Capítulo 15.

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El tiempo pasó en un abrir y cerrar de ojos, mi relación con Jimin seguía fortaleciéndose, a veces él se quedaba dormir en mi departamento y en otras ocasiones yo me quedaba en el de él.

La semana que pasamos en Seattle con mi familia fue maravillosa, despertar a su lado en Navidad definitivamente fue mi mejor regalo, mirando su rostro angelical, su cabello enmarañado y esa hermosa sonrisa que me fascina. Toda mi familia se portó sensacional con él, lo llenaron de regalos, abrazos, besos y no pudieron hacerme más feliz por aceptarlo tan bien y lograr que se sintiera como una integrante más, Rosé ya lo consideraba como un gran amigo, John le hizo bromas como si lo conociera de toda la vida y mis padres platicaron de lo más a gusto con él, Minnie los cautivó tal como lo hizo conmigo.

Una noche me desperté porque lo escuché sollozar y empezó a insultarme, pero me di cuenta que estaba dormido y se movía agitado, así que lo tomé de los hombros y lo moví para que despertara, me costó un poco de trabajo, pero cuando finalmente lo logré, me abrazó, le aclaré que había sido una pesadilla e intrigado le pedí que me la contara, me dijo que me había soñado con otro y le aseguré que jamás lo engañaría, que lo amaba.

Entonces, empezó a besarme con una desesperación única y me pidió que le hiciera el amor, así que lo recosté y lo besé con pasión y dulzura, Jimin ansiaba tenerme dentro y casi me obligó a que lo penetrara, empecé a moverme lento, pero él aceleró sus movimientos, no entendía su urgencia, sólo lo complací y le repetí varias veces que lo amaba, tal como él me lo había pedido, cuando ambos llegamos al clímax bajé de él y me acosté detrás, abrazándolo por la cintura, entrelazamos nuestras manos y nos quedamos dormidos.

Al día siguiente tuve que viajar a Chicago a una convención que duraría tres días, así que sólo estuve en contacto con él por el celular, cuando tenía tiempo libre le mandaba mensaje o le llamaba, empecé a notar algo extraño en el tono de su voz, pero cuando le pregunté me aseguró que no tenía nada, que sólo estaba saturado de trabajo, quizá estaba siendo yo demasiado aprensivo y haciendo personal algo que no lo era.

Cuando regresé de viaje, fui a mi departamento a dejar la maleta y ducharme, al bajar por mi auto al estacionamiento, vi que una pareja estaba dentro de otro besándose y acariciándose acaloradamente, solté una risita porque saltaron cuando escucharon que quité la alarma de mi auto, así que subí y me dirigí al departamento de Jimin.

Me recibió con un gran abrazo y su aroma inundó de golpe mis fosas nasales que aunado a la escena que acababa de presenciar provocaron que las ganas de hacerlo mío se incrementaran considerablemente, así que no puede aguantar más y terminé haciéndoselo de forma presurosa en el sillón.

Después comenzamos a cenar y le fui platicando sobre la convención, en la cual, me había encontrado a Sungwoon, que iba del brazo de una hermosa rubia a la que me presentó como su novia.

Noté que Jimin estaba como ausente, de hecho apenas y había probado bocado y eso que yo era el que estaba hablando, por lo que le pregunté en que pensaba y me respondió que en nosotros para luego preguntarme qué era lo que había extrañado de él y después que le respondí empezó a contarme la historia de su amigo Hoseok que había conocido a su ex esposo en condiciones parecidas a las que nos conocimos Jimin y yo, francamente no entendía a dónde quería llegar con eso y me quedé sorprendido cuando me dijo que no quería que nos pasara lo mismo que a ellos, que nosotros no nos conocíamos y que ni siquiera sabía cuál era mi color favorito, se lo dije aunque seguía sin comprender cuál era el punto de todo eso, ¿acaso ese dato es trascendental para amar y estar con una persona?

No di crédito cuando me preguntó sobre Yugyeom y no es que quisiera ocultárselo, algún día se lo contaría, cuando me sintiera listo para hacerlo, no es algo que platique con frecuencia, a decir verdad, sólo lo he contado una vez, pero Rosé tenía que adelantárseme y encima contarle lo mal que me había puesto, al menos había servido para que terminara de corroborar que entre Yoongi y yo sólo hay una gran amistad.

Ardiente tentación 2. [Adapt. Kookmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora