SILVER BLADE ©

PUNTO Y APARTE

Ambos impactaron fuertemente contra la calzada. Pero Peter se las apañó para aterrizar de pie después de que su cuerpo rebotara contra el agrietado asfalto.

El padre comenzó a disparar contra Steve con su escopeta, pero este se cubría con su cuchilla de gran tamaño y el restante keblar que quedaba en su traje.

Peter localizó un centurión despedazado a su derecha, del cual colgaba su brazo convertido en un gran puñal y lo arrancó.

Steve le arrebató la escopeta al padre y le agarró del cuello elevándole mientras se volvía a poner de pie- Gran error por su parte caballero- dijo Steve con otra vez su maníaca sonrisa.

Aquel trozo de centinela fue arrojado fuertemente contra el brazo de Steve dejando caer al padre al suelo.

Peter guardó sus espadas y saltó sobre Steve que volvía a estar en suelo y comenzó a golpearle fuertemente la cara, una y otra vez, Steve intentó defenderse con un único brazo bueno, pero Peter se lo dislocó cuando este intentó agarrarle la cara y continuó pegándole sin parar, la sangre de Steve ya salpicaba sus puños.

Por detrás escuchó un gritó que le decía- ¡PARAAA! - era Olivia- No demuestres que eres en lo que ellos te han convertido.

En ese momento por detrás le pareció ver a otro ninja, era muy parecido a él, pero vestido casi igual que él solo que su traje estaba casi gris, y los ojos con lentes oscuras.
Peter se frotó lo ojos mientras escuchaba las palabras tranquilizadoras de Olivia al retirar sus manos de sus ojos esa persona había desaparecido.

-Céntrate en mi voz- repetía Olivia tomando de la mano a Peter y apartándolo de Steve.

-Ya está, ya pasó- dijo Olivia.
La cuidad estaba en silencio absoluto, y Peter parecía muy desorientado y agotado.

Cuando quiso darse cuenta se dio la vuelta y Steve había huido, dejando solo aquel trozo puntiagudo del centurión clavado en el suelo.

La niña pequeña salió de la camioneta y fue hacia Peter subiendo sus brazos para que este la acomodar entre los suyos.

- ¿De quién es la pequeña? - preguntó Olivia soltando la mano de Peter.

-Creo que ahora ya no tiene a nadie- respondió Peter- Pero igualmente pienso averiguarlo.

Segundos después una pequeña multitud se aproximó hacia él. - ¿Quién es usted? - preguntó uno de ellos.

-Es un superhéroe- aclaró un niño más atrás- ¿Tu nombre de superhéroe?

Peter dejó a la niña en el suelo y dijo- No tengo de eso.

Un gran silencio se hizo entre todos hasta que una voz familiar sonó de fondo diciendo- Silver Blade.

Todos comenzaron a halagar a Peter, este agradeció todo aún tapado con su capucha y tu tapabocas, se dirigió hacia donde se suponía que debería estar Steve, agarró aquella estaca del suelo y guardándosela observó que no había rastro de sangre alguno que seguir.