☡Psicópatas...☠ (Los proxy's y tú)

Three

Agarré mis cosas y salí lo más rapidamente posible de aquel baño; sin antes tarparme aquella marca que circulaba en mi frente. Prácticamente estaba corriendo hacia la salida, pero por esas putas casualidades siempre alguien me impide hacer lo que quiero lograr; Luke me había agarrado del brazo y me había arrastrado por el pasillo hasta llegar al patio.

—¿Qué querés? la puta que te parió Luke.— exclame molesta mientras intentaba safarme de aquel agarre.

—Quiero mostrarte algo.— respondió fríamente aún con una sonrisa de oreja a oreja. Literal, lo odio.

  No sabía si acceder o negarme por tal cosa, ni si quiera tenía una relación estable con el pero, le tengo un poco más de confianza que los demás. Así qué accedí y deje que me llevara a supuestamente a aquel lugar.

Pude ver como paro en seco y se dio la vuelta para verme cara a cara. El silencio inundó aquel ambiente; solamente se escuchaba el viento y las hojas chocandose entre sí. Habíamos llegado al verme estampada en su espalda; si, soy una despistada de mierda que solamente piensa en pelotudeces sin sentido alguno ah.

—Uhh, perdóname. ¿Todo good? — preguntó alegré. Yo, en cambio, estaba refregandome aún la cara con mis brazos. Accedí con la cabeza baja y con los ojos aún cerrados.

—¿Para qué me necesitabas?— pregunto con curiosidad y algo de inseguridad.

—Para esto; taram...— al terminar de decir aquello último, me señaló con seguridad, y aún con una sonrisa, a un gatito desamparado y todo lástima.

—Awww...— respondí acercándome poco a poco, y lentamente, a aquel gatito tan chiquito que se veía que apenas tenía unos dos meses aproximadamente. Era, literalmente, tierno.—Siempre quise tener un gatito síames.— comenté mientras lo alzaba.

—Lo encontré en la calle siendo acorralado por unos perros..., y me preguntaba si querías adoptarlo. — preguntó con vergüenza y con la mirada baja. — No me malentiendas. Obviamente me encantaría llevarmelo pero mis padres son extremadamente alérgicos a perros y gatos; pero le afectan más los gatos.

—Mira, si vos querés me lo puedo llevar pero el tema es que si se entera mi vieja me quema viva. Así de corta y sencilla la situación.— reproche mientras le daba pequeños besitos en la cabeza al mismito y le hacia mimos en el lomo.

Él se sorprendió por aquella respuesta de parte mía. Sus sonrisa no tardaban en llegar; junto con sus lágrimas de felicidad. Antes de que pudiera decir algo, Luke me abrazo tan fuerte que me dejó sin aire que respirar. Le toque el hombro con unos de mis dedos haciéndole a saber que me estaba asfixiando.

—¿Quien diría que un emo haría esto?

Cuando apenas nos estábamos separando de aquel abrazo comentó entre risas eso. Yo, como la divina que soy, le muestro el dedo del medio y le miro con una cara de culo tremenda que ni les cuento. Él, sonrió por el acto así que pasó lo siguiente; me sonrió mostrando los dientes y mostrándome su dedo del medio.

De repente, nos dimos cuenta, que pequeñas gotas de agua estaban callendo. Nosotros nos miramos como unos pelotudos uno y otra, y otra vez hasta que callo la ficha. Estaba apuntó de caer un chaparrón; o en otras palabras, una tormenta.

—Fuaaa, son unos mentirosos los noticieros.

Por ese comentario me hizo soltar una carcajada, a lo que Luke me mira sorprendido y sin habla. Yo, seguia riendome; aún bajo la lluvia. El lado positivo de todo esto es que no tendre que irme a bañar cuando llegue a casa. Jaja, buena esa.