Peace

Different

Para empezar un poco con mi historia, gran parte de mi etapa escolar fue una tortura, tuve un montón de trabas y obstáculos para poder ser una chica "normal" y feliz como mis compañeros.

Intenté encajar un montón de veces pero no podía, no resonaba en mi interior pertenecer a sus grupos.

Tuve una que otra amiga por cortos intervalos de tiempo.

 Crisis existenciales a menudo y profunda tristeza que me acompañaron a diario hasta el día de hoy.

Pasé sumergida gran parte de mi adolescencia en un agujero negro viendo mis días esfumarse entre mis dedos, espectando como todos eran felices mientras yo me ahogaba y caía más profundo.

Detrás del telón, desde las sombras, excluida tuve que aprender a vivir con eso. Me acostumbré y creí que era normal.

Recibí terapia, atenté con mi vida unas cuantas veces. No puedo darle el crédito de mejoría a la terapia recibida porque no mejoré nada, me sentí peor. Llegué a pensar que ya no tenía arreglo y que era un completo error en la creación. Un falla en la Matrix.

Me rendí, lloré, grité, fui mi villano y finalmente mi salvador. Aun trato de sacarme de ese agujero y túnel oscuros. El proceso no es lineal pero hago mi mayor esfuerzo.

Un tremendo torbellino de oscuridad y dolor arrasó conmigo para transformarme y ver el mundo como realmente era.
No elegí ser lo que me pasó, tomé el aprendizaje para transmutar lo malo en bueno.

Entendí y aprendí, no hubo mejor maestro que yo misma. Tuve que ser mi medicina y motivo para seguir, nadie más lo haría por mi.

Nadie está obligado a salvarte. ¿Por qué deberían de hacerlo?. Tienes que hacerte responsable de tu vida y salvarte tu mismo. Darte la mano y no soltarte.

Cambiar mi mundo externo era lo que quería porque odiaba mi realidad, detestaba cada día sin saber que por dentro estaba muchísimo peor. Las ruinas y pedazos rotos se reflejaban afuera.

Cómo es adentro es afuera...

¿Cómo soy por dentro? ¿Hay armonía o caos?

Vivía en guerra y desequilibrio constante.
Alma - Mente - Cuerpo estaban lejos de la armonía.

Leía y leía sin poder entender el significado, envidiaba a los demás por su felicidad y simpleza de vivir. A veces he deseado ser como ellos, existir sin cuestionarme a diario y sobrepensar las cosas. Yo trato de encontrar respuesta a todo, mis ideales no son comunes y eso molesta a varios.

Arden cuando les digo algo que se sale de su sistema de creencias. Una de las tantas razones por las que no hago amigos y tampoco consigo pareja como las demás chicas de mi edad, todos terminan huyendo de mi. 

Tal vez mi alma es demasiado oscura para ellos y se asustan.

No puedo compartir lo que pienso y siento porque nadie logra entenderme a veces ni siquiera yo. 

Tal vez el desafío más grande de todos es conocerte a ti mismo.

Un agujero en mi pecho crece, el vacío, tristeza y soledad no dejan de hacer ruido.

Trato de no darle importancia, mantengo a mi cerebro ocupado, aprendiendo cosas nuevas y fantaseando con nuevas realidades posibles.
Los libros han sido mis más leales amigos y compañeros.