Capítulo 6

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Una vez llegaron y se subieron al auto se dirigieron a la casa (mansión) de Renge, en la cual se debía de encontrar su tío, Akiro estaba nerviosa, muy nerviosa, no sabía que le podía decir su tío y eso la ponía en un estado fatal, pero por otro la...

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Una vez llegaron y se subieron al auto se dirigieron a la casa (mansión) de Renge, en la cual se debía de encontrar su tío, Akiro estaba nerviosa, muy nerviosa, no sabía que le podía decir su tío y eso la ponía en un estado fatal, pero por otro lado, Renge seguía feliz, solo que ahora estaba agarrada del brazo de Akiro, aunque la visita de su padre en realidad ya no le importaba mucho, se podría decir que era feliz con la sola presencia de su primo, pero cuando ya estaban por llegar se dio cuenta de que su prima no estaba bien, se veia preocupado.

Renge- ¿Estas bien Aki-kun? - le pregunto antes de bajar, pues ya habían llegado.

A tal pregunta lo único que pudo hacer Akiro fue negar, no quería que su prima se diera cuenta de que su papá lo incomodaba.

Akiro- No es nada Renge, solo me siento un poco cansado, eso es todo- le mintió, no le gustaba mentirle, pero eso a decir verda tampoco era una novedad.

Renge al ver que no tenía nada "grave" su prima se bajó del auto, donde espero a un lado para dejar que su primo bajara, una vez bajaron las dos se dirigieron a la puerta de la mansión y una vez entraron se encontraron con el padre de Renge.

Reinard- ¡Hija! Me alegra verte - le decía mientras le daba un abrazo, el cual correspondió Renge aunque no muy entusiasmada.

Renge- Hola papa, tiempo sin verte - fue lo único que se le ocurrió decir, no podía decir de verdad que no lo extraño, pero tampoco es que le allá hecho falta, bueno desde su punto de vista.

Reinard- ¿Te gustó mi sorpresa? - le pregunto mientras se separaba de ella y volteaba a ver a Akiro, acción que imitó Renge y al darse cuenta de que hablaba sonrió.

Renge- ¡Claro que me gustó! Gracias papá - le decía mientras corría y se colgaba del brazo de Akiro.

Por otra parte Akiro no sabía cómo sentirse por el comentario de su tío, pues a su parecer daba a entender que era un objeto, algo que puede ser dado a cualquier persona, no lo malinterpreten, no le molestaba hacer cosas por o para Renge, pero era diferente cuando su tío lo decía, se podía dar cuenta de que a el jamás le agradaría su presencia, pero dejó de pensar en eso en el momento que Renge aplicó un poco más de fuerza en su brazo, dando a entender que quería atención.

Akiro- Sucede algo my lady- le cuestionó mientras le dedicaba una de sus mejores sonrisas.

A su pregunta Renge hizo un puchero y se cruzó de brazos.

Renge- Si sucede algo, ¿por que no me dijiste que estas en Japón cuando hablamos por teléfono? - le preguntó sin siquiera voltear a verla, a lo que su prima solo pudo rascarse la nuca en señal de nerviosismo.

Akiro- Por favor my lady, no crea que lo hice por una mala razón, es que se suponía que era una sorpresa y no quería arruinarla, mi lady- le decía mientras usaba su mejor carta, la adulación, a su prima le gustaba bastante que la llamara así y como no quería que se enojara con ella era mejor ocuparla y tal parece que había funcionado.

La prima de Renge Donde viven las historias. Descúbrelo ahora