U N O

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Los días han sido... Solitarios

El vaso lleno de alcohol ya no era suficiente para saciar su profundo pesar que ocultaba con una encantadora y muy bien actuada sonrisa. Ya nada podía calmar la soledad que sentía a ver a sus compañeros compartiendo una vida como pareja mientras que el estaba solo, al principio no le molestaba ya que pensaba que en algún momento encontraría a esa pareja indicada que lo consolará y a compara pero mientras pasaba los años mas perdía la esperanza.

—Nos casaremos Willy! -Recuerda el día en que su mejor amigo, hermano de cuna, le dijo que se casaría con su hermano de travesuras Rubius, un alfa muy tonto pero protector a su parecer. Con una sonrisa los felicito a ambos, meses después fue el padrino y bailo con la madrina que había sido Mangel después de una pequeña discusión por saber quien seria el padrino.

Han pasado dos o tres años desde entonces, aun continua su vida felices como pareja, aun no tienen cachorros como escucho por la boca del amante del morado, no estaba listo para ocuparse de tener hijos, aun había lugares por explorar y conocer, su alfa lo había entendido afirmando que opinaba lo mismo, por ahora están de acuerdo en no tener hijos por lo tanto son una pareja de casados explorados nuevos lugares a las afueras de Karmaland. Willy los despidió junto a sus compañeros cuando estos se fueron, fue la primera vez que se sintió vacío,  ya que su primer amor, su mejor amigo y hermano se había ido de aventura muy feliz con su prometido, supuso que eso se le pasaría con el tiempo y se acostumbraría a la ausencia de sus colegas.

Con el tiempo supo que Auron, el psicólogo del pueblo era el prometido de su amigo Luzu a pesar de las constante peleas que estos tenían en su momento, era una pareja de enamorados muy felices, sonrió de lado livianamente contento por ambos. En su tiempo le llamo la atención a Luzu, lo ayudo en su momento mas triste al no ganar la alcaldía, al ser traicionado por muchos y decepcionado por otros. Fue difícil animarlo pero verlo sonreír con sinceridad después de tanto tiempo de lucha para lograrlo había sido relativamente grato, fue una lastima que después de esa primera vez muchas otras fueron dedicada para quien en un principio le había causado dolor, según Auron y Luzu habían hablado para aclarar todo lo que había pasado y para aclarar de una vez todo lo que sentían. Claro que el no se lo había tomado bien, fue decepcionante para el que el castaño de ojos café perdonara fácil al alfa de cabellos azabaches, fue compresivo con los sentimientos de Luzu, lo fue pero eso no quito que el le dejara de hablar por un tiempo ya que no solo lo había decepcionado después de tanto dedicarle su tiempo para animarlo si no porque indirectamente había lastimado sus sentimientos, le basto un mes para perdonar al amante de los cerdos y al mismo psicólogo, pensó que el hueco en su corazón no crecería mas.

Claro qué, se equivocó. Tiempo después su hermano de travesuras anunció su relación con el omega mas pequeño del grupo y el oficial de comisaría, se les veía felices, no le hubiera dado importancia si el no hubiera estado enamorado de aquel alfa de búho, puso su mejor sonrisa fingida y felicito a la nueva pareja, ninguno se dio cuenta que esa noche había llorado decepcionado de si mismo ¿Que esperaba al competir contra un omega, siendo el un simple y ordinario beta? Se asqueaba, sentía que por ello no podía tener una relación con ninguna persona que le llego a gustar, tres decepciones para su ya lastimado corazón, sentía que su orgullo moría de a poco como sus sentimientos al ser ahogados por su corazón, lo peor es que nadie se percataba de su malestar, nadie veía que moría por dentro pero ¿Para que preocupar los cuando todos estaban felices? Era egoísta hacerlo así que prefirió callar y ahogarse con alcohol en el bar que construyo con sus colegas, el mismo que ahora estaba en total soledad.

Odiaba ser un beta, se odiaba a si mismo pero aprendió a vivir con ese odio y continuo con su vida, fingiendo que todo estaba perfecto y para sus amigos lo estaba, ninguno se percataba que estaba mal, los betas no tienen olor, no sabrían su estado de animo por el olor, si no lo tenia tampoco podía enamorar a nadie. Un día se le ocurrió hacer un jardín en la parte frontal de su casa con arboles de frutas, si tuviera un olor, estaba seguro que seria de frutas tropicales pero no se podía engañar viviendo en la realidad.

🌻_Secret Garden_🌻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora