Código Expósito

Capítulo VI : La Sospecha

Dejo de oír el ruido y vuelvo escuchar con claridad la voz de Dimitri, me quedo donde estoy sin saber que demonios ha sido eso. ¿Qué me está pasando? ¿Qué ha sido eso? ¿Estoy alucinado?

-¡Alyson! ¿Qué sucede? -suena la radio y Dimitri habla con la comisaría- Hablando con toda la comisaría código 10-32 repito código 10-32 en la calle...

Dejo de oír otra vez lo que dice y un mal presentimiento corre por mi espina dorsal dejándome helada, vuelvo a escucha lo mismo, el ruido del ascensor, varios tipos....

-Alyson responde, ¿qué sucede? ¿Hay alguien más?

-Shh silencio Dimitri -me centro en ese ruido y cierro los ojos para concentrarme- tres hombres están subiendo por el ascensor, van armados con un fusil de combate M14, con un revolver y un fusil semiautomático colt AR-15 y...

-Alyson, ¿los estas viendo? Aléjate lo más posible y busca un sitio donde esconderte, estamos en camino.

-No, no los estoy viendo.

-¿Entonces como sabes eso? Alyson me estás asustando, estas alucinando y viendo cosas donde no hay, serán los nervios te están haciendo pasar una mala jugada, debe de ser eso.

-Dimitri me has dicho que confíe en mi intuición. ¡No se que demonios es¡ Pero si de algo estoy segura es de que puedo escucharlos y saber que van por el segundo piso. Se dirigen hacia mí y van a matarme. Hay algo que me lo está gritando, que este alerta, que no es una alucinación

-Alyson si es así, debes ocultarte y esperar a que lleguemos. Son demasiados para ti, por más experiencia que tengas lo unico que lograrás es asegurar tú muerte. No hagas locuras, mantente al margen y ocultarte lo mejor que puedas.

-¡Dimitri! ¿Crees que no me buscarán? Si no hago algo acabaré muerta igual.

-Alyson no hagas locuras o él que si acabará muerto seré yo, estamos cerca espera a que lleguemos...

Lo interrumpo y no permito que se exprese, le tiembla la voz como nunca he visto y se que no está seguro de esto. Vuelvo a escucha el ascensor se acercan y si no hago algo estaré a su merced. Tengo que preparar una estrategia o yo sola me servire en bandeja de plata.

-No puedo esperar, están casi aquí...

-¡Alyson, no hagas una locura! ¿Alyson?

Cuelgo el teléfono y me preparo para su llegada, busco mi Walther p99 en el cajón de mi cuarto y la pongo en la parte trasera de los pantalones ocultándola con la camiseta. Salgo del piso con la otra en la mano y cierro la puerta. Si me buscan me encontrarán, pero a cambio se llevarán una sorpresa.

Espero al lado del ascensor oculta tras un pilar, apuntando hacia la puerta del ascensor con mi pistola para asegurar el tiro y el punto de impacto. A medida de que se acercan mis pulsaciones suben descontroladas como si fuera un detector, mi vista y audición se agudiza más de lo que normalmente lo ha hecho. Ahora mi cerebro está funcionando a mil por hora asegurándose de los menores errores que pueda cometer ¿Qué demonios me está pasando?

El ascensor llega a su destino y espero a que bajen para asegurarme de que estoy en lo cierto. Se abren las puertas, dos de mis vecinas salen del ascensor, después sale un tipo con cara de pocos amigos y con cicatriz en la cara que le traspasa el ojo hasta llegar casi a su labio superior, después los otros dos y cada uno con su respectiva arma oculta tras su espalda. Esperan a que mis vecinas se marchen para que no escuchen lo que dicen.

-Hay que buscar a la chica y matarla, no quiero margen de error, suficiente ya han hecho vuestros compañeros y el jefe no está contento -el acento del ruso destaca en la conversación y los otros dos me apuesto lo que quiera a que también lo son- en marcha no podemos perder más tiempo. Encontrar a Alyson Expósito y no tened piedad.

La primera bala aterriza en su pecho y el hombre acaba cayendo al suelo de espaldas, desplazando el arma lejos de él. Me vuelvo a ocultar detrás de la columna, no saben de donde ha llegado el disparo y se alejan del sitio para ocultarse, pero no es suficientemente bueno su escondite. Vuelvo a disparar, esta vez concluye en el hombro del segundo que acaba en el suelo gritando y sollozando de dolor, soy consciente de lo que hago y no quiero tres muertos. Con tan sólo uno me supondrá mucho trabajo de papeles si salgo viva de esta, no quiero saber con tres más. El tercer asaltante, me ha localizado y dispara sin control, no llega a acertar, ni siquiera se acerca a mí, gasta su munición inútilmente, sale de su escondrijo para recoger el arma del suelo de su compañero y viene directo hacia mí. No me lo pienso dos veces y le golpeó con una patada en las costillas, no lo ha visto venir y acierto de pleno. Acaba en el suelo, con un rápido movimiento me acaba tirando a mí también, pero no lo suficiente como para poder debilitarme y termino por caer de cara. intenta coger mi arma, forcejeo con él, la apartó de su alcance y me golpea en la cara para ganar ventaja. Me levanto a su vez y saco la pistola que llevaba de repuesto.

-Si das un paso más te aseguro que vas a ir al infierno como tú amiguito.

Los señaló con el rostro y el mira a los dos lados, uno está gritando por el dolor sin poder moverse, sujetando su hombro y ya él otro... Ni siquiera se mueve.

En un momento el pasillo de mi piso se llena de policías, el ruido inunda mis oídos, la adrenalina que corría por mis venas se desvanece y empiezan a temblarme las piernas. Y pasa lo que tenía que pasar caigo al suelo redondita. ¿Qué esperabais? ¿Qué iba a llegar a tiempo Dimitri antes de caerme al suelo? ¿Qué me sostendría con sus fuertes brazos? Pues lo siento por decepcionaros, me desmaye en medio del pasillo y él nuca llegó o eso creó yo...