One-Shots ~Pokespe

Kodoku

Tipo: One shot

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Palabras: 1100

Canción recomendada para la lectura: I Lost Myself (Munn) -multimedia-

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La soledad y necesidad te pueden manipular a tal punto que terminas haciendo cosas de las cuales te arrepientes toda la vida

Crystal meditaba sus acciones recientes.
Su corazón se había dividido en dos partes, las cuales iban en rumbos contrarios. Una se fue con aquél chico de ojos dorados en dónde sea que se encontrara. Y la otra con aquel metódico castaño.

Entre suspiros recordaba todo aquel desatarse que ella misma provocó hace unas semanas.
En ese tiempo aún estaba al lado de Gold, pero después de aquel viaje a Teselia y conocer a Lack, las cosas cambiaron.

El castaño se mudó a Johto y ella se veía con el de vez en cuando, hasta que las vistas se hicieron mucho más frecuentes; llegando las cosas a aquél sorpresivo beso.
Desde ese momento el corazón de Crystal se dividió.

Por días, en su mente rondaban preguntas que ella misma se respondía

¿Quieres a Lack?
Mucho

¿Quieres a Gold?

Por supuesto

¿A quien eliges?

A ambos

Eso no se puede

Lo se

Pasaron unos cuantos días más y ella seguía sin saber quehacer. Los amaba a ambos por más insólito que sonara.

Con Gold las cosas no iban del todo bien, pero no quería dejarle. Era mucho tiempo el que estaba ya con él que no se imaginaba un futuro sin aquellos destellos dorados. Sabía que él se veía con muchas otras chicas además de ella; y se lo pasaba, porque le quería.

Lack era otra historia. Con el le deparaba algo totalmente incierto y le intrigaba. Aquel chico supo como poco a poco ganarse un lugar en ese pequeño corazón suyo.

Si se quedaba con Gold, probablemente le rompería el corazón en algún punto. Lack era metódico y tranquilo, frío en ocasiones; pero sabía exactamente cuando y como dar alguna muestra de cariño y honestamente para ella, había veces en las que sus acciones le resultaban falsas o aburridas. Gold era una explosión de emociones; nunca se aburría y cada acción que él realizaba la tomaba por sorpresa.

Gold la hacía sentir viva. Lack era la tranquilidad que necesitaba en su vida.

Pero no dejaría a Gold. No podía, le amaba demasiado.
Pero en el fondo también sentía remordimiento.

Cuando comenzaron a salir, ella se encontraba en un punto muy inestable.
Los problemas con su madre y su extraña "relación" con Eusine la tenían estresada, preocupada y perdida.

Se sentía... Sola
Y no le gustaba

Quería salir de aquel agujero en el que sus problemas la habían atrapado; el problema es que no sabía cómo. Necesitaba que alguien la sacara y la mantuviera a flote.

Y ahí estaba él

Con esa sonrisa brillante y el cabello alborotado
Gold estaba dispuesto a sacarla
Lo malo, es que él no lo sabía.

Su relación era como la isla espejismo y el mundo exterior: iban en tiempos distintos.
Cuando el azabache estaba perdidamente enamorado, ella apenas si sentía algo por él.
Pero cuando ella estaba completamente enamorada, el sentimiento por parte del joven decaía de a poco.

Hace aproximadamente una semana, cuando creyó por fin tener el control de la situación y pudo tomar una decisión, las cosas se voltearon en su contra de una manera casi irreal.

Cuando fue a buscar a Lack, éste le dijo que se había cansado de esperar y que a pesar de quererla, una castaña había tomado su corazón de apoco y se iría de viaje a Alola con ella.

Cuando iba de regreso a su hogar, recibió una llamada de Gold pidiendo verla. Al llegar a el lugar acordado, el azabache fue bastante honesto y directo; diciéndole que la quería pero que su relación no iba a ningún lado y lo correcto era terminar. Agregando también que se mudaría a Hoenn con la rubia que había llamado su atención.

Ahora, en su departamento en Goldenroad, no hacía más que pensar.
¿Cómo fue que ella terminó así?
Desempleada, sola, perdida...
Porque claro, mientras tenía un embrollo en la cabeza, confundió unos archivos y los eliminó por error, provocando así su despido.

¿Cómo alguien como ella pudo terminar así?
Durante todo este tiempo, se estuvo saboteando a si misma. Perdió lo poco que tenía por algo que quería y al final termino con las manos vacías.
¿Por que no pudo tomar una decisión?
Ella; una mujer centrada e inteligente que aspiraba a la perfección fallo de una manera totalmente ridícula

Mientras estaba acostada sobre el sofá de su pequeña sala, sentía que la cabeza le daba vueltas.

Quería ser feliz, pero sabía que no podía. Quería estar sola, pero no le gustaba. Sabía que era fuerte, pero se sentía vulnerable. No sé sentía bien, pero tampoco mal.

Tenía los sentimientos completamente entrecruzados.

Quería acabar con todas esas emociones y todos sus pensamientos, entonces lo decidió.
Se lanzaría de la azotea del edificio.
Acabaría con todo en ese instante.

Salió de su apartamento y subió las escaleras de emergencia hacia la azotea. Estando ahí, comenzó a caminar hacia la orilla, llagando al final de la marquesina.

Un paso
Un solo paso al frente
Y todo acabaría

Pero como lo único que hacía últimamente era dar pasos hacia atrás, fue exactamente lo que hizo
Retroceder

Por caminar hacia atrás rápidamente, termino tropezando con sus propios pies, provocando que cayera de espaldas en el suelo.

Claro, era demasiado cobarde como para terminar con su vida.

Se quedó ahí, tirada en el suelo. No sé movería de ahí porque, simplemente no tenía razón para ello.
Lo único que llegaba a sus ojos en esos instantes era el azul del cielo, que poco a poco se tornaba obscuro, indicando el anochecer.

Le dolía la cabeza; tanto por el golpe como por la cruzada que se llevaba a cabo en su mente. Definitivamente le dolía de tanto pensar.

Sentía los latidos de su corazón, podía escuchar su propia respiración, sentía el cuerpo demasiado pesado como para mover un solo dedo.

Ella misma había enredado los hilos de su destino. Los entrelazó y apretó tanto que algunos terminaron rompiéndose; y como no pudo desenredarlos quiso cortarlos.
[I]Que patética.

Tenía que desenredar los hilos que le quedaban y aflojar los que estaban tensos. Se tenía que ir.

Había pasado alrededor de una hora desde que subió a la azotea, incluso podían divisarse ya las primeras estrellas. Se puso de pie, sacudió su ropa y bajo nuevamente a su apartamento.

Ya ahí, se puso su pijama, se preparó un té y saco su portátil. Se sentó en la mesa de la cocina y comenzó a buscar sitios turísticos. Sorpresivamente comenzó a llover; extraño ya que no se había pronosticado.

¿Kanto? Demasiado cerca

¿Sinnoh? Demasiado frío

¿Hoenn? Ni loca

¿Kalos? ¿La región del romanticismo? No por ahora

¿Galar? Buena opción; la noria no se veía tan mal