SANGRE UCHIHA [Sasuke Uchiha]

01 De vuelta a Konoha

De vuelta a Konoha

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¿En dónde está?

Mi mano sujetaba con fuerza el kunai, no podía sentir su chakra por ningún lado. Le bastaron tan solo un par de segundos para desaparecer por completo. ¡Maldición! Esto solo aumentaba mis nervios cada vez más conforme pasaba el tiempo.

Aún soy demasiado joven para morir.

Me coloqué en posición de combate al escuchar crujir una rama. Un par de shuriken salieron disparadas de entre las hojas de un árbol y de un movimiento rápido las desvíe hacia el tronco más cercano. Sentí un escalofrío recorrer mi espalda así que di media vuelta en el momento exacto en que detenía el filo de la cuchilla que se dirigía a mi cuello.

Así que un ataque por la espalda.

Ambas dimos un par de saltos hacia atrás para al instante correr e iniciar una pelea cuerpo a cuerpo tras guardar nuestras armas. Sus golpes eran constantes, uno tras otro, no me dejaban reponerme ni siquiera por un segundo. Vi mi oportunidad en el momento en que bajaba el brazo, esos milisegundos me sirvieron para poder asestarle una patada en el estómago y mandarla unos cuantos metros lejos, sin embargo, sentí el filo de un metal colocarse cerca de mi garganta. Fui espectadora en primera fila de como mi rival desaparecía en una bola de humo para transformarse en un simple tronco.

Bendito justsu de sustitución.

—Estás muerta.

Expulsé el aire que no sabía que estaba reteniendo y en cuanto ella alejó su arma volteé para poder verla a los ojos. Mostraba una enorme sonrisa en su rostro.

—No es justo, eso fue trampa —protesté mientras sacudía el polvo de mi vestimenta.

—La vida no es justa Aome —su sonrisa se borró de inmediato siendo sustituida por una expresión melancólica—. En el campo de batalla el enemigo no tendrá piedad de ti, aunque seas una niña, te lo he dicho bastantes veces.

—Ya no soy una niña Kai, se perfectamente lo que implica ser un ninja.

Crucé los brazos sobre mi pecho mientras apartaba la mirada a un lado. Me fastidiaba el hecho de ser tratada como una niña ingenua. De pronto sentí su mano sobre mi cabeza despeinándome levemente, al regresar mi mirada me encontré con otra de sus muy típicas sonrisas.

—Será mejor que regresemos, tienes que darte una ducha antes de cenar porque en verdad apestas —bromeó.

Suprimí una risa y comencé a seguirla cuando ella dio media vuelta y emprendió la marcha para regresar a la pequeña aldea en la que nos alojábamos desde hace un par de meses. Esa era nuestra vida desde que abandonamos nuestro hogar natal después de la masacre del clan Uchiha, mi clan. Viajar de un lugar a otro entrenando y realizando pequeñas misiones a donde quiera que llegáramos. No sabía con certeza el motivo de este viaje, pero de alguna forma me servía para mi crecimiento como ninja.

—¿Comenzaremos el entrenamiento de mañana a primera hora o tendremos una nueva misión? —negó con la cabeza sin emitir ninguna palabra— ¿Entonces?

—Es hora de regresar a Konoha para que termines la academia como se debe y te gradúes como genin.

—¿Qué? ¿Por qué? —frené en seco siendo imitada por la rubia un par de segundos después—. Es demasiado pronto para regresar aún no ha terminado nuestro entrenamiento. No estoy lista, además he aprendido mucho más de lo que les enseñan a todos en la academia.