💔 Capítulo tres 💔

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—¿Qué vas a ordenar? Pide todo lo que quieras sin pena.

Taehyung y Yoongi estaban en la heladería, parados cerca del mostrador, decidiendo qué comprar, el menor tenía fama de glotón, pero en ese momento no tenía muchas ganas de comer algo.

—Sólo quiero una malteada— dijo después de pensarlo bien.

—¿Estás seguro?— preguntó extrañado el mayor, pues él sabía lo mucho que Taehyung podía llegar a comer.

—Es que comí algo en casa de Jimin, con la malteada es más que suficiente— y lo primero que dijo era verdad, pero eso no era un impedimento para que comiera mucho más, él podría hacerlo sin problema, sin embargo, pocas veces tenía la oportunidad de estar a solas con Yoongi,  por eso quería aprovechar el tiempo con él y en lugar de estar ocupado comiendo, quería hablar con él mayor y admirar su hermoso rostro.

—Entonces pediré una malteada yo también— dijo el mayor.

Yoongi pidió las dos malteadas, pagó y esperó a que se las entregaran, mientras tanto, Taehyung buscó una mesa que no estuviera rodeada de muchas personas, al encontrarla se sentó a esperar al mayor y le mandó un mensaje a Namjoon avisándole que se había encontrado con Yoongi y lo había invitado a comer un helado.

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Taehyung le platicaba al mayor sobre sus travesuras en la escuela; como le iba en sus clases; y cuales eran sus materias favoritas, también se quejó porque algunos profesores le dejaban mucha tarea y no podía ir a casa de Jimin a jugar videojuegos. El mayor lo escuchaba con atención y sonreía por la forma en que el menor relataba algunas de sus anécdotas.

Yoongi pensaba que Taehyung en ocasiones se veía serio y muy maduro, pero la mayor parte del tiempo parecía un chico alegre e inocente, que se maravillaba con las cosas más simples, y esa era la faceta que más le gustaba del menor, porque le recordaba a su niñez, a esa época en la que todo parecía más sencillo. Ahora todo era diferente para él, solía preocuparse y estresarse por cosas mínimas, pero cuando estaba con el menor se olvidaba de todos sus problemas, hablar con Taehyung era como escuchar una de esas melodías que ponía cuando estaba cansado y que lo ayudaban a relajarse y le alegraban el día.

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Yoongi acompañó a Taehyung hasta la puerta de su casa, ya era un poco tarde cuando salieron de la heladería y el mayor no quiso que Taehyung anduviera solo por la calle, así que caminaron hasta llegar al frente de la casa.

—Muchas gracias por todo hyung, fue muy divertido terminar la tarde con usted, aunque casi no lo dejé hablar— el menor estaba avergonzado, porque una vez comenzó a hablar no pudo parar, estaba tan emocionado contándole al mayor sobre todas sus anécdotas, hasta que se dio cuenta que sólo él estaba hablando.

—No te preocupes, no soy de hablar mucho porque no tengo cosas importantes que contar, además, sabes que me gusta escucharte hablar y que me cuentes tu día, siempre tienes algo interesante que decir.

—Usted siempre es tan lindo y considerado conmigo hyung, por eso lo quiero mucho.

—¿Más que a Namjoon?

—Mucho más «A usted lo quiero de una manera diferente», pero no se lo diga, porque ya no me dejará dormir con él cuando tenga pesadillas.

—Está bien— le respondió revolviéndole el cabello y con una sonrisa —Bueno, debo irme, pero primero quiero ver que entres a tu casa, y no te desveles hablando con Jimin ¿Sí?—  le dijo y le dio un beso en la frente, el menor se sorprendió, Yoongi nunca le había dado un beso y eso lo hizo gritar de emoción, internamente claro. —Vamos, entra ya— habló el mayor al ver que Taehyung se quedó ahí parado sin reaccionar.

—S-sí, v-voy hyung— el menor caminó hasta la puerta, sacó la llave que cargaba en la bolsa de su pantalón y abrió la puerta, volteó por última vez para ver a Yoongi y se despidió agitando su mano, y con una enorme sonrisa, el mayor hizo lo mismo.

Al entrar a su casa corrió a su cuarto y sacó el celular de su pantalón. Sentía mucho no poder cumplir con la petición de su hyung, pero necesitaba hablar urgentemente con Jimin.

Conquistándote -Yoontae-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora