NEONSEX

03- Al llegar.

El trayecto al lugar fue algo desconcertante para Yoongi, pues no reconocía ninguna de las calles por las que él más joven lo llevaba.
Pronto estuvieron mas lejos de la ciudad y sus habitantes, en un baldío habia un sólo edifico, uno alto y con apariencia dudosa.
Pues se veía totalmente descuidado y fuera de servicio.
Yoongi estaba por hablar hasta que Jimin se estaciono lo más lejos de aquel edificio.
- Para tener treinta y tres años, es raro que nunca hayas venido a este lugar, Hyung. Antes de entrar hay unos puntos que debo decirte.- Jimin habló mientras abría la guantera del auto. Él pálido estaba totalmente confundido cuando lo vio sacar una mascara blanca de lobo y un antifaz negro con detalles rojo.

- Nuestra identidad debe ser un secreto para ellos. Al igual que nuestros nombres , ahí adentro soy Alfa J. Y tu seras mi sumiso. Mi mano derecha, la sombra detras de mi espalda y quien se siente en mi regazo mientras los vemos perder las apuestas, ¿está entendido? - le sonrió de lado al mayor y le paso el antifaz, Jimin se colocó la mascara y salió del auto con esta en el rostro.
Abrió la cajuela y sacó de está el maletín con los contratos y las faja de dinero.

- ¿Te habían dicho que eres muy mandón? , y sí, esta entendido. Sólo espero que no termines enamorándote de mi, cabron.- le dijo juguetón Yoongi una vez que terminó de ponerse el antifaz.
Bajó del automóvil juntos con su malentín , en este cargaba una carculadora, hojas y lápices. El alfa pálido se colocó detrás de jimin.
Este último nombrado cerró el auto con seguro y caminó hasta la entrada de aquel edificio.

Tocó dos veces en la puerta y esta fue entre abierta.
Un sujeto alto y con gafas o obscuras los examinó.
- Alfa J. Pensé que esta noche no vendría , pero típico de usted, nunca se pierde ni una noche.-
Llegó uno de los dueños del lugar, el cual era un omega con buen cuerpo, un traje ajustado se ceñia bien a su cuerpo mientras que en mano izquiera sostenía un puro. Al igual que YoonGi, este omega usaba un antifaz, pero era plata y con diamantes.
- Siempre es un gusto verte Baekyung. Hoy he traído compañía, por favor dile a los gatos que preparen una mesa para apostar.-

Cuando decía gatos se refería a los alfas, betas u omegas que le servían ahí, pues tenían un contrato al no haber tenido con que pagarle.
Baekyung asintió con la cabeza y se hizo aun lado, el grandulón de la entrada hizo lo mismo y ambos alfas entraron al recinto. Inmediatamente les recibió un ambiente totalmente diferente al de afuera , las luces neon estaban en todos lados, habia chicas y chicos bailando en el poldance y otros hacían más que bailar mientras tenían espectadores.

Yoongi estaba totalmente conmocionado, pues jamás habia visitado lugares como éste. Fue detrás de Jimin hasta que este lo pasó al frente y lo sostuvo de la cintura.
- Si no hago esto, probablemente otro querrá tomarte. Tienen que saber que eres mi propiedad aquí.- su mano se mantuvo ahí hasta que llegaron a la mesa que sus gatos habían preparado. Cada uno de estos tenía un collar del mismo color pero con una pedrería diferente. Eran un total de siete personas, todos ellos usando orejas gatunas y una cola afelpada.
- Amo es un placer antenderle de nuevo esta noche.- dijo un joven delgado y con el cabello rubio.

Jimin sonrió de lado y acarició la cabellera rubia. Yoongi entró con una expresión completamente seria,  la cual no lograba verse del todo por el antifaz que portaba.
— Siempre tan servicial gatito K. — Jimin bajó su mano por el cuello del anteriormente mencionado y apretó su cuello suavemente.  Una sonrisa estaba oculta debajo de aquella máscara.  Llevó su dedo a la boca del omega y este enseguida la abrió sin rechistar,  el alfa moreno empujó su dedo hacía dentro y comenzó a moverlo de adentro hacia afuera, tocando la lengua del contrario hasta llenarse de saliva.

Sacó su dedo momentos después y tomó un pañuelo para limpiar su dedo.  Se lo pasó después al omega y este mismo limpió su boca.
— Parece que me han extrañado gatitos.  Pero de hoy en adelante ninguno de ustedes estara en mi regazo. — Miró a Yoongi y le extendió su mano,  él pálido la tomó y Jimin enseguida lo atrajo hasta el frente.
— Él es mi mano derecha.  Llámenlo alfa M,  obedecerán a él, cumplirán sus caprichos hasta que yo lo quiera. ¿lo han entendido mininos? — todos asentieron sin objecion alguna,  caminó hasta la silla que estaba hasta el frente de la mesa y se sentó.  Atrajo a Yoongi a su regazo y una de sus manos rodeo la cintura de este.
La música de fondo pone un ambiente lujurioso y nítido. Yoongi se remueve incómodo sobre el regazo del menor,  jamás había estado en una situación así con algun otro alfa.

Tiene emociones encontradas y su aroma lo delata,  quiza debió usar neutralizador.
Jimin recargó su mentón en el hombro del mayor y miró hacia el frente,  su próximo encuentro entra por la puerta.
Atrayendo consigo toda la atención del lugar.
Es alto,  delgado,  tiene aroma a omega.  Su rostro es cubierto por una mascara blanca liza,  teniendo sólo los ojos descubiertos.  Pero Jimin puede jurar que ese chico esta sonriendo de forma descarada debajo de aquella pálida máscara.

La mano de Jimin aprieta la cintura de Yoongi,  quien jadea levemente adolorido.  El chico de máscara blanca se ha sentado enfrente de él,  sus alfas le siguen detrás,  cada uno posee un bozal y un collar plateado con diamantes,  de este una cadena cuelga,  estas cadenas se conectan con sólo una.  Con la que el omega trae en manos.
— Omega J.  No esperaba verlo esta noche por aquí,  ¿es que acaso quiere perder otro más de sus leales cachorros?,  ¿muerden tan fuerte que tienes que colocarle bozal?,  si tan sólo supieras que tan sumisos pueden ser... Te asustarías.—

Su voz ya no se escuchaba tan tranquila,  su iris se había iluminado de un fuerte rojo neón.  Miraba a detalle al chico frente a él.
— Alfa J...  Estoy aquí para recuperar a ese cachorro.  Estoy seguro de que podemos arreglar esto,  he traido tu juego favorito. Además....  Parece que hoy has traído un nuevo juguete,  ¿o no? —

La mandíbula de Jimin se tensó debajo de aquella máscara de lobo. Enseguida su mano apretó la cintura de Yoongi, quien no emitió palabra alguna, sólo se quedó callado respirando lento.
— Este juguete... Cómo le has llamado, es quien controla completamente mi dinero. Deberías de temblar, alguien tan astuto como yo , con alguien inteligente y organizado... Hacemos la mezcla más peligrosa, ¿No lo crees Omega J?— Jimin posó su mirada al chico frente a él, este mismo se la regresaba.

Sus ojos estaban prendidos en un fuerte azul neón.
Yoongi sonrió de lado y no sabe si fue por instinto o porque algo en él realmente estaba jodido. Pero le encantó hacerlo, se acomodó mejor sobre el regazo del menor y llevó una mano hasta la mandíbula de este para atraerlo, dejo una mordida con fuerza en su labio inferior y le miró con un amarillo neón en sus ojos.
La mirada que le ofreció Jimin lo dejó con el libido arriba, de forma egocéntrica volteó a mirar al Omega frente a ellos y sonrió mostrando sus caninos.

Una sonrisa tan retorcida que puedo jurar que el Omega J titubeo debajo de aquella máscara.
— ¿Quiere comenzar usted?, Tiré el juego a la mesa y el que pierda se quedará con la máscara del otro.... Y sus alfas quedarán a mando de Alfa J. Si es que se le acaba el dinero, claro.— Jimin estaba más que encantado con la actitud que había tomado el mayor. Estaba seguro de que apartir de ahora, todas las noches serían tan diferentes y llenas de una excitación enloquecedora.