Capítulo 3.

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El desayuno del día siguiente estuvo incómodo debido a las insistentes miradas de rabia de Jennie, así que me apresuré y luego salí a dar la vuelta en el auto de mi padre, necesitaba aire fresco y estar alejado de esa niña caprichosa que francamente dudaba que fuera virgen, ¿quién en esta época lo era a esa edad? Estacioné en un parque y me senté en una banca a mirar a la gente, como cuando lo hacía con Yoongi hace bastantes años y me olvidé de todo.

Regresé a la hora de la comida y pedí que la subieran a mi habitación, no quería otro episodio como el de la mañana, ya había tenido suficiente. Después me metí a bañar y me arreglé para la cena. Bajé y ya habían llegado los papás de Jisoo y Choi, los saludé y luego a mis tíos que también habían llegado recién, me puse a platicar con John, que estaba con sus bromas, como siempre. Al cabo de un rato, mi padre llamó la atención de los presentes parándose en medio de la sala.

– Bueno, como todos ustedes saben, la razón de esta pequeña e intima reunión es para anunciar oficialmente el compromiso matrimonial de mi hija menor Rosé con su prometido Choi, la boda será en diciembre próximo en nuestra casa de Miami, les pido que levanten sus copas y brindemos por la felicidad de esta joven pareja que pronto iniciarán un camino juntos, no será fácil, pero sé que el inmenso amor que se tienen les ayudará a superar los pequeños obstáculos que se les presenten en el camino, por mi hija y mi futuro yerno, ¡salud!

Todos levantamos nuestras copas y brindamos por ellos, Rosé no cabía de la felicidad y se levantó a abrazar a mi padre.

– Quiero hacer un anuncio también, a decir verdad, es una petición – volteó a verme – Jungkook, me encantaría que tú fueras el padrino, una amiga aceptó ser la madrina.

– Claro que sí Rosé, nada me dará más gusto que ponerte la soga al cuello.

Nos reímos por mi comentario y John me dio una palmada en la espalda. Pasamos al comedor y mientras servían la cena, una de las amigas de Rosé le pidió a ella que relatara como Choi le había pedido ser su esposa.

Mi hermana muy contenta lo contó a detalle, había sido en una cena romántica, con un pianista que amenizó con melodías de amor y después le pidió a ella que se sentará con él para tocarle una canción en exclusiva, luego le entregó una copa pidiéndole una propina pero lo que había al fondo era el anillo anudado a una nota que decía: Roseanne Park, ¿te quieres casar conmigo?, te amo profundamente y nada me daría más gusto que pasar el resto de mi vida a tu lado, Choi. Todos se emocionaron y le pidieron que mostrara el anillo, ella levantó su mano y se los enseñó, después le dio un beso a él que también estaba muy emocionado.

Comimos entre anécdotas y consejos que les daban mis padres y los de Choi, al término se hicieron grupitos para platicar. Yo me quedé en un rincón observando a mi familia, John y Jisoo estaban abrazados sonriendo al igual que mis padres, Rosé y Choi estaban en el sillón tomados de la mano, los padres de él estaban platicando animadamente con el tío MinHo y su esposa. De pronto, una extraña sensación me recorrió y salí a la terraza con la copa en la mano.

La luna brillaba en todo lo alto iluminando parte del jardín y, entonces, me sentí solo, ¿qué estaba haciendo yo con mi vida?, acababa de cumplir 27 años y no tenía a nadie a mi lado, alguien digno que estuviera ahí conmigo compartiendo este gran día para la familia. Mi hermanita de 24 años estaba próxima a casarse y yo estaba solo, siendo mayor que ella. De repente, la imagen de ese chico volvió a mi mente, ¿qué tenía de especial para pensar en él?, era la primera vez, en el tiempo que llevaba en la sociedad, que pensaba en alguno, que deseaba que el tercer encuentro no llegara, no quería alejarlo, quería seguirlo viendo indefinidamente.

– ¿En qué piensas hermanito? – escuché la voz de Rosé y sentí su mano sobre mi hombro.

– En que no puedo creer que mi hermanita se va a casar tan pronto... ¿no deberías estar allá dentro con los demás?

Ardiente tentación 2. [Adapt. Kookmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora