Cámara, Enfoque, ¡Ya Me Enamore!

Parte XII

Decir que Julia estaba tranquila sería mentir. Era un manojo de nervios, habíamos ido a confirmar que realmente seríamos madres, ella aún tenía la esperanza de que no fuese cierto, a pesar de ya ver un poco abultado su vientre, sentir el asco por cosas insignificantes y sobre todo las nauseas, su periodo tampoco había llegado, creo que eso era más que evidente... Terminé mi libro y miré a mi omega, se abrazaba así misma mientras esperaba... Aún ella no dejaba de ser reservada y lejana cuando algo le preocupaba, las últimas semanas habían sido difíciles para mi alfa interno, quien quería dar demasiado amor... Pero la omega frente a mi me apartaba.

-Hey, cariño- llame suave, ella me miró dejando de susurrar -Ven- incité, ella negó, todos los presentes veían atentos, el alfa de mi costado me miró con detenimiento.

-Creo que será mejor que vayas tú- susurro, lo miré y sonreí -En serio, mi omega era igual al principio, necesitan que los acompañes en todo, no deberías estar aquí separada de ella- aconsejó, asentí y me levanté acomodando mi ropa, me senté al lado de Julia, la tome con cuidado de la cintura subiendola a mi regazo, la cubrí con mi gabardina, dejándola en medio de mi en un abrazo protector.

-Señorita Julia- llamaron, me levanté llevándola en brazos hasta el pequeño cuarto, la doctora me entregó los resultados y aunque ya supiera la respuesta, Julia me arrebató los papeles y se ocultó más en mi pecho, decidiendo verlos en casa volvimos en mi auto, fue algo incómodo porque en el asiento no cabíamos las dos, pero me negué a dejarla sola.

-Estoy embarazada- susurró después de leer los analisis, la abracé por la espalda sonriendo -

-Vamos a ser madres amor - besé su frente, ella se estremeció -Cariño... um, está bien si no quieres tenerlos...- comento neutral, jamás había tenido tanto compromiso en mis manos, y quizá Julia no estaba hecha para compromisos.

-N-no, yo, quiero tenerlo... S-solo, no estoy segura de estar lista...-se ocultó entre sus piernas, besé su coronilla recargandome en su cabeza

-Cariño, si no estás lista podemos esperar... No necesitas darme un cachorro, somos jovenes, no es necesario arruinar tu carrera o que nuestro cachorro tenga una mala vida por nuestra irresponsabilidad... Este cachorro no es un juego Julia- hable serio, quizá con mi voz de alfa porque de inmediato Julia cayó en lágrimas

-N-no sé que quiero Paula- susurró casi sin aire, la abracé más fuerte, quizá era algo que ambos debíamos pensar con detenimiento.

Por la tarde tuve que salir, dejé a mi omega dormida, salí por trabajo y de paso a investigar clínicas de aborto legal, sabía que la decisión de Julia sería esa, mi decisión incluso iba para ese rumbo, el poco tiempo que llevábamos, nuestras acciones... Ni siquiera conocíamos a nuestros padres, no conocía incluso su fecha de cumpleaños, aunque eso cualquiera lo sabría con solo buscar su nombre en Google.

-Julia, ya llegué, ven vamos a hablar- grité dejando los folletos y las recientes compras en la mesa, aventé mi abrigo y me tiré al sofá -JULIA- grité usando mi voz, no para ordenarla, si no para que me escuchara si es que no me había oido, ella bajó lento sosteniendo su vientre, la miré con preocupación me levante y la sostuve cuando casi caía por las escaleras -Julia ¿¡hey que tienes amor!?- estaba pálida, miré el camino manchado con sangre -Julia ¿¡qué hiciste!?- grité tomándola entre brazos salimos directo a urgencias, no hace falta hacer notar la negligencia de aquellas personas.

Al cabo de lo que fueron horas de angustia, me dieron noticias de mi mujer, un aborto provocado por ella misma fue el diagnóstico... fui a vaciar el estómago en cuanto lo supe, sabía que pasaría, pero no esperaba que realmente lo hiciera en el fondo mi alfa se sentía herido, había perdido a mi cachorro y por poco pierdo a mi novia, no era fácil, regresé a la recámara, tome la mano de Jull's apretándola, ella abrió los ojos y comenzó a llorar a mares, pedía perdón, mejor dicho lo suplicaba, me dolía verla así junté mi frente a la suya transmitiendole seguridad, también derramé lágrimas pero sabía que estaba bien, ya había pasado, ya estaba hecho...

Tres meses después...

Me desperté de golpe, mi respiración agitada, algo no estaba bien, palpe la cama, Julia no estaba, me levanté corriendo rumbo a todos los cuartos gritando su nombre, hacía varios días no estábamos del todo bien, la perdida de nuestro cachorro había sido un gran golpe, y aunque no dejamos de lado nuestro amor, nos estábamos... Distanciando y eso, dolía como el carajo.

-JULIA- grité fuera de la casa, no había nadie a kilómetros, ni una sola alma pasaba por ahí, su coche no estaba... Era lógico, subí de nuevo a nuestra habitación buscando su ropa, pero tampoco estaba, la llamé muchas veces, pero ningúna respondió, contacte a Giovanni, pero incluso él no sabía sobre ella... Busque una nota, incluso chequé sus redes sociales antes de que claro, ella las borrara negandome el acceso, no había nada que me indicara donde estaba mi chica... Y vaya que eso me destrozó.

16/09/2020

Gente, perdón por la tardanza, han sido tiempos difíciles, pero espero actualizar seguido.
Gracias por esperar y apoyar la historia.