El compromiso se decidió

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Oí las circunstancias de anne cuando mi cordura regresó tras escuchar tal noticia.

Al parecer la princesa por alguna razón que no comprendo del todo, se siente responsable de la cicatriz de mi frente, por lo que ha decidido tomar responsabilidad de eso.

Es decir, tomar responsabilidad = casarse conmigo.

Oh cielos, la princesa solo tiene 8 años, no es muy pronto para hablar sobre compromisos, pero sobre todo, eso no me hace un lolicon.

Aunque, estoy pensando como residente de mi antiguo mundo, tengo 8 años de memorias de este mundo, y si recuerdo bien, la hermana mayor de jared, se comprometió hace medio año cuando aún tenía 10 años.

Además por el linaje de duque o bueno duquesa al ser mi madre la líder de la familia, no hay problema alguno que me comprometa con la familia real.

Entonces no hay problema alguno.

Al comprometerme con tal princesa angelical, quien sabe, tal vez en una de esas me vuelva rey... el sueño de todo hijo de algún noble.

Cuando mis padres se enteraron de tal noticia debido a Anne, se pusieron muy felices.

En cuanto a mi, si bien no es que me disguste la idea de casarme algún día, solo puedo imaginar que esto será muy molesto a futuro.

Además de que aún está el problema de hacer mi debut ante la alta sociedad... un asunto que simplemente no se puede evitar.

De todas las cosas que me pudieron pasar, el comprometerme con una princesa, y ser algo así como un candidato a rey. Esto es completamente inesperado.

Ahh, incluso ahora quisiera rechazarla... pero no puedo decirles debido a la alegría de mi familia o la de los criados, como decirles "realmente no quiero".

En cualquier caso, para que la princesa se sintiera culpable por algo tan trivial como una pequeña cicatriz al punto de responsabilizarse al comprometerse conmigo.

Me senté en la cama donde segundos antes me encontraba acostado y miré en un espejo que se encontraba en una mesa junto a mi.

Lo único que se podía ver, era el reflejo de un niño deprimido con una pequeña cicatriz.

En comparación de mi vida anterior y aquella cara de mapache que tenía, el rostro del niño en el que reencarne, debía de admitir que era guapo. Sin embargo, mis ojos azules, daban una sensación un tanto aguda... hablando francamente daba una fuerte impresión.

Si sonrío y levanto mis labios en una sonrisa ligera, lo que se veía era la representación exacta a un "villano", pero en el interior solo había un otaku. Por eso no creo ser partido para una princesa con tanto encanto.

Suspiré por enécima ves en el día.

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A pesar de que mis padres todavía querían hablar de muchas cosas, estaban extremadamente inquietos. Me pareció molesto, así que les dije que todavía nesecitaba descansar para poder recuperarme, por lo que salieron de inmediato.

Me acosté una vez más, solo para sentir la comodidad de esta cama, era incluso 100 veces mejor que la de mi vida anterior o cualquiera que haya probado antes.

Honestamente, por todas estas cosas que han pasado referentes a la fiebre y la visita de la princesa, no he podido pensar en mi vida pasada tanto como me hubiera gustado.

Asi que ahora estoy pensando en eso.

Nací como el tercer hijo de una asalariada regular y un padre que tomo el rol de ama de casa, al ser el único varón, crecí muy mimado. Pase mis años de escuela primaria, persiguiendo a mis hermanas mayores por el patio ya que no querían ir junto a mi a las montañas. Cuando entré a la secundaria hice mis primeros amigos otakus, y cuando menos me di cuenta ya era un otaku que pasaba todos sus días viendo y comprando anime, mangas, DVD y videojuegos. Y por recomendación de uno de mis amigos comenze a jugar juegos de citas.

Ahh, eso me recuerda que no acabe el juego que acababa de comprar antes de que mi vida llegara a su final.

Me acababa de comprar el último simulador de citas unos pocos días antes de que intentara salvar a aquella niña mientras pedaleaba mi bicicleta en aquel accidente.

El juego tenía un entorno medieval europeo, como telón de fondo para la escuela de magia.

Me volví adicto.

En la escuela, a la hora de comer y en la bañera, pasaba todo el tiempo jugando.

Esa noche había tratado de llegar al final feliz de la princesa sádica y de corazón negro. Guardaba y cargaba la partida en varias ocasiones... sin embargo no iba bien... y antes de que me diera cuenta el sol ya había salido... tal vez era muy adicto a un juego de citas que había tomado muchos elementos de un otome.

Si tan solo no me hubiera dormido temprano ese dia, ahora podría estar acabando el juego...

No sirve llorar sobre la leche derramada, los proverbios son mus exactos.

De alguna u otra manera desperté con la sonrisa de la princesa del juego. A primera vista, ella parecía encantadora, Típico de una princesa de cuentos de hada, pero en el fondo era mala y sádica.

Debido a que lograba todo a la perfección y de aquellas rigurosas clases de entrenamiento de princesa, pasó sus días aburrida, sin importarle con quien estaba.

Hasta que frente a ella se paró el protagonista que llenó su vida de alegría que arrebato ese aburrimiento. Empezó a tomarle interés, el cual gradualmente se transformó en amor. Era de ese estilo la historia.

Dado que esta princesa era muy posesiva no llegó a ser tan popular como las demás, algo bastante extraño, aunque realmente la razón por la que su ruta fuera de las menos populares recaía en su personaje rival.

El era el hijo de una duquesa, quien se comprometió con ella a una edad temprana debido a una cicatriz causada en su infancia, por lo que la considera suya por lo que intimida al protagonista para evitar que este siga viendo a su prometida.

Sin embargo la razón por la que los ataba ya había desaparecido, algo que la princesa había notado, pero decidió usar a su prometido como escudo de otros nobles que intentaran acercársele.

De todas formas ese sujeto hizo muchas cosas sorprendentes para quitarse del camino al protagonista, era realmente malvado y molesto, o se supone que eso se debería pensar ya que solo era irritante.

...

...

...

Espera, me suena haber escuchado la misma historia, en otro lugar.

"Por culpa de la princesa", se comprometieron en su infancia por una cicatriz, que el.

El hombre de la princesa sádica del juego era... jared.

Además, el nombre del villano era... el hijo de la duquesa ¡¡¡¿ katarina claes?!!!.

Me levanté lo más rápido de mi cama para verme en el espejo.

Lo que vi fue el rostro afilado del villano. Se supone que esta es la cara del mal... algo como esto... tal cosa.

-¡¡¡¿Tienes que estar bromeando?!!!.

Como tal, el joven amo tuvo que ser examinado de nuevo por el médico... y las sirvientas volvieron a murmurar acerca del hijo de los claes.

Fin del capítulo.

Matchigemu no hametsu no hata o niguri dake no akuyaku musoku ni umarekawarimashDonde viven las historias. Descúbrelo ahora