dos tazas y las dejó sobre la mesita que estaba justo a su costado y subió a Gen a su hombro.
—¡¿Senku-chan?!
—Pesas mucho... —caminó hasta su habitación— Creo que ya no tengo vergüenza de hacer este tipo de cosas —sonrió, aunque aún estaba sonrojado— hoy, vamos a hacer todo lo que hacen las parejas.
Y así Gen no volvió a caminar, fin
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:D
Es trabajo honesto :(
angelarecuerdacambiareltitulo
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