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Otra semana más.

Tuvo que pedir unos días libres para poder recuperar su miserable estado de salud y para reconciliarse con Jinsoul, quien había hecho un pacto de silencio contra ella los días anteriores luego de regañarla en todo el trayecto hasta la casa.

Por suerte no había sufrido lesiones de gravedad y sus huesos ya no dolían, pero eso no significaba que se había recuperado por completo. Procuró de no exponer sus heridas frente a sus compañeras para no causar más problemas, aunque claro que su mayor se había procurado de informarles a todas lo que había ocurrido.

Si bien podía estar mejorando físicamente, había algo que no la dejaba del todo tranquila. 

Las últimas veces que trataba de dormir inmediatamente recordaba el impacto vívidamente y lo sentía tan real que no evitaba saltar del susto. Yerim al ser su compañera de habitación ya había notado que no podía mantenerse tranquila por las noches, así que no podía evitar quedarse despierta en caso de que Hyunjin despertase desorientada y asustada, pero claro que ella no se había percatado. 

Ya harta de la situación, su astuta cabeza pudo diferenciar que era un simple recuerdo, así que trataría de usarlo a su favor, por lo que, con un gran esfuerzo y luego de haber despertado tres veces seguidas, esa noche trató de dormir una vez más, pero cambiaría las cosas.

Ya sabía perfectamente que iba a pasar. El motociclista en la mira, esa sensación de adrenalina que la ahogaba, su mano en el cuerpo ajeno que rápidamente giraba con la pistola entre sus ojos para luego sentir el impacto que la despertaba. 

Ahora se procuró de que fuera distinto, no se dejo llevar por el miedo y se concentró en lo que tenía en frente. 

¡Ahí estaba! 

Y por cuarta vez en esa noche, despertó de golpe.

- ¿Yerim? - logró pronunciar entre su respiración intranquila al ver que su compañera se encontraba a su lado mientras trataba de enfocar su vista a su al rededor de ella, sin poder reconocer aún su habitación. 

- Tranquila, estoy aquí.- fue lo único que decía mientras trataba de mirarla a los ojos y soportaba el dolor del fuerte agarre que Hyunjin estaba haciendo inconscientemente en sus antebrazos 

- Y-Yerim, yo-- agarró su cabeza entre sus manos y como golpes esos recuerdos llegaban a su cabeza y ahí estaba de nuevo, la otra pista que necesitaba.- L-Lo tengo.- Una sonrisa creció en sus labios y la chica en frente la miraba con horror. 

- ¿Unnie? - llamó Yeojin desde la entrada de la habitación.- Te escuchamos gritar.- dijo somnolienta, con el resto de las chicas detrás de ella.

- Lo siento.- se disculpo al ver a todas allí.- Pero recordé algo. 

- ¿Qué es? 

- Ese día antes de chocar.- tomó una bocanada de aire y trató de calmar su sistema.-  El motociclista me apuntó con una pistola y eso era lo único que he tenido en mente.- confesó.- pero vi su casco y ahora recordé que tiene un sticker en una esquina de los protectores, creo que era una flor roja.- señaló inconscientemente en su propio rostro, como si los tuviese puestos.- si logramos encontrar ese casco, vamos a resolver esto más rápido. 

ONE MORE DAY; 2JIN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora