The list [Beomhyun/ taegyu]

4: Beso

— No te muevas.

— No lo hago.

El pelirrojo lo fulminó con la mirada.

Los trabajos de arte siempre han sido la especialidad de Taehyun, una persona que es buena en casi todo lo que se propone y ese día no era la excepción, cuando en su clase le pidieron dibujar algo... que para él sea hermoso.

¡Y qué persona más que Beomgyu!

El pelinegro no entiende mucho de lo que tiene que hacer, pero los ojos brillantes de su amigo y esa forma tan bonita que su carita se iluminaba, solo no pudo decir que no.

Entonces ahí estaba, posando, sin hacer nada como de costumbre, pero con la excepción del pequeño que trabaja diligentemente en su retrato.

— ¿Y por qué yo?

— ¿Por qué no?

— No sé, HueningKai también tiene rasgos faciales perfectos —comenta sin mucho interés.

Hace dos meses que había molestado al menor con eso y no salió bien, pero aun así le gusta hacerlo de nuevo, tal vez ayude a su amigo a conseguir una cita.

Kang deja su gráfico a un lado para verlo, su ceño está ligeramente enojado y su boca hace un puchero.

— Su nariz está chueca —dice sin interés.

— Bueno pensé que-

— No lo quiero a él Beomgyu. Te quiero a ti. Así que quédate quieto y deja que termine. —el azabache aceptó con temor, Taehyun nunca ha usado ese tono de voz con él ¿se equivocó en algo?

El resto del rato únicamente los consumió el silencio, los pensamientos de Choi rebuscaba por un tema de conversión, mientras Taehyun mantenía su mirada perdida en el dibujo, había perdido sus ganas por conversar.

— Listo, gracias. Nos vemos mañana —y huyó del lugar o eso intento antes de ser tomado por la mano del mayor.

— Lo siento.

Taehyun no lo miró, pero sentía el rechazo desde lejos. Beomgyu bajo su cabeza, para de un tirón hacer que el menudo cuerpo de su amigo quedara hundido en su pecho, abrazándolo.

El pelirrojo abrió sus ojos sorprendido, pero se dejó hacer cuando la mano de su amor platónico acarició su cabellera disfrutando de las caricias.

— ¿Me disculpas?

— No porque hables infantil voy a decir que sí — rio suavecito.

— ¿Por una scooby galleta entonces?

— No.

— ¿Qué puedo hacer?

— ¿Y si me das un beso?

Los ojos oscuros del mayor se extrañaron por el pedimento, Taehyun quería un beso suyo ¿por qué?

Kang se sentía nervioso pidiendo que el palpitar de su corazón no se escuche. Muchas veces es tan desvergonzado que no piensa lo que dice y actúa ingenioso con sus frases emblemáticas. Pero esta vez puede que se pasó un poco. Beomgyu no es gay y aunque le gustaría hacerlo cambiar de parecer llevaba ya cinco meses intentando que lo note. Solo ha logrado ser su amigo, lo cual no es malo, pero no es lo que quiere.

Suspira por ello, Beomgyu nunca lo va a besar, que estupidez creer que sí.

Lo empuja y se suelta del agarre despertando a Choi que se perdió en sus pensamientos, será mejor irse.

— Nos vemos maña-

El resto de la frase se pierde en el aire cuando su boca es interrumpida por los labios del mayor que se mueven lento encima de los propios.

¿Pero qué mierda?

Su mente aún no procesa, la forma en que las manos de Beomgyu atrapan sus mejillas y como es que tiene sus ojos cerrados, danzando con su boca.

Es... solo.... ah.

Choi se siente extraño, es rico, es blando, es tan cómodo y delicioso con el sabor frutal del gloss que Taehyun lleva ese día. Le gusta, le gusta demasiado.

Lamenta el alejarlo de sí, sus ojos cruzan con el color caoba y no puede evitar sonreír enternecido ante el tono remolacha de su amigo. Taehyun se quedó sin palabras, eso es nuevo.

— ¿Ah? ¿Eh? —las frases no salen y se siente muy torpe por solo sacar monosílabos, cosa que hace reír a Beomgyu, dejando a Taehyun admirar su bonita sonrisa.

Diablos, estaba rojo de nuevo.

— ¿Te llevo a casa?

— Puedo caminar.

— Déjame cuidarte.

Y otra vez se hizo chiquito en su lugar.

Estúpido Beomgyu.