Antes de amar

El poder de la duda

Habían apenas pasado un par de días desde la carta, ¿todo había sido un truco de Laura?

 no lo sabia con certeza, ¿debería preguntarle? tal vez.

Estaba en mi habitación, apenas terminando una sesión de lagrimas, me recosté y abracé una almohada, escuche que me llego un mensaje, llegaron mas sonidos, pero yo no pensaba levantarme y contestar. hubo un momento de silencio y luego una llamada. Por todos los juguetes sexuales habidos y por haber, ¿Quién me llama y para que? 

Era mi  madre, dijo algo sobre que debería limpiar, llegaría tarde y que victoria (mi hermana) debería limpiar también... no estaba prestando mucha atención porque acababa de interrumpir mi momento de pichula triste

cuando la llamada termino vi de quien eran los mensajes solté un pequeño grito, eran unos mensajes de Sebastián, me debatí internamente por si debía leerlos o no, talvez eran para seguir recalcando su profundo desprecio y repulsión hacia mi, casi en contra de mi voluntad, mi dedo se movió y los abrió;

Sebastián: hola

Sebastián: La verdad no se a quien engaño

Sebastián: Sentí raro cuando te separaste de Laura y todo el pleito que tuvimos todos, quisiera arreglar las cosas de frente

Sebastián: Me haces mucha falta

Sebastián: Y perdona por lo de la carta pero prefiero decírtelo de frente para explicarte mejor

Me quede extrañada, ¿se estaba disculpando? si se estaba disculpando todo cambiaba, perdonaría hasta un golpe en la vagina si la disculpa es sincera.
 Hablaríamos de frente, cara a cara y aclararíamos las cosas, estaba decidido.

*

Era viernes otra vez, estaba caminando hacia donde me vería con Sebastián, estaba nerviosa, aclarar mis sentimientos mejor con el a solas me parecía muy confuso, además, se disculpo por la carta ¿Qué quiere decir eso? ¿acaso alguien lo obligo? entre mis pensamientos, no note cuando llegue al lugar, Sebastián ya estaba ahí.

-Hola -dije sentándome a una distancia normal-

-Hola dijo sonriendo -el parecía mucho mas seguro de si mismo-

-¿querías que te aclarara algo? -aunque fuimos amigos muy cercanos estaba nerviosa, tenia meses que no hablaba con el y su voz estaba empezando a cambiar-

-al contrario, quiero ser yo el que aclare las cosas, nunca estuvo en mis planes hacer una carta tan hiriente, veras, cuando hablamos, Kenian me comento que yo causaba ciertas cosas en ti -dijo mirándome fijamente- dijo que tu no parabas de pensar en mi, y que esto te estaba haciendo daño.... me pidió que te dejara en claro que no quería nada contigo -agacho la mirada como arrepentido- yo fui un completo idiota por hacerle caso, pero creí que el decía la verdad. Quería disculparme porque la carta verdaderamente te lastimo, y quería que supieras que no fue mi intención y lo que decía ni siquiera se cruzo por mi mente.

Mi cuerpo se congelé y quede en un shock ¿Por qué kenian le diría a Sebastián que me hiriese? Kenian me había traicionado, y no solo eso, influyo para que Sebastián me lastimara... ¿podría confiar el la palabra de Sebastián?







*

El descanso termino, y todavía un poco aturdida por la revelación de Sebastián, me despedí de el y me dirigí hacia mi siguiente clase. Me tocaba con Ken y no pensaba desperdiciar la oportunidad de preguntarle si era cierto lo que Sebastián aseguraba de el. En cuanto le dije todo lo que paso en el almuerzo, su semblante cambio, y empezó a disculparse, entonces era cierto. 

- Por favor, perdóname, el me mal entendió -hizo una pausa para mirarme arrepentido- yo no quería que te hiriera, solo quería que el fuera claro contigo, solo quería que te dijera la verdad para que no estuvieras martiriándote por la persona incorrecta.

Esto era como una bomba, no podría confiar plenamente en ninguno de los dos, ¿Quién tenia la razón? ¿Quién quería mi mal? ¿Quién era honesto y quien mentiroso?

Estaba mareada, le dije a Kenian que investigaría si me estaba mintiendo, al me agradeció por darle la oportunidad de explicarse. Esta vez salí de la escuela sola, keni estaba apenado y se fue antes de decirle adiós... vi desde una distancia a Sebastián, y le sonreí, además, se había disculpado. Me hizo señas y movió los labios diciendo "te escribiré mas tarde" sonreí ante la idea y me fui a casa, no había terminado de hacer mi tarea cuando recibí su mensaje;

Sebastián: y bien?...

yo: bien que?

Sebastián: ¿Qué somos ahora?

Era una broma ¿verdad? yo literalmente le dije que lo amaba, que que me dolió cuando hizo la carta, pero el no me había dicho nada mas que perdón por la carta 

yo: no se como te hayas tomado lo que te confesé... y tampoco lo que tu sientas

Sebastián: tu también me gustas 

Era de las alegrías mas grandes, competas y grandiosas que había sentido en mi hasta ahora breve existencia, no quería que se acabara nunca. 

yo: y que te gustaría que seamos?

Sebastián: Creo que podríamos intentar algo :)

Schönen Tag, que pasará?

lo sabremos el el próximo capitulo de: La rosa de Guadalupe no se lo pierdan ;3

por cierto, síganme  en Instagram, estaré publicando dibujos de Emma y otros personajes owo