Domando a la Bestia

02. Esfuerzo

–¡Amy espera por favor! – grita nuevamente con la esperanza que está vez sí hiciera caso, cosa que por fin sucede

Amy al dar media vuelta se encuentra con Silver caminando con trabajo hacia ella. Daba bocanadas de aire y se sostenía de sus rodillas para mantenerse de pie

–¿Estás bien? – pregunta preocupada de ver que llevaba rato tratando de respirar bien

–Sí, muy bien... Solo debo dejar de comer mucho pan... – responde restándole un poco de importancia a su estado

Amy ríe y camina lo que queda de distancia para ayudarlo a recuperarse

–No creo que sea tan fácil...

–Tal vez, debo intentarlo...

Amy le toma de las manos al mismo tiempo que observa como se endereza.
Se miran un rato y el primero en moverse fue Silver; toma sus mejillas y las soba con sus pulgares sonriendo por lo linda que se veía en esos momentos

–Luces más linda cuando sonríes y ayudas que cuando golpeas mesas y azotas puertas... – comenta finalizando con apretar su nariz

Amy se separa y ríe nerviosas. Silver vuelve a unir sus manos y comienza a caminar llevándola a su paso

–Gracias, y lo siento... No era mi intención... – se disculpa aún con los nervios encima

–No te preocupes, supongo que yo también hubiera hecho lo mismo. Si supiera quien fue mi abuela...

Ambos se hechan a reír y continúan caminando, un día tan bello no debía desperdiciarse tan fácil

Por otro lado un trío que consistía en una murcielaga y dos erizos corrían por entre los árboles con el fin de llegar al límite, aunque uno de los tres corría para escapar de ellos

–¡Detente ya! – el grito de la murcielaga hace que el erizo aumente el paso

Los obstáculos del camino no era un problema, conocía esos caminos de piedra y tierra desde cachorro ¿Cómo podría olvidar los tan fácil?

Sonríe al ver la luz del limite a unos cuantas pasos de él, pero antes de dar el siguiente paso es derribado por un erizo cobalto

–¡Basta ya! – grita al verlo debajo de él

–¡Aléjate de mí! – alza sus pies dándole un golpe en el estomago para lanzarlo volando

–¡Cariño! – grita la chica espantada de verlo tan alto

–¡Estoy bien! – exclama a lo lejos levantando su pulgar emocionado de su posición sin importar la distancia de él y el suelo –¡Intenta detenerlo! – vuelve a gritar antes de desaparecer entre las ramas de los árboles

La chica asiente y sigue volando hacia el erizo que estaba apunto de tocar los límites

–¡Shadow!

El mencionado lo ignora y continúa pero una cantidad de ramas lo toman de sus pies

–¡No! – trata de safarse pero las ramas continúan subiendo por sus piernas para al final, ser tragado por la tierra

La murcielaga se detiene tocando el suelo con sus tacones, suapira aliviada y mueve sus manos para provocar un gran pozo en la tierra

–Cariño, es suficiente... – habla cansada y al mismo tiempo frustrada

Shadow, sale de la tierra enredado por el monton de ramas

–¡Querido, vuelve! – grita esperando al otro erizo que salió volando

Vuelve a mover sus manos y el erizo de las ramas deja caer su cabeza hacia atrás, esperando el regaño de su vida

Un montón de agua llego con rapidez dejando a un erizo cobalto caer en seco sobre la tierra, dejándolo a un lado de la chica

–Agh, agua... – se queja poniéndose de pie para sacudirse

Ahora los tres volvían a estar reunidos, frente a frente

–Ahora sí, tenemos algo de que hablar – habla la murcielaga mirando al azabache con desaprobación

Shadow suspira al saber lo que vendría

[...]

Las risas se apoderaron de ese corto segundo de silencio

No podía creer lo que había hecho la contraria y lo único que podían hacer en esos instantes era reir

–P-por favor, para – pide Amy tapando su rostro de pena

–Lo siento, pero no puedo evitarlo... – se disculpa retirando las lágrimas de sus ojos

Amy le da un leve golpe en el hombro y toma aire aprovechando en silencio entre los dos

–Era muy pequeña como para saber lo – habla tratando de dar una excusa válida para el momento

–No lo sé Amy, tener casi diesinueve no es una edad de pequeñas – habla con una suabe voz catarina, esas palabras causan que las mejillas de su compañera se vuelvan más rojas

–¡Inténtalo tu! Seguro y tampoco sabrías que era para la limpieza...

–Esta bien, buen punto

Amy suspira aliviada y vuelve a ver el camino

Silver la mira de reojo y toma aire para lo que ésta a punto de hacer

–Amy, te tengo una noticia... No quiero que pienses como si quisiera aprovechar éste momento para alagarme en tu presencia con cosas sobre mi – habla nervioso, Amy sonríe tiernamente

–Tranquilo, la idea no es tan mala

–Esta bien... Pronto seré el proximo sub-jefe del pueblo

Ambos se detienen y se miran esperando algo más que miradas

–Eso es bueno Silver, una buena oportunidad para ti. Serías muy bueno en el trabajo ¡Todas las mañanas podrías entregar pan!

Silver baja la mirada y Amy ríe a carcajadas

–Amy no...

–Amy sí. Si tu mamá tiene buena mano tú también – alaga tomando un buen lado positivo

–Pero no se preparar pan – habla asustado de recordar la última vez se intento usar la cocina

–Podemos intentar cocinar mañana. Sería una buena oportunidad para tí

Silver se queda en silencio pensando en la oferta, mira de reojo a la rosada y su sonrisa lo hace pensarlo mejor. Una buena oporrunidad para intentar enamorar a la chica...

–Esta bien, mañana por la tarde – le extiende la mano esperando hacer una "mini alianza"

–Mañan por la tarde – repite sus palabras dandole un buen estrechon de manos, aunque en un movimiento rápido acerca sus caras para verse fijamente –Mi cocina, mis reglas; tu dañas, tu pagas...

Silver se queda boquiabierto y Amy se separa de él regalando le una enorme sonrisa

–Hasta mañana Silver, es agradabe hacer tratos con amigos...

Silver da media vuelta y la mira irse. Toma su rostro y después mira sus manos

–Que agreciva... Y que adorable... – suspira más que enamorado