Holaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
¿Cómo han estado mis queridos lectores? espero que muy bien, después de un largo tiempo me tienen nuevamente de vuelta, es un capítulo pequeño pero espero que lo disfruten, no olviden comentar para saber si les sigue gustando la historia o darme sus opiniones, bueno, me despido y los dejo continuar con su lectura....
Sayonaraaaaaaaaaaaaa
De regreso a casa, solo hubo silencio, sus miradas no se cruzaron ni una sola vez y cuando sus caminos estaban a punto de separarse, Morinaga decidió tomar la iniciativa.
― Sempai- hablo tímidamente- ¿podemos hablar de lo sucedido?- no hubo respuesta por la otra parte, Souchi seguía caminando sin mirar atrás― sé que estas molesto pero en algún momento tendremos que hablar, tengo muchas dudas y me gustaría que me las aclararas- sin recibir respuesta cabizbajo bajo la cabeza y suspiro con melancolía.
― Esta bien- fue la corta respuesta que recibió y una ligera chispa de luz ilumino el día de aquel joven.
Llegaron al apartamento, abrió la puerta y entro en silencio, prendió la luz y dejaron las mochilas en el piso, Souchi paso sin ser invitado y se dirigió a su cuarto sentándose en la base de la cama como era su costumbre. Morinaga solo lo observo, no podía evitar sentir felicidad porque finalmente parecía que sus sueños se hacían realidad pero a la vez un sentimiento de culpa lo invadía, espero que el agua se calentara para servir un poco de té.
― Sempai- habló pero ni siquiera obtuvo una mirada de su parte, su rostro parecía molesto y la mueca de fastidio en sus labios no había desaparecido desde que salieron del hospital, tomo un sorbo de su té y se animó a hablar― Sempai yo tomare la responsabilidad
― IDIOTA, yo no necesito de tu compasión, esto sucedió por un descuido mío, no vengas aquí diciendo tonterías, "tu responsabilidad" yo no necesito nada de tu parte, yo solo puedo hacerme cargo de la situación- grito exaltado
― No quise decir eso, yo me refería a que yo te ayudare, también fue mi culpa, yo no pude contenerme, debí... debí alejarme de inmediato pero yo en verdad no lo sabía, dime una cosa- levanto la mirada y con ojos suplicantes pregunto― ¿Por qué no me habías dicho que eras un Omega?- trato de evadir su mirada pero no podía y aunque quería seguir enojado aquel joven lograba tranquilizarlo
― Tsk- chasqueo la boca con enojo, con esa mirada de cachorro no podía evadir la pregunta― no es que lo quisiera ocultar, no es obligatorio revelar tu genero
― Pero si tu sabias que yo era un alfa ¿por qué no me lo dijiste? No podía ser un peligro para ti
― No había necesidad, podía controlar mi celo a la perfección y si intentabas propasarte conmigo podría molerte a golpes en cualquier momento- sentencio
― "Jejeje así que no era una amenaza para el, aunque si no hubiera sido por la droga nada de esto hubiera pasado"- pensó y una profunda pesadez se alojó en su corazón
― Y bien ¿Qué vamos hacer?- azoto su taza en la mesa después de todo el joven enfrente suyo parecía perdido en sus pensamientos y una mirada decaída se mostraba en sus ojos y por alguna razón le molestaba
― ¿Eh?- miró confundido, se había perdido tanto en sus pensamientos que no había escuchado nada de lo que le había dicho
― Deja de estar en la luna- lo tomo de la oreja y lo jaloneo haciéndolo chillar del dolor― el doctor dijo que tus feromonas son importantes para el desarrollo adecuado del bebé, ya pensaste que vamos hacer
― Yo... yo pensaba que podríamos vivir juntos- dijo ilusionado
― Ni lo sueñes- de inmediato lo freno en seco― después del trabajo pasaremos un par de horas juntos, aunque quiera alejarme de ti, lo mejor para el bebé es que tratemos de estar la mayor parte del tiempo juntos
― No, Sempai yo no me refería a eso, yo... te quiero- Souchi se sentó de golpe― no pienso dejar que malinterpretes mis palabras y las transverses en algo completamente diferente a lo que quiero expresar, esta vez no dejare que haya ni un solo malentendido.
