Parasyte

Capítulo 1: Infectado

Hoy el salón de clases estaba bastante más animado de lo normal, varios compañeros se encontraban de pie conversando alegremente, algunos abrazados, otros simplemente reían mientras recordaban buenos tiempos, también estaban aquellos que estaban derramando algunas lágrimas.

Lo cual era bastante normal según mi opinión, era el último día de clases después de todo, muchos de nosotros tomaríamos rumbos diferentes en la vida.

"Heh..."

No pude evitar sonreír en mi pupitre pensando en lo que vendría.

"...Oh bueno, no importa~"

Al fin y al cabo, hoy es el día en que todo cambiará...

Ahora que tengo la oportunidad de cambiar mi vida, debo aprovecharla al máximo...

¡Solo falta esperar a que el idiota llegue!

"Jay!"

Y hablando del rey de Roma...oh pequeño Carl, no sabes lo que te espera...

Carl, el típico bravucón del salón que busca probar su superioridad al abusar de otros más débiles que él.

Tenía el cabello de color blanco el cual estaba peinado hacia atrás, sumando sus ojos de color verde jade y su contextura delgada, todo se juntaba para formar a la persona conocida como Carl.

Desafortunadamente, parece que independientemente de su personalidad, el mundo había sido bueno con él, al fin y al cabo no solo era guapo y alto, también era...un esper.

"Sí que eres valiente por venir hoy a pesar de ser un inútil eh!" Dijo acercándose a mi pupitre.

Lo de inútil era un insulto que había escuchado varias veces en mi vida...debido a que no había manifestado una habilidad para ninguna de las tres clases desde pequeño, la mayoría de las personas me veían como alguien inferior a ellos...aunque claro, nadie sabe que eso...había cambiado.

"No no, valiente es venir a la escuela con las notas que tienes." Respondí levantándome de mi asiento y dándole la sonrisa más brillante que podía hacer.

Lo que dije de las notas parecía haber tocado una fibra sensible ya que se detuvo momentáneamente, si bien era cierto que sobresalía en varios aspectos de su vida, los estudios no eran uno de ellos.

"Tú..."

Carl entonces activó su habilidad, haciendo que varias corrientes de viento comenzasen a arremolinarse a su alrededor, a pesar de que solo era viento, la presión que estaban causando no era cosa de risa.

Nuestros demás compañeros se alejaron al ver a esto, dejando claro que no iban a intervenir, lo cual era entendible, al fin y al cabo no valía la pena antagonizar a Carl por mi bien.

"Sucede algo?"

Aunque claro, si había un villano... también tiene que haber un héroe, y en este caso, el papel caía sobre...

"James..." Dijo Carl mientras miraba a un chico muy alto con corte militar abrirse paso por nuestros compañeros para llegar a donde estábamos.

Ya que mi asiento estaba en la fila delantera del salón, todos nuestros habían retrocedido a la parte de atrás para alejarse de Carl y de mí, dejando a algunas personas detrás de todo, incluyendo a James.

Si Carl era alto, entonces James era gigante, si Carl era guapo, entonces James parecía actor de película, sumando a eso el gran físico que poseía, honestamente los dos podían hacerse pasar por personajes conquistables de un juego de conquista para chicas.

James, sin lugar a dudas el príncipe de esta escuela, a parte de superar a cualquier chico de esta escuela en lo que a físicos se refiere, su personalidad justa, combinada con su vivaz mirada dorada llena de determinación y confianza, la cual nunca vacilaba incluso contra los delincuentes de cualquier escuela, hicieron que se ganase el indiscutible lugar número 1 de la escuela en los rankings de las chicas.