Capítulo 39: Si esta mujer no es disciplinada, realmente se elevará a los cielos

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Ji Nuan no sabía por completo lo que estaba planeando Mo Jingshen cuando la trajo directamente.

El dueño de la sala de ajedrez estaba claramente familiarizado con él. Cuando escuchó que Mo Jingshen había venido de visita, incluso salió a darle la bienvenida.

El apellido del propietario era Xu. Tenía entre setenta y ochenta años. Tanto su cabello como su barba eran blancos, y su forma de hablar tenía un antiguo encanto.

De pie en esta sala de ajedrez, Ji Nuan se preguntó si accidentalmente se había ido al pasado. Tenía un encanto antiguo y se podía ver que cada artículo aquí estaba especialmente diseñado. Aquí nada era barato.

De hecho, al estar ubicado en la ciudad más bulliciosa del país, contenía muchos tesoros secretos.

Originalmente, Ji Nuan había planeado explicar sus intenciones al propietario Xu. Al final, fue invitada a la sala de espera para tomar té mientras Mo Jingshen fue solo a hablar con el propietario Xu.

Incluso si estaban cerca, o este propietario Xu era un anciano con el que Mo Jingshen estaba muy familiarizado, sentía que él no dejaría ir fácilmente algo que tanto atesoraba.

Incluso si Mo Jingshen ofreciera un precio más alto, probablemente sería un desafío obtener el récord de ajedrez.

Entonces, ¿qué fue exactamente lo que entraron a hacer?

Eran tan reservados ...

Mientras bebía té, Ji Nuan mojó los dedos en un poco del té derramado, dibujando en la superficie de la mesa para perder el tiempo.

"Señora. Mo, hay una señorita Ji afuera que dijo que vino con usted y el CEO Mo. No pudimos confirmar su identidad, así que no la dejamos entrar. Dijo que es su hermana ". Desde la puerta vino un asistente que preguntó cortésmente: "¿Debería dejarla entrar?"

Ji Nuan nunca pensó que esta sala de ajedrez fuera un lugar al que la gente no pudiera entrar fácilmente.

Ji Mengran estaba bloqueado en la puerta ...

Entonces, ¿por qué no dejar que siga esperando afuera?

"No la conozco", respondió mientras bebía otro sorbo de té como si no tuviera nada que ver con ella.

La asistente asintió formal y cortésmente con la cabeza y se fue.

La habitación reanudó su silencio.

En tal ambiente, Ji Nuan no se atrevió a apresurarse demasiado. Era mejor no dejar entrar a Ji Mengran, en caso de que ensuciara el lugar de otra persona.

Fuera de la sala de ajedrez, después de recibir la respuesta, Ji Mengran trató de explicar enojado, pero no le dieron entrada.

Después de unos minutos, llamó Ji Mengran.

Obviamente fue para interrogar a Ji Nuan.

Ji Nuan cambió su teléfono al modo silencioso, tirándolo a un lado e ignorándolo.

Ji Mengran hizo de cuatro a cinco llamadas antes de finalmente darse por vencido. La pantalla del teléfono se oscureció silenciosamente.

Después de unas dos horas, Ji Nuan se levantó para ir al baño. Al salir, de repente se dio cuenta de que la puerta de la habitación estaba abierta y se apresuró a echar un vistazo.

La silueta de Mo Jingshen apareció al mismo tiempo que la del propietario Xu. Ji Nuan se relajó después de ver que se veía igual que antes.

Después de esperar tanto tiempo, no estaba segura de qué sucedió exactamente.

Young Master Mo, Are You Done Kissing?  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora