Lisa entra a la habitación del rey Jungkook, viéndolo acostado e inconsciente. Ella se acerca con lágrimas en los ojos. Pidiendo silenciosamente disculpas, y después en voz alta pidiéndolas.
─Realmente lo siento mucho, por mi culpa... ─ decía ella, sollozando mientras se encuentra de rodillas al lado de él.
Los sollozos de Lisa hacen eco en la gran habitación, donde la respiración de Jungkook había sido el único en escucharse un poco antes.
Lisa agacha la cabeza, pidiendo incontables de veces disculpas, rogando a los dioses para que ayudaran a Jungkook.
Los dedos de la mano derecha se movieron un poco, haciendo que Lisa levantara la cabeza y limpieza sus lágrimas con brusquedad, fue Taehyung quien habló.
─Mi señor, ¿Cómo se encuentra? ─ Jungkook mira somnoliento hacia el techo, sentándose al poco tiempo con dificultad.
─Estoy... cansado ─ murmura Jungkook, quien mira a Taehyung y después detiene su mirada en Lisa─. ¿Quién ha dejado entrar a tal mujer a mi habitación? ─ pregunta Jungkook frunciendo el entrecejo, dirigiéndose primero a Taehyung y después a Lisa ─. Vete de aquí, o si no te mataré, si te vuelvo a ver te arrancaré la cabeza─
Ambos, Taehyung y Lisa, quedan sorprendidos por tales palabras.
─Su majestad, soy yo, Lisa ... ─ una sonrisa nerviosa se asoma en los labios de Lisa.
Ella intenta tocar la mano de Jungkook, quien, al ver la acción, rápidamente la quita y la mira con furia, ella se asusta en demasia.
─Kim Taehyung, saca a esta perra de mi habitación ahora mismo, si es necesario usar la fuerza, hazlo ─ ordena con voz fría Jungkook.
Lisa, congelada por lo que estaba pasando, no opuso resistencia cuando Taehyung la sacó de la habitación.
Fuera de la habitación, él se dirige a ella.
─Señorita, le pido que comprenda a su majestad, ha perdido la memoria a causa de la magia que estaba dentro de usted ─ pide Taehyung─. Le ruego perdone a su majestad por tales rudas palabras dirigidas hacia usted, también le pido que le dé tiempo a su majestad para recuperar su memoria ─
─Todo esto es mi culpa, su majestad está sufriendo por mi culpa ─
─No es así, lo que hizo fue por voluntad propia, nadie lo ha obligado a nada ─ Taehyung trataba de calmarla, pero parece ser en vano─. Ha su majestad no le gustaría oír que se está culpando por sus acciones ─
Lisa sonríe amargamente aun con lágrimas en los ojos, no dice nada más y solo se gira para regresar a su habitación.
Tiempo, tal vez eso era lo que tenia que pasar.
[...]
Los días pasan y parece que nada ha mejorado, Lisa no ha podido acerarse a Jungkook, pues la mirada que este le da cada vez que cruzan sus miradas, están llenas de frialdad, es una mirada vacía, carente de toda emoción que una vez él le mostró.
Lisa decide que este día lo haría diferente, esta vez no se quedaría en su habitación temiendo de encontrarse con Jungkook para no causar su ira. Es por eso que decide pasear por el jardín, dedicándose a mirar las flores y buscando algo de consuelo en ellas.
Lo que Lisa no sabe es que Jungkook hacia lo mismo, caminando por el jardín para poder calmar su dolor de cabeza.
Ambos se encuentran frente a las mismas flores que siempre solían mirar mientras estaban sentado bajo el refugio de uno de los árboles.
Lisa se sorprende por tal casualidad.
En cambio, Jungkook, él siente un enojo terrible al verla de nuevo, ya que, para él, ella ha desobedecido sus órdenes.
Lisa piensa por un momento que a pesar de que se parece demasiado al primer día en que ellos se conocieron, todo es totalmente diferente. Esta vez Jungkook irradia sed de sangre.
Ella entiende una cosa en ese momento, ese lado también pertenecía a Jungkook, ese lado que daba miedo también existía dentro de él.
Jungkook levanta su mano y la extiende hacia ella, intentando matarla con un poco de su magia, pero mayor fue su sorpresa cuando un campo de protección la rodeo. Abrió sus ojos a mas no poder cuando percibió su magia dentro del cuerpo de ella.
Cuando Jungkook estaba curándola, había puesto un campo de protección dentro de ella, todo eso con el fin de evitar más ataques hacia su persona.
Y a pesar de que Jungkook esta sorprendido por ese hecho, sigue intentando matarla, causando solo que él saliera lastimado. Algunas heridas se fueron formando en su brazo y en su rostro. Lisa lo mira asustada.
─ ¡Su majestad, por favor detenga! ─ pide ella llorando─. Esto solo lo lastimará aún más ─
─Unas heridas como estas no son nada ─ contesta Jungkook fríamente─. Te haré pagar por desobedecer mis ordenes ─
Una luz dorada sal desde el pecho de Lisa, suave y cálida luz que los envuelve a ambos. En este momento, el deseo más grande de Lisa es desaparecer para poder evitar que Jungkook se lastime aun más.
Y de un momento a otro ella desaparece frente a los ojos de Jungkook. Alguien externo de todo esto diría que ella murió a causa de la magia del rey, pero Jungkook sabía que eso no había pasado, ella había desaparecido en la nada.
Lisa desapareció a causa de una magia, y no fue la de él.
─ ¡Taehyung! ─ grita Jungkook. El nombrado sale de entre los arbustos, agachando la cabeza para recibir sus órdenes─. Encuentra a esa perra y tráela frente a mí ─
Taehyung desapareció entre los arbustos, yendo a cumplir su orden y sintiendo un mal sabor de boca por lo que había presenciado.
Jungkook apretó los dientes debido al enojo, nadie se escapaba de él, nadie.
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Hilo Rojo /J. JK./
FanfictionA pesar de las circunstancias, el amor puede renacer en medio de una guerra.