My life 2 : Distrust

2

El lugar se encontraba deshabitado, el suelo lleno de graba haciendo ruidoso nuestro avance mientras que viejos árboles solitarios era lo único que se podía ver a parte de la pequeña cabaña de madera que nos esperaba a lo lejos.
Íbamos con cuidado, pisando lento y alerta a todo, no se podía subestimar alguien tan tramposo como a quien íbamos a visitar, un hijo de Hermes.

- esto me huele mal Percy - murmuró Lucas viendo como una trampa para osos se cerraba sobre la rama que había dejado caer segundos antes

Asenti en su dirección. Según Orden este tipo tendría información sobre las coordenadas de las bases donde se encontraban reuniendo los monstruos.
¿como lo supo?
No tengo idea, siempre se anda guardando cosas y aunque intente sonsacarselas, no dice ni pio.
Lo mismo pasó cuando mandó a Lucas a sacarme hace cuatro años de la cámara aquella cuando me estaba ahogando en arena o cuando íbamos a atacar una pequeña base donde el movimiento de monstruos era demasiado llamativo y nos dijo que era una emboscada, hicimos la prueba y así mismo era.
También he de añadir como a descubierto a más de dos espías en nuestro campamento, espías que nunca se me paso por la cabeza su traición. No negaba su inteligencia y capacidad de observar con detalles casi todo pero Joder, es imposible saberlo todo.

- no hay nadie dentro, esto está vacío - susurró mi amigo frunciendo el ceño mientras movía sus dedos levemente. Pues claro, se me había olvidado que es hijo de Hécate

- no se si es mejor - comenté empujando lentamente con la punta de mi espada la puerta la cual se encontraba entreabierta.

El sonido chirriante de las bisagras y el crujir de la madera bajo nuestros pies me hizo estremecer.
El lugar estaba oscuro como la boca del lobo, como si las pequeñas ventanas casi pegadas al techo no permitieran entrar la suficiente luz como para dejarnos ver donde estaba el maldito encendedor.
Un chasquido con fuerza me hizo sobresaltar, a mi lado Lucas le daba trastazos al pobre encendedor de manera seguida he insistente, no había luz. Genial

- prende - me tendió una especie de lámpara antigua que tenía en el centro una gastada y mohosa vela de cera

- mucho que va a servir - me callé cuando ví que empezaba a prender velas que habían regadas por toda la cabaña permitiéndonos así ver algo.

- ¿decías? - me lanzó una sonrisa burlona

No le hice caso y me puse a buscar algo útil entre el reguero de papeles que habían desparramados encima de una larga mesa que estaba en el fondo siendo iluminada por la poca claridad que entraba por la ventana cerca de esta.
No había siquiera cama solo un sofá grande siendo respaldado por dos mesitas de noche que contenían una especie de artefacto raro.

- ¡mira! - me jaló Lucas al otro extremo de la habitación parándome justo en frente de una de las mesitas de noche, no le veía nada interesante a aquel raro artefacto - a la pared imbécil - le hice caso pero solo veía una pared cubierta por un tapiz azul sucio

- no veo nada Lucas

- porque esta escondido por la niebla, concéntrate bien - insistió tomando mi cabeza y girándola hacia la pared como si así fuera a ver algo

- oh... - murmuré cuando empece a ver líneas rojas en el papel de la pared el cual tomaba una forma ovalada simulando al mapa del mundo.

Pestañe viendo todo ya con mayor claridad, el mapa tenía varias cruces rojas tachando lugares, los cuales identifique por misiones echas por las cazadoras y Amazonas según me dijo Zeus en mi visita al Olimpo.
Estas cruces rojas eran solo el cinco por ciento de un cien, dábamos real pena si todos aquellos puntos negros eran las bases de los monstruos.