James

Asher

De: James.
Para: Odette.

Te quiero, te quiero, en serio lo hago, te quiero como para salir, te quiero como para ver una película, tomarnos las manos, platicar sobre tu día, hablar hasta que el reloj marque las 12, te quiero para jugar, reír y poder ser felices, pero no te amo, no siento que sin ti moriría, no te amo porque no te tengo en mi mente cada que veo algo que te gusta, no te amo porque ni siquiera recuerdo las cosas que te gustan, no te amo porque me cansa escucharte por mucho tiempo, porque siento que me atosigas, que me asfixia tu cercanía aunque no estemos pegados, no te amo.

James cerró su cuaderno, no le diría eso a Odette, ella lo cuidaba, lo amaba y lo miraba con tanto amor que no podía decirle algo como eso.

James, en ese momento quería hablar con Asher, quería saber como estaba, quería pasar tiempo con él, hablar por horas con él, saber que sucedió en su fin de semana anterior.

James estaba tan en las nubes que no veía el daño que le hacía a Odette con su indiferencia y a Asher con su cercanía.