El Punto Arcano

Capítulo 3: El protegido

 Sábado 15 de agosto del 2020, Hospital el renacimiento.

Son alrededor de las seis de la tarde, luego de un chequeo y algunas preguntas por parte de la policía, nos soltaron, no sin antes dejarme una tarjeta con el nombre de un psiquiatra muy reconocido, el Dr. Ferdinand de Steiner.

Su historia ha sido recordada por muchos, cuando trabajaba como asesor psicológico para la policía del gobierno, se le presento un caso sin precedentes. Un estudiante de la Universidad Nacional cometió una serie de asesinatos durante sus 3 años de estudio, se encargó de evitar que las victimas tuviesen alguna relación con su lugar de estudio, así nunca sería descubierto, pero sus emociones y salud mental le derrotaron, cuando el mismo fue a la comisaría a declararse culpable, la gente estaba tan confundida, ¿Por qué alguien que se ha encargado de ocultar sus rastros por casi 4 años, de pronto decidió detenerse? ¿Lo chantajearon? ¿Es un impostor? ¿perdió su razón para realizar esa serie de homicidios?

Al parecer para el Dr. Ferdinand no le tomó ninguna dificultad, al parecer la pista se encontraba en su modus operandi. En el caso de la mujer embarazada, se le encontró su cuerpo abierto en canal sentada en una silla y al bebe en su fase de feto sentado en una silla al frente de la madre. Durante el caso del violador de mujeres, se le encontró su cuerpo cercenado a la mitad encima de su cama, un lado del cuerpo mirando al otro, dos mitades de un mismo cuerpo mirándose entre sí. Y por último el caso de la pareja tóxica, sus cuerpos fueron encontrados en un motel, la mujer estaba sentada en el piso de la cocina y el hombre en el sillón con el control en su mano, con la peculiaridad de que ambos tenían sus cráneos abiertos, y fue confirmado por el forense, que los cerebros estaban intercambiados.

Estos fueron uno de los casos más brutales de los 20 asesinatos que logró efectuar. Pero todas tenían algo en común, en la presentación y el mensaje que el asesino dejaba en las victimas. El Dr. Ferdinand sostiene que el asesino dejaba múltiples mensajes, pero los más detallados son: La razón por la que escogió a su víctima, y la razón por la que él es de esa forma.

- Dr. Ferdinand, ¿podría explicarnos porqué el asesino comenzó esta matanza? – Dijo el reportero de aquella noticia que vi hace un tiempo

- ¡Pues claro! Para eso vine, verán; primero hay que tomar en cuenta, ¿por qué a esas personas? durante el caso de la embarazada, los motivos del hombre para asesinarla son por haber decidido tener al hijo aun sabiendo que no tenía como mantenerlo. Durante el caso el caso del violador, él quiso hacer que su muerte fuese la más solitaria, por haberse metido con tantas mujeres en contra de su voluntad, así que lo dejo tirado en la cama durmiendo junto a el mismo, y para el último caso, él quería castigar a la pareja toxica, por no tomar en serio los sentimientos de cada uno, así que les enseñó "empatía" intercambiando los cerebros para que uno se ponga en el lugar del otro.

- Que desastroso, y a todo esto. ¿Cómo sabe que él es el asesino? ¿Y cuáles eran sus motivos?

- Como pueden ver el asesino se sentía en el derecho de juzgar y castigar a las demás personas, digno de un hombre con una gran autoestima, o un sociópata. Pero cuando él se entrega, todo su personaje se derrumba, ¿por qué alguien con tanto orgullo y autoestima y confianza, se entregaría a si mismo? Eso es porque este tipo no está solo

- ¿Quiere decir que hay un cómplice? – Dijo el reportero acercando el micrófono al Dr.

- Si y no mi querido compañero reportero, el asesino tiene doble personalidad, parece que su lado inocente nos estuvo dejando pistas todo este tiempo, la mujer y él bebe, dos personas hablándose entre ellas, El violador, partido a la mitad, un lado durmiendo junto a la otra, La pareja toxica y la que más refuerza mi teoría, los cerebros intercambiados, señal de que las consciencias del asesino se intercambiaban. Todas estas son señales de que el asesino tiene doble personalidad, por lo tanto, fue su lado culposo el que se entregó. Desde entonces no se ha presentado el asesino