El caballero de la luz

13 - Encuentro

Pasaron dos noches sin dormir para que Sir Percival pudiese llegar a donde la dama del lago antes que Galahad, a todo galope sigue Sir Percival hasta que de pronto se detiene después de adentrarse en un bosque. Observa así sin más a la dama del lago a lo lejos y se acerca a ella, se baja de su caballo y se acerca a una clase de kiosco en medio de un lago azul de agua cristalina y plantas hermosas, Sir percival mira un poco el suelo y ve que hay pisadas y tierra movida.

- veo que el destino ha deseado que me revelara a ti, dime, qué deseas? *dice una eriza de color rosado*

- Eres la dama del lago Nimue? *pregunta tosca*

- en efecto, tu eres Sir Percival, la única caballero de camelot mujer, impresionante *dice muy sonriente*

- no tengo tiempo para esto, dime qué le dijiste a Galahad y a dónde fue!

- desesperada estas por hacer justicia, sin embargo todavía no comprendes dicha palabra

- te dije que no tengo tiempo!

Sir percival intenta intimidar a Nimue pero esta al momento de tocarla desaparece

- sigue el sendero y la justicia encontrarás *resuena la voz de Nimue por los aires*

Sir percival sigue el sendero hasta que se encuentra a Galahad admirando un pozo

- ya no hay a donde ir, entrégate y te dejaré vivir en el calabozo de por vida *dice Sir Percival*

- te estaba esperando, aqui yace nuestra prueba *dice Galahad calmado*

- yo no tengo prueba alguna que hacer, entrégate y no me hagas perder mi tiempo

- en este pozo está la prueba que definirá nuestro propósito, algo que llevo mucho tiempo queriendo saber, Nimue me dijo que te esperara, puesto que al parecer es una prueba que ambos debemos realizar, dime, harías todo por tu Rey?

- ya fue suficiente!

Sir percival se acerco y Galahad se lanzó al pozo sin miedo alguno

- aahhhgggg, qué demonios pasa en este maldito bosque! *dice para después saltar*

(Momento después)

Sir percival despierta en una playa desierta, sin palmeras u arboles, se dispone a ponerse de pie y admira un castillo no muy lejos de ella

- no habrá de otra que explorar... tremendo desastre, cuando vea a Galahad le partiré las piernas, a ver si me deja de dar problemas

Sir percival emprende su camino, pero no pasan ni 10 minutos cuando empieza a sentir un calor tremendo en su armadura, percival intenta aguantarlo puesto que su armadura es inseparable para ella como caballero, hasta que termina por rendirse ante el calor

- POR QUÉ DE REPENTE HACE TANTO CALOR !!! *se quita la armadura*

Al despojarse de la armadura de manera antinatural todo el calor que sentía se cambió por una frescura agradable

- *siente la brisa soplarle agradablemente* este lugar es raro... ya ni me acordaba lo que es salir al exterior sin armadura... no me agrada

Sigue su camino hacia el castillo abriéndose paso por la jungla, cortando las matas que se interponen en su camino, a medida que va cortanto, hojas más grandes y de mayor cantidad se van interponiendo seguido de tallos con picos en las hojas que sigue cortando, llega un punto en el que Sir percival se tropieza con una liana y corta levemente en los brazos que usó para cubrirse la cara y termina en el piso ensuciandose de tierra

- *suspira* ... estoy muy cansada, tengo mucha sed, hambre... mejor descansaré un poco *se queda durmiendo hasta la noche*

Cuando Percival despierta, ve que ya es de noche, se pone de pié y nota que el enjambre de hojas y tallos puntiagudos ya no están, en cambio hay incluso un camino en el piso marcado y luciérnagas que iluminan casi todo

- este lugar es muy extraño, es como si estuviera vivo y me castiga, como si quisiera decirme algo

En ese momento a Percival le gruñe el estómago

- *suspira* mejor busco alimento (enfunda su espada), pero esta vez sin mi espada

Percival camina tratando de ver si puede encontrar algún arbol de fruta, explorando un poco percival logra ver un arbol manzano al cual le retiró unas cuantas manzanas para cenar

- *muerde la manzana* que bueno que hay hay fruta aqui, solo me falta agua, las manzanas son frescas, pero necesito hidratarme

Sigue buscando hasta la saciedad pero no encuentra ningun lago o pozo cerca

- *cansada* espero que haya un pozo en el castillo, mañana iré, ahora necesito fuego...  tendré que buscar leña seca

Pasa el rato y Percival logra reunir leña, yesca, pedernales para hacer chispas

(Enciende la fogata)

- *se sienta* agh... por fin un descanso, ojalá y galahad esté de camino al mismo castillo, no falta mucho para llegar, cuando llegue le daré una buena golpiza y lo arrestaré *se acuesta hacia arriba y suspira* tengo sed... no puede ser... no me había dado cuenta, todo este tiempo he estado bajo palmeras desde que me adentré más en la isla, palmeras con COCOS!!!

Percival rapidamente logra bajar un par de cocos y los abre para beber su agua, cuando termina solo se dedica a descansar delante del fuego

- *admirando el fuego* ... creo que no había tenido tanta paz en mucho tiempo, creo que me he enfocado tanto en defenderme de esta isla y sobrevivir en ella que casi me olvido de que hay una disputa en Camelot

Sir percival duerme plácidamente, a la mañana del día siguiente se despierta, se alimenta de un par de manzanas que le quedan, se bebe un coco y emprende su camino hacia el castillo en busca de galahad para arrestarlo

Percival avanza y nota una gran diferencia del día anterior a este, el camino va directo y hasta el clima es más fresco, llega al castillo abandonado, Sir percival escala el castillo y se le hace una vaga idea sobre algo, la cual deja ir al localizar a galahad desde lejos, Galahad se percata de la presencia de Percival y se dispone a correr por el desolado castillo

- deja de huir cobarde! *dice Percival enojada*

Percival persigue a Galahad por el castillo hasta que llegan a una sala del mismo, Percival logra atrapar a Galahad quedando ella encima de Galahad en el piso y procede a golpearlo y muy fuerte, dejándole morados y cortadas en la cara

- Pára, por favor, un minuto *dice Galahad agitado*

- tu te vienes al camelot y ahi te pudrirás en la cárcel *dice Percival molesta*

- ya... ya estamos en cámelot *dice con dificultad*

Percival iba a golpearlo otra vez hasta que recordó la idea vaga que tenía, se separó
Y empezó a ver la sala

- ... no puede ser *dice Percival*