*La foto de esta parte es de una conversación real, y es muy importante para mí*
(A las personas que lean esto quiero decirles que estoy muy agradecida, porque en todas y cada una de las partes de este "cuaderno" dejo plasmados todos y cada uno de mis sentimientos, cada vez que me invade la ansiedad, el miedo, la tristeza, o bien, la felicidad en sí. Ya veis que esto es algo un tanto informal, poco preparado porque suelo escribir cuando se me enciende la bombilla, y últimamente suele ser en la madrugada. Igualmente, espero que os guste, escribo para autoapoyarme moralmente, y para compartir por primera vez mis sentimientos con más personas, me hace feliz compartirlo, me desahoga muchísimo❤)
-00:56 A.M.-
Otra noche más, me prometo que nunca volveré a cruzar el charco y mucho menos por ti, cuando en realidad todas las noches sueño con volver a cruzarlo y mi alma suspira indirectas a mi conciencia para que se dé cuenta que lo que realmente siento es que volvería a cruzarme toda Europa de nuevo para buscarte. Y créeme, te encontraría. Un hilo rojo con un tamaño tan inmenso no es tan fácil de ignorar. Y tú, vida mía, lo sabes muy bien. Lo sabes muy bien cuando mil tormentas han azotado nuestras costas y tú has sido quien ha conseguido volver a amarrar tu barco, buscando mi puerto. Buscándome de nuevo, cuando creías que me iba, cuando creías que me querías a dejar ir.
Siempre has tirado el dado del "quiero" y después has lanzado un "no debo" cuando sabías que ese segundo dado estaba amañado en tu contra, ¿cómo eres capaz de lanzar un dado que te perjudica la partida?
Dioses, esto no es un parchís para que mates mis fichas a la primera, "accidentalmente", haciendo la partida un poco más solitaria, cuando en realidad sabes que una partida al parchís es mucho más interesante cuando vamos matándonos fichas de una en una a lo largo de la partida, sin saber hasta el final de la partida quién va a ganar, y que eso es lo que realmente quieres.
Estoy mucho tiempo ya dentro de tu Jumanji y sé que cada movimiento mío en tu juego se desata un nuevo caos pero no me importa porque nadie dijo que fuera fácil, cada vez que me muevo en tu tablero, más me conozco las reglas.
Te crees que no me doy cuenta, y prefieres esconderlo para no dañarme, pero sea como yo a ti, o no lo sea, me amas tanto que tus tijeras no cortan nuestro inmenso hilo rojo, aunque me hagas jugar a Jumanji para permitirme intentar estar más cerca de ti, mientras atracas en mi peligroso puerto adueñandote de mis costas, igual que me matas fichas a la primera mientras jugamos al parchís.
En resumen, sí, volvería a cruzar el charco por ti, y jugaria mil partidas más a este juego.
Jeg elsker deg.
