Capítulo Ocho: La Segunda Primera Cita

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Dipper:

A la mañana siguiente, Dipper estaba parado mirando la ciudad por la ventana de su habitación, recordando aquellas épocas de paz. Luego, algo del día de ayer le vino a la mente, la declaración y su beso con Pacifica, y de como volvieron a la Cabaña del Misterio tomados de la mano.

Mabel cerró la puerta detrás de ella, poniendo seguro a esta. Dipper la miró confundida, y esta puso una sonrisa de felicidad, para luego acercarse a su hermano.

—¡Cuéntame todo! Los detalles, Dipper Pines —agregó Mabel mirando a su hermano con mirada desafiante.

—¿De que hablas? —preguntó Dipper sin saber de que hablaba.

—No te hagas el idiota, se que ayer volviste de tu búsqueda con Pacifica... ¡tomados de la mano! —aclaró Mabel toda fascinada—. ¿No eran los novios los que se tomaban de las manos? ¿Son novios?.

Dipper hizo una mueca.

—Podría decirse —agregó Dipper.

Mabel, ante esto, comenzó a gritar entusiasmada, con la oportunidad de haber dejado sordo a Merlín.

—¡Demonios! —Merlín se tocaba los oídos dentro de su fortaleza flotante—. Que gritos tiene esta chica.

Segundos después del grito de Mabel alrededor del mundo, Stan y Ford irrumpieron en la habitación, acompañados de Soos y Pacifica, que se quedo mirando a Dipper.

—¡¿Que ocurre?! ¿Todos estan bien? —preguntó Ford preocupado mirando de reojo a los gemelos.

—¡Todo anda super, tío Ford! —Mabel echó una mirada a Ford por pocos segundos, para encontrar con su mirada a Pacifica. La había pillado mirando a Dipper.

—Podría decirse que... Dipper y Pacifica... son novios —afirmó Mabel, haciendo que Stan, Dipper y Soos quedaran con la boca abierta por lo que habían escuchado—. ¡¿No es fantástico?! —preguntó emocionada, mientras Pacifica se sonrojaba.

—Mabel —se quejó Dipper ocultando su rostro.

—Tío Ford, ¿por qué no te veo entusiasmado con esto? —preguntó Mabel al notar que Ford no tenia ninguna reacción por lo que había dicho.

—Porque McGucket y yo los vimos el día de ayer —afirmó Ford, mirando de lado a lado avergonzado—. Se estaban besando.

Todos abrieron los ojos como platos al instante, excepto Dipper y Pacifica, que se echaban miradas tiernas. Luego, Mabel se giró hacia su hermano y comenzó a sacudir a este.

—¿Que? ¡Besas a una chica! ¿Y no me lo revelas? ¡¿Que clase de hermano eres?! ¿Eh? —preguntó Mabel enojada, pero sorprendida y feliz al mismo tiempo por la revelación de Ford. Luego, se acercó a Pacifica y la abrazó—. ¡Estoy super feliz de que seas la casi novia de mi hermano.

Pacifica correspondió el abrazo, mientras Stan y Soos se acercaban a Dipper para darle palmadas en la espalda con regalo.

—¡Felicidades, Dipper! Finalmente cumpliste tu cometido —afirmó Soos con una sonrisa, mientras Dipper rodaba los ojos—. Ahora solo falta que se casen, tengas hijos y formen una familia —Soos comenzó a susurrar algo en el oído de Dipper—. Llama a tu hijo "Soos" en mi honor.

—¡Definitivamente no se va a llamar "Soos"! —afirmó Pacifica a lo lejos, llegando a escuchar todo. Luego, los tres hombres soltaron una risa.

—¿Ves, chico? Te dije que mis encantos seductores estaban dentro de ti, pero solo tenias que sacarlos —afirmó Stan riendo como loco—. Agradécele a la hombría.

Gravity Falls: Juego Final [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora