мαηυαℓ ∂є ℓσ ρяσнιвι∂σ~ Adaptación ᴅᴀᴇʏᴏᴏɴ

•^Capitulo Cinco^•

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Los golpes en la puerta me despertaron y entonces me percaté de la voz de JangJun desde el otro lado.

-¡SungYoon, levántate ya! - gritó.

Me removí entre las sábanas y no hice intento alguno por abrir los ojos.

-¡Bestia!- volvió a golpear la puerta - DaeYeol llegará en cualquier momento.

¿DaeYeol? Abrí los ojos, completamente despierto y aventé las sábanas hacia un lado. Salí de la cama en un santiamén y abrí la puerta.

JangJun corría de un lado a otro en busca de algo.

- creía que no te levantarías nunca - farfulló.

-¿Qué buscas? - pregunté.

- Mi bolsa,puedo jurar que la dejé aquí - apuntó al sofá.

Miré el reloj,faltaban veinte minutos para las seis de la mañana.¿Cuánto tardaría JangJun en llegar?

¿Por qué me pregunto eso?

- Busca en tu cuarto, Jang - musité.

Él me miró y salió corriendo a su habitación. Dos segundos después llamaron a la puerta.

- SungYoon, por favor abre - me gritó desde su cuarto.

Caminé perezosamente hasta la puerta y la abrí. Lo que ví me deslumbró por completo.

- Buenos días - me sonrió y aquella fierecilla enjaulada saltó de un lado a otro en su pequeña cárcel.

- Buenos días, DaeYeol - le devolví la sonrisa - Pasa.

Le abrí camino y me quedé mirandolo mientras pasaba a mi lado,llevaba puesta una chaqueta negra, al igual que los apretados pantalones que traía, por dentro de la chaqueta se alcanzaba a ver una camisa en tono rojo. Usaba unas gafas de sol que le daba un aspecto más comercial a su rostro,parecía de esos modelos que sólo ves en televisión.

- Bonito pijama - musitó mirando mi atuendo.

Enrojecí hasta los huesos y me mordí el labio inferior, completamente apenado. Nadie,excepto JangJun, me había visto en pijama.

- Gracias - murmuré.

-¿Dónde está JangJun? - preguntó.

- Eh...

-¡Aquí! - el interpelado salió de su habitación con la bolsa en su mano y me interrumpió.

- Hola precioso - dijo DaeYeol y se acercó para besarlo.

Desvié mi mirada, dándoles privacidad y mientras me escabullía hasta mi cuarto. Privacidad,¿Eso quería darles?¿O sólo quería calmar a la fierecilla que de pronto se sintió incómoda?

Me vestí rápidamente y peiné mi cabello hasta dejarlo completamente liso.

- ¡Sung! Debo irme - gritó JangJun desde algún lugar cercano a la puerta.

Salí del cuarto no sin antes tomar mi cámara fotográfica.

- Te veo más tarde, espero que se diviertan - dijo - Los amo a los dos.

-¡Suerte! - dije,pero él ya había cerrado la puerta.

Miré entonces a DaeYeol,quien se encontraba parado mirándome a mí.

- Creí que íbamos a desayunar en pijama - musitó divertido,al notar mi cambio de ropa.

El rubor corrió de nuevo por mis mejillas y bajé la cabeza.