Cap.9.2

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_Norton Campbell_

Emily estaba atónita la vernos, yo solo podía rezar a todos los santos para que de alguna forma cayera un meteorito y nos matara a todos. Rápidamente Aesop la tiro al suelo y junto con Tracy la empezaron atar, comenzó a gritar así que Tracy le quito su venda a Eli y se puso en la boca.

-¿Y ahora?- le pregunte, seguía con Eli sobre mis hombros y nos acercamos a ellos.

-Esperar a Margo.

-Aquí estoy- di un brinco por el susto que nos metió la enana, en mi vida la había escuchado hablar, tarde un poco al darme cuenta que había tirado a Eli quien ahora estaba lesionado de su pierna.

-N-no hay tiempo, Luchino viene detrás de mí- la voz de Margo era hermosa, aunque un poco temblorosa, después de tanto tiempo sin hablar no me sorprende.

Rápidamente cargue a Margo y la ayude a subir por la ventilación. Aesop tomo en sus brazos a Eli y por mi parte tome la mano de Tracy para salir corriendo de ahí.

Íbamos por las habitaciones cuando escuchamos un grito de alguien o más bien un llamado.

-¡AESOP!- el mencionado se quedó paralizado, volteamos atrás y estaba el mismísimo Joseph Desaulnier sangrando de la cabeza y con una mirada fulminante hacia Aesop.

-¿No te habías encargado de ese pendejo?- le dije nervioso, Aesop me miro atónito y luego a Tracy. Solo salió una palabra de su boca.

-Corran.


_Aesop Carl_

La noche era hermosa, el aroma a rosas inundaba mis fosas nasales y la idea de que mañana en la noche escaparíamos me llenaba de esperanza.

Sentí como Joseph me rodeaba con sus brazos y empezaba a besar todo mi cuello. Esta era la parte que más odiaba, disfrutar sus caricias y sentirme culpable al mismo tiempo.

Hasta ahora seguía fingiendo que me tenía controlado y al parecer el no sospechaba nada. El amor es ciego. Esto no es amor. Me tomo del brazo y me hizo sentarme en sus piernas en la cama.

-Aesop ya no puedo, ya no puedo seguir así- recargaba su rostro en mi pecho y sentía como mi camisa se iba humedeciendo por sus lágrimas.

-Hable con Burke y la idea de que se quede con el hospital- algo no va bien sin duda- el acepto- alza su rostro para verme- nos iremos mañana a la mansión para que pueda continuar supervisando la empresa de mi padre-acaricia mi mejilla suavemente- vendremos de vez en cuando y así podrás visitar a tus amigos.

Todo lo que dijo me provocaron nauseas, no tenía pensado esto, había escuchado como discutía con Mary sobre su salud y que esta le recomendaba dejar a alguien que se encargara del hospital, pero no pensé que fuera tan grave para llegar hasta este punto y lo peor era tener que ir con él. Ya no habría nadie que lo detuviese para hacerme lo que quisiera.

No lo pienso mucho y me inclino para besarlo, al principio se sorprende, pero al cabo de unos minutos abre mi boca para poder juagar con mi lengua. Tiene que caer ante la lujuria, todo son iguales y el no es diferente. No en todo.

Mete su mano en mis pantalones y sus dedos acarician mi entrepierna lentamente, me pone encima de el para poder desabrochar mi camisa y repartir besos por todo mi torso.

-Mi-mi niño, solo mío- estas palabras rompen algo en mí, ya las había escuchado antes, de otra boca, de otra persona.

Me acerco mas a su rostro y empiezo a lamer sus mejillas mientras tomo lo mas discretamente que puedo un jarro que esta en la mesa de noche. Cuando lo tengo me alejo un poco de el y lo golpeo con este.

Es un hermoso espectáculo, el agua se esparce por todo su dorso, los pétalos de las rosas amarillas caen en su cabello y rostro, el rojo de la sangre mancha las sabanas junto con su piel blanca como la porcelana y una pequeña lagrima recorre su mejilla. Sus hermosos ojos me siguen viendo y una pequeña sonrisa se forma en sus delgados labios.

Tomo su rostro con mis manos y junto nuestras frentes, manchándome de sangre.

-Eres un horrible monstruo y aun así te vez hermoso desangrándote; te amo, te amo con locura y te odio al mismo tiempo, si fuera diferente seria tuyo y haría que tu fueras mío, nunca te dejaría ir...pero no te pertenezco y tampoco tu a mí, soy de ellos, soy de Jerry.

Beso suavemente sus labios para después sepárame y recostarlo delicadamente en la cama. Lo veo una ultima vez y el igual lo hace mientras más lagrimas caen de sus ojos.

Es hora de ir con mi familia.


_Margaretha Zelle_

Iba en las ventilas para llegar hasta el patio y tomar prestado la carreta del hospital, volteo hacia una de las rejillas que da hacia el pasillo cuando veo a Aesop corriendo con Eli en sus brazos.

-¡Corre perra, corre!- Norton va con Tracy en su hombro mientras esta le da golpes en la espalda para que vaya más rápido, atrás de ellos viene William y Violetta y mucho más atrás está el doctor Desaulnier con un trapo en la cabeza gritándoles que los atrapen.

Avanzo un más rápido y Aesop golpea a Naib con la puerta cuando este iba a salir, Norton tira algunas cosas que están en su camino.

-¿De qué te sirven esos músculos si tienes una piernitas?- le dice Tracy a William quien claramente está cansado por perseguirlos.

Aesop consigue esquivar a Ann, esta intenta tomar a Tracy del brazo, pero esta es mas inteligente y toma la olla que tiene Norton en la cabeza y la golpea con eso.

-¡Esa es mi chica!-grita Norton.

No pierdo mas el tiempo y avanzo lo más rápido que puedo hasta llegar a la parte trasera. Veo la carreta y los caballos y rápidamente me subo en ella y empiezo andar.


_Eli Clark_

Me duele la cabeza por el golpe, abro los ojos y me encuentro entre los brazos de Aesop mientras este corre.

-¿Aesop?- le pregunto este me mira rápidamente y sonríe.

-Por fin, ya casi llegamos, en cualquier caso- Cuando doblaos la esquina, Burke está en medio del pasillo, este nos hace una seña hacia otro lugar, no entiendo a qué se refiere, pero al parecer Aesop si ya que se dirige hacia ahí.

-Cuídala- alcanzo a escuchar de Burke.

Aesop golpea con su hombro la puerta y ahí nos espera Margo con la carreta. Aesop me subiré y después el.

No pasa un minuto cuando veo como llegan Norton y Tracy con los médicos pisándoles los talones. Norton lanza a Tracy hacia Aesop y sube rápidamente con Margo y esta pone en marcha a los cabellos, alejándonos del asilo.

Todos damos un largo suspiro y rápidamente viene a mí la pregunta.

¿Qué pasara ahora?

La receta del doctor *Identity V*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora