Últimamente, había algo extraño en Hyunjin.
No estaba enferma, es más, su estado mental y físico cada día iban mejorando y sus compañeras ya no la miraban con preocupación cada vez que la veían despierta por las noches o cuando cambiaba alguna de sus vendas, ahora había algo en ellas que las quería hacer luchar más fuerte para conocer al responsable de todo esto.
Lo extraño en ella era algo más allá de su salud, era algo que no sabía describir. Era un sentimiento de entusiasmo, se sentía ligera, hasta podía decir que se sentía feliz y más de alguna persona lo había notado.
Jinsoul fue la primera en hacerlo, pues a pesar que Hyunjin se quejaba por el lento y doloroso avance que tenían en busca de la identidad del nuevo rival, ya no la veía encerrada por horas en el baño y notó como su comunicación había mejorado levemente con el resto y claro que ya tenía una hipótesis al respecto.
La idea surgió aquel día que Hyunjin llegó un poco más tarde que siempre con un brillo en los ojos tan resplandeciente que la curiosidad al respecto no tardó en atacarla, pues desde años en que la conocía, pocas veces la había visto así y claramente que tuvo una pequeña charla con ella.
Gracias a sus técnicas de convencimiento, que consistían en pucheros y cosquillas, su menor confesó lo que había estado guardando inconscientemente; Lee Heejin.
Aunque el hecho que esta chica fuera la esposa de uno de los sospechosos de sus más grandes problemas hasta ahora, la emoción en la voz de Hyunjin al contarle toda la jornada de amistad con la chica era tan genuina y real que no podía evitar mirarla con ternura cuando la nombrada narraba todo lo que le había pasado ese mes. Desde las miradas extrañas hasta una especie de apuesta, Jinsoul había sido informada de todo. Hace años que no escuchaba frases tan largas salir de la boca de la chica.
- ¿Y qué es lo que pasó hoy que estás tan emocionada? - preguntó con sincera curiosidad.
Años que no se encontraban en esta posición que tenían desde niñas. Frente a frente en una habitación silenciosa, solas y cómodas.
- Porque será la primera vez que nos vamos a ver como amigas.- sonrió deslumbrante.- pero necesito tu permiso para algo.
- ¿A qué te refieres? - giró inconscientemente su cabeza. Si bien era su guardiana legal, pocas veces Hyunjin había necesitado su permiso para hacer cosas, por no decir casi nunca.
- ¿Puedo usarlo? ¿El departamento? - pidió con timidez.- Toca hacer mi parte. Creo que sería mejor si lo hacemos allí. Aún no sabemos quien es el motociclista, entonces sería riesgoso traerla aquí y si lo hacemos en casa de Hansol perdería la gracia.- razonó.
Jinsoul sonrío nuevamente. Aunque se tratase de este tipo de cosas, Hyunjin siempre priorizaba el resguardo de la familia y no podía evitar sentirse orgullosa de ella, además siempre le había costado socializar por su cuenta y la mayoría de personas que conocía, eran personas que había conocido con su ayuda y ver lo emocionada que estaba por algo que había crecido por su cuenta, la volvía feliz.
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ONE MORE DAY; 2JIN.
FanfictionLos polares caminos de Heejin y Hyunjin se verán conectados gracias a un pequeño problema de drogas... basado en el MV de Sistar "One More Day" (actualizaciones semanales *en lo posible) 06092020