El Chico de Ultimo Año (PAUSADA)

◕ Capítulo. Nº 49◕

Mazmorras...

— Bien, hasta aquí llego yo — Logan veía a Brooke quien lo veía de reojo.

— Es extraño no verte en la sala común — Admitió la chica Strait.

— No era mi lugar, nunca lo fue.. pero no era tan malo — Logan alzo los hombros restándole importancia.

— Claro... — Contesto Strait con voz baja — Me voy — Dijo la joven antes de decir la contraseña, pero Logan la tomo del codo.

— Te veré mañana Brooke, y tampoco es pregunta, te estoy avisando para que no faltes a tus comidas, ¿De acuerdo? — Strait hizo una mueca, pero asintió, Logan sonrió amable antes de girarse.

Al entrar había algunas personas en la Sala común, todos los ojos fuero hacia ella cuando notaron su presencia.

— Vaya, ¿por fin saliste de la enfermería? — Un grupo de Slytherin se le pararon enfrente.

— Déjame pasar, quiero descansar — Esquivo al pequeño grupo.

— No dejaras que te demos nuestras condolencias — Brooke se detuvo de golpe y giro hacia la chica.

— ¡Callate! — Le grito molesta.

— Tranquila Strait, no es con mala intención — Dijo con sarcasmo — Es más, para que veas que los Slytherin somos solidarios, te ayudaremos a estar de acuerdo al luto de tu padre — Brooke los miro interrogante, el grupito movió sus varitas y de repente la chica sintió como algo caía sobre ella, cerro sus ojos y llevo sus manos hacia su cabeza, una sustancia negra la baño completamente, Brooke paso sus manos sobre su rostro quitando lo que fuese que tuviera encima.

— Ahora si estas de acuerdo al luto — Las risas no tardaron en escucharse, Brooke volteo hacia el grupo y los demás Slytherin que estaban en la sala común, varios sonreían burlitas y otros no veían aceptable la escena, pero no hicieron nada, la situación en Slytherin era muy tensa, desde que se descubrió lo de White quien era considerado un Slytherin digno y lo habían perdido por Strait.

La joven respiro profundamente, esa cosa escurría por su ropa, ya cansada se giro y fue directo a los baños para asearse, entro y limpio esa cosa de su cuerpo y piel, no parecía haber pasado nada, y solo era agua negra o algo así, Brooke se enrollo en una toalla, sentía sus ojos arder por contener sus lagrimas, se observo al espejo y para su horror vio que su cabello era color negro, ya no quedaba ese cabello claro que amaba tanto, algo que le recordaba a su abuela, quien le había heredado esa característica.

Eso fue todo, y lloro... se sentía derrotada y humillada por su propia casa, pero no podía hacer nada, eso era lo que tenia que sufrir por lo que había hecho en su corta vida, Brooke se fue a su habitación, se sentó en el borde de su cama, viendo sus manos sobre sus rodillas.

— Llorar nunca resuelve nada —Brooke salto en su lugar, pero al ver al fantasma de su familia no sabia si verlo molesta o aprenciba.

— ¿Qué haces aquí? — El fantasma se posiciono frente a ella, este flotaba viendo a su descendiente.

— Estoy aquí, porque se que tu seras la descendiente que rompa la maldición y por fin mi familia será feliz sin esa maldita codicia que arruina sus vidas — Brooke rió sin ánimos.

— No será que tú quieres que se rompa, para que por fin cruces al otro lado — El fantasma negó lentamente.

— Claro que no, niña — Brooke desvió la mirada — Yo deseo lo mejor para mi familia — Brooke se levanto y se acostó en su cama — Lamento lo de tus padres, no lo mereces... sigues siendo una niña — Brooke abrazo una almohada — Pero veras que esto te hará más fuerte y saldrás adelante, incluso lo que acabas de pasar, ellos pagaran por lastimarte Brooke, se que estarás bien — El fantasma tuvo el impulso de tocarla pero solo la travesaría y ella sentiría frió a su tacto.