― ¿Eh? ¿de qué demonios estás hablando?- gruño molesto
― Déjame terminar por favor- suplico y Souchi solo quedo callado― yo no solamente lo hago por obligación, ya te lo había dicho, yo... estoy enamorado de ti- un fuerte latido golpeo el corazón de Souchi haciendo teñir de carmín sus mejillas― quizás para ti sea un fastidio mi simple presencia pero para mí tú y el bebé son muy importantes, quiero que vivamos juntos, por tu bien, por el bien del bebé y por mí, sino estoy a su lado siento que moriré, yo sé que tu odias a los alfas pero por el bebé ¿no puedes hacer una excepción y vivir conmigo?- lo miro con ojos de cachorro esperando expectante su respuesta, rogando a Dios que no lo rechazara, Souchi solo lo miraba con molestia, gruñía y gruñía y se removía incomodo en su lugar
― Bien, viviré contigo en lo que el bebé nace- una brillante sonrisa ilumino el rostro del pelinegro― esto paso por un error pero no soy tan desalmado para poner en riesgo la vida de otro ser- se levantó y tomo sus cosas listo para salir
― Sempai, espera, yo te acompaño- dijo saltando de su lugar y en un instante ya se encontraba tomando su saco para salir
― Como molestas, no necesito que me cuiden
― No es eso, solo quiero acompañarte, hoy fue un día muy estresante para ti, podrías sufrir algún mareo y caerte
― Déjate de tonte...- no termino su frase porque un mareo lo hizo tambalearse y de no ser por Morinaga hubiera caído
― ¿Ves?, mejor quédate por hoy- le suplico
― Aléjate- sonrojado intento apartarlo pero en un instante el lugar era invadido por las feromonas de joven pelinegro, sin saber como dejo caer su mochila, Morinaga lo acerco a su pecho y por inercia se recargo en él, por un instante sintió una paz interior y pensó si ha esto se refería el doctor cuando le dijo que sus feromonas lo calmarían, se dejó mimar unos minutos más hasta que...
― ¡BANG!- con un derechazo salió un joven volando hasta el otro lado de la habitación
― Sempai ¿por qué me golpeaste?- se sobaba su mejilla adolorido
― ¡IDIOTA! Jamás dejare que me controles con tus feromonas- dio media vuelta y salió corriendo del departamento
― ESPERA- tomó su saco y salió rápidamente de la habitación―Sempaiiiii, esperamé, no fue intencional, perdóname por favor- seguía suplicando durante todo el camino hasta que se hartó y lo golpeo
― ¿Que no puedes callarte? ¿no ves que vamos en la calle?- apretó los dientes conteniendo las ganas de partirle la cara en ese momento
― Lo siento, solo perdóname ¿si?
― Tsk- dio media vuelta y continua con su camino
― ¿Puedo acompañarte?
― Eres una molestia, has lo que quieras- grito al mismo tiempo que se alejaba, el pelinegro sonrió y salió corriendo detrás de él cambió el tema y hablo sobre los resultados de laboratorio haciendo que Souchi escuchara atentamente
/*En la casa de Sempai*/
― Sempai entonces ¿qué vamos hacer?- pregunto curioso después de todo las cosas no se aclararon en su totalidad
― Grrr- gruño de fastidio mientras lo miraba con una mirada asesina haciéndolo retroceder para mantenerse a salvo- después del trabajo conviviremos un par de horas hasta hayar un lugar lo suficientemente grande para convivir los dos y cuando lo tengamos nos mudaremos.
― Pero ¿qué le vas a decir a Kanako?, no puedes irte solamente sin decirles nada- reclamó
― No te preocupes por eso, dentro de tres semanas vendrá mi padre y Tomoe regresara de América, ese día hablare con mi familia y les contare sobre el embarazo, así que prepárate- sentencio señalando al joven en tono de advertencia
Morinaga quedo atónito, todo estaba sucediendo muy rápido ¿En verdad estaba pasando o solamente eran una más de sus alucinaciones que jugaba con su mente?, un hormigueo recorría todo su cuerpo, respiro profundo y solo rogó a Dios que esto no fuera un sueño, apretó su puño cerca de su corazón y con una gran sonrisa regreso corriendo a su apartamento para inundarse en ese dulce sentimiento llamado amor
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Si tu me aceptaras
RomanceMorinaga es un joven alegre y carismático que esta enamorado de su Sempai conocido como un demonio por su carácter explosivo pero su amor es no correspondido. En una noche de tragos por algunos sucesos inesperados se cumple su más grande anhelo, ¿al...