-Estoy perdiendo la cordura por tu maldita culpa Min-
¿Existe una forma de saber que es correcto y que no lo es?
Siempre le repitieron que debía entregarse solo a un alfa, siempre creyó que era lo correcto entonces ¿Por qué se sentía tan bien fundir...
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-¡¡Min Momo!!- El grito de su vecino hizo que la taza de café resbalara de las manos de Jimin, rompiéndose en pedazos en cuanto toco el suelo.
Suspirando se agachó para recogerla cuando alarmado su esposo salió de su habitación.
-¿Estas bien?- El castaño asintió mientras recogía los pedazos de la taza.
-Los vecinos son ruidosos- Al ver a su pareja concentrada en terminar la tarea fue por servilletas para ayudarle a secar el liquido -No tienes que hacer esto amor- Taemin sonrió.
-Me gusta ayudarte- Jimin se sintió feliz, estaba seguro de que había encontrado al alfa perfecto. El rubio se acercó para dejar un suave beso en los labios contrarios, movimientos lentos y tiernos, llenos del profundo cariño que sentían el uno por el otro.
-¡¡Jodida mierda Momo!! ¡¡Deja de forcejear!!- Nuevamente el grito traspasó las delgadas paredes del departamento haciendo a la pareja terminar el beso.
-¿Crees que algo este pasando?- Preguntó Jimin con un tono claro de preocupación.
-No estoy seguro, tal vez solo sea un regaño- Ambos guardaron silencio intentando escuchar algo más, pero todo estaba en completo silencio. -Deberías desayunar. Llegarás tarde a tu primer día- El menor asintió sonriendo.
-¿Desayunarás aquí?-
-Le pediré a Minho que me compre algo- Jimin negó.
-¿Qué clase de omega soy si no alimento a mi alfa?-
-El omega con quien quiero estar el resto de mis días- Taemin dejó un beso en la coronilla contraria para tomar las llaves de su auto -Ahora debo irme, vete con cuidado. Suerte en tu día Jiminie-
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-Si me sigues gritando así los vecinos pensarán que me golpeas- Yoongi frunció el ceño mientras secaba el cabello de la menor con una toalla.
-Me importa una mierda lo que piensen los vecinos- La menor formo un puchero mientras ponía fuerza para no tambalearse, su papá era un bruto.
-El tío Seokjin dice que no debes decir groserías delante de mi-
-También me importa una mierda lo que diga- El mayor había tomado el cepillo para comenzar a peinar a la niña, le llevo 2 años aprender a hacerlo correctamente pero definitivamente ya no quería que esta regresara con piojos a casa, esas cosas le habían traído demasiada comezón.
