Secuestrada: 16 Editado🌻

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Se hundió en su cuerpo. Tn contrajo la respiración, apenas y lograba dar señales de vida. La estaba penetrando tan intensamente que hasta soltaria lágrimas.

—ah…. Soltó un pequeño suspiro. Jean se separó para poder mirarla, para poder gozar de ese enorme privilegio. Verla así… exitada, jadeante, transpirando Lujuria y gimiendo para él y solo para él. —oh sí…. Murmuró ella, ahora cerrando los ojos. Apretó a Jean por la espalda, este volvió a sacar su miembro para rozarla lentamente por las labios vaginales de Tn. —hazlo de nuevo por favor…

—si preciosa…. Le respondió él. Y la verdad es que tampoco aguantaría sin metérsela. Sin sentir ese delicioso apretón. Subió las caderas y volvió a bajarlas para satisfacer a Tn de nuevo.

—¡ahh! Sí… joder, sí….esta vez ella grito más fuerte. Cerrando los ojos con fuerzas. Jean sintió que venía el paraíso. Jean se correría con sólo verla en ese estado. Le ponía tanto… más, mucho más de lo que ya estaba.

—¿te gusta?

—sí, me encanta…me encanta…. Dijo ella, poseída por sus palabras. Entonces el decidió que la haría gritar más esta vez. Sus brazos se tensaron y volvieron a alzar sus caderas.

—eres deliciosa. Murmuró.

“deliciosa… y toda para mi”.

La volvió a embestir con fuerza, mientras ella solo lo apretaba de la espalda con la esperanza de no demostrarle que en realidad le encantaba lo que le estaba dando. Pero fue imposible.

—¡sigue! Más…. Le ordenó. Jean. Sonrió ligeramente. Una bonita sonrisa que habría echo que cualquiera mujer se moje al instante. El movimiento de caderas se hizo más continuo, Tn lo apretaba más fuerte, y él se correría en cualquier momento. Los gemidos de Tn lo enloquecían, cada vez más fuertes, más finos, más exitantes. Hacían que cada movimiento, cada penetracion, cada vez que el bombeaba con tanta fuerza y lujuria… nunca fueran suficientes. Necesitaba más. Llenarla por completo. Hasta que se corriera infinitamente. Y que sobre todo, recordará ese momento para toda su vida.

Una vez más volvió a aplastarla, su pene se encontraba esta vez en todos su interior.

—Jean…. Susurró ella. Arqueando la espalda. Él se inclino para besarle el cuello.

—di…me…. Logró decir él, y sacó su polla, húmeda, cubierta por todos los flujos de Tn.

—esto es increíble. Admito ella, ahora intentando abrir los ojos y recuperándose un tanto por todas esas maravillosas embestidas.

—vaya que lo es…. La miró a los ojos. Tn miraba el umbrar sigilosamente. Se había quedado callada. Solo su pequeña respiración, ahora ligera, se escuchaba en medio de la noche. Lo había hecho… habían tenido sexo como tanto había querido él desde el primer día, y como tanto lo había deseado ella desde el primer momento. Los ojos de Tn brillaban, empezaban hacerse pesados… era cierto, después de un maravilloso polvo… le provocaba dormir.
—¿habías imaginado esto?. Le preguntó él, despojandolos del silencio.

—¿el que?

—tener sexo con tu secuestrador…

—nunca. Le dijo ella. Ahora cerrando los ojos. La había dejado desecha, y ni siquiera habían llegado al climax, al orgasmo. Sí… también era verdad, después de un buen polvo sólo te quedaba dormir… pero parecía que para él… eso no había significado un simple polvo.

Espero que les esté gustando mucho con demasiado bye 💛💛💛💛

Secuestrada (JeanCarlo León y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora