¿No será que te gusto? Levi Y Tu

10

*LEVI*

Una hora antes de que Sabrina por fin despertará.
Levi se encontraba en su habitación esperando que su subordinada abriera los ojos.

Cuando Hange entro a la habitación notablemente preocupada sin prestar atención a Levi; avanzo hacia Sabrina, la cual estaba descansando en la cama.

-No puede ser Sabrina, despierta quiero ver tu hermosa sonrisa. -Decía con cascadas de lágrimas corriendo por sus mejillas-

La verdad era que la situacíon la carcomia por dentro; el solo hecho de ver a una de las personas con quien más se había encariñado de la Legión tendida, en una cama inconsciente, con una gran herida en el hombro, no podía con tal sufrimiento.

Aunque, en el fondo sabía que Sabrina solo tenía que descansar y que estaba totalmente fuera de peligro pero; ella continuaba llorando pensando lo peor de la situación.

-Basta cuatro ojos, la despertarás. -Le advirtió Levi, el estruendoso llanto de Hange le sacaba de quicio-

-Ah, Levi ¿Qué haces aquí? -Está no se había percatado de la tercera presencia en la habitación-
(¿Acaso Levi esta preocupado por Sabrina a tal punto de esperar por su recuperación aquí mismo? Él de verdad...)
Por la mente de la comandante pasaron un sin fin de teorías, cada una más alocada que la anterior, llevando a volar su gran imaginación.

-Espero a que un subordinado despierte estupida.
Al ver que la estupida no le contestaba sino que solamente pasaba su mirada de Levi a Sabrina y viceversa. Colmando su paciencia la arrastro afuera de la habitación cerrando la puerta detras de él.

-Eres una estupida escandalosa. -La regaño fulminandola con la mirada- No te das cuenta que necesita descansar.

Hange analizó el sembalnte de Levi. Se mostraba vulnerable, y no era nada común verlo mostrar una pizca de debilidad...
Ya que sus expresiónes siempre varíaban entre la seriedad y la neutralidad.
Sin lugar a dudas la herida de Sabrina lo había afectado más de lo debido.

-¡Cuéntame todo Levi! -Le suplicó con los ojos brillantes-
-¿De qué estás hablando idiota? Deja de decir estupideces.
-Hablo encerio Levi. ¡Tengo mucha curiosidad!
¡A nuestro quisquilloso y desagradable Levi le robaron el corazón! ¡jaja!
-¿"Desagradable"? - Se veía molesto-
-¿Acaso cres que tu personalidad es buena? -Le pregunto Hange-
-Estupida cuatro ojos. -Fue lo único que pudo decir, ya que, se había quedado sin argumentos- No sé de que estás hablando idiota. Lárgate estás colmando mi paciencia.
-No me iré hasta que me digas todo.

Levi vio la determinación de sus palabras, sabía que era muy estupidamente testaurada.
(Esta estupida, si continúa hablando tan fuerte se despertará Sabrina)
-Vamonos de aquí catros ojos. -Lo que más quería era que su subordinada descansará y eso no podría pasar si estaba Hange por los alrededores con su bocota-

Hange siguió a Levi; quería saber a detalle sus sentimientos hacía Sabrina.
(¿Acaso la considerará como una hermana? Es que es muy pequeña, linda, hermosa con una personalidad genial y es asombrosa en todo lo que hace...
Ó ¿Estará enamorado de ella?)

Ambos tomaron lugar en una pequeña mesa.
-Levi te entiendo, caiste ante los encantos de Sabrina, no te preocupes todos lo pasamos. -Decía tranquilamente con un prqueño sonrojo en sus mejillas, recordando la primera vez que vio a Sabrina, Hange había caído gustosamente ante sus asombrosos encantos de la pecosa-
-¿Todos? -Pregunto incrédulo sin todavía comprender la situacion- ¿De qué hablas idiota?
-Te gusta Sabrina ¿no? -Sin dejar que respondiera continuó hablando- Obvio que te gusta Sabrina, ¿A quién no le gustaría? ¡Ella es la perfección en persona!
-¿Gustar? ¿Qué estupideces estás diciendo cuatro ojos?
-¿Acaso no te gusta Sabrina?
-Claro que no ididota.
-¿Encerio no te sientes atraído por ella ni nada? -Pregunto de nuevo Hange, se había equivocado en su deducción... no lo podia creer-
-No estupida. -Nunca había pensado en Sabrina como alguien que le "gustara"
Sin embargo, la consideraba una chica que facilmente cumplía con los estereotipos de belleza, una chica demasiado alegre, muy buena persona y demasiado empatíca. Aunque, no se podia encariñar con ella, ni siquiera podian llegar a ser amigos. Lo tenia prohibido-

Hange no se podía dar por vencída seguía apostando todo a que Levi tenía sentimientos hacía Sabrina.
Instintivamente se le formó una pequeña sonrisa ladina, pensando en una jugada, para provocarlo, sacarle todo y dejar a flote sus sentimientos hacía la pelirroja.

-Oh, que bueno, porque creo que siento cosas por ella, sabes... creo que me esta empezando a gustar. -Le decía mientras un color carmesi se subía a sus mejillas, era demasiado buena finguiendo-
-No me metas en tus problemas amorosos cuatro ojos. -Sus palabras realmente sonaron groseras y frias mucho más que de costumbre-

El capitán se marcho de ahí notoriamente enojado, en dirección a la habitación de Sabrina en espera de su despertar. Dejando a Hange sola.
-Conozco tu pundo debil Levi... -Se decía a si misma sonriendo maliciosamente- Así que de verdad, sientes algo por Sabrina...

Mientras tanto, el soldado más fuerte de la humanidad se encontraba en un dilema en sus pensamientos:
(¿Por qué me molesto con lo que me dijo esa estupida?
¿Por qué estoy tan molesto cuando pienso en Hange declarándose a Sabrina?)