Realidad Mezclada (SasuHina)

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En la gran cuarta guerra ninja; después de recibir los primeros ataques el equipo ocho se vio obligado a dividirse y con gran pesar la fémina del grupo se dispuso a sobrevivir por su cuenta.

Corrió por varios lugares y sin darse cuenta terminó frente a los dos enemigos más poderosos de la historia ninja. Obito y Mada Uchiha, que en esos momentos se encontraban visualizando la destrucción frente a sus narices.

Hinata se congeló, no sabía que hacer. Sus enemigos solamente la veían y con cierta gracia la vieron tomar posición de combate completamente temblorosa.

-Jajaja debes estar bromeando niña. -dijo Madara divertido con la situación.
-Y-Yo d-debo...
-¿Detenernos? -Cuestionó el mayor, residiendo solo una afirmación de cabeza.
-Hazlo si quieres, pero antes dilo sin temblar o tartamudear. -se burló Obito con la máscara de espiral aún puesta.
-M-Mi d-deber como n-ninja es d-dar mi vida por u-una c-c-cau-causa. -musito con dolor, pues sabía que ese era su fin.
-¿De verdad estas dispuesta a morir? -Cuestionó Madara con frialdad. -¿No preferirías tener una vida larga y plena?
-Y-Yo no...

El mayor, pudo observar en ella miedo, dolor y resignación, al mismo tiempo que firmeza, fuerza y valor; de pronto vio a Obito asercarse a la chica con una barra en su mano.

-Te haré el favor de darte una muerte rápida e indolora. Solo respira profundamente y cierra los ojos.

Hinata mordió su labio lista para pelear, pero con asombro vio a Madara detener a su cómplice.

-No. -declaró. -En lugar de eso, hazla ser la primera en conocer el tsukuyomi infinito.
<<¿T-Tssukuyomi infinito?>> pensó la Hyuga.
-¿Estas seguro?
-Sí, si no funciona, su cerebro se fundira y morirá, no hace ninguna diferencia.
-Bien.

Ambos ninjas unificaron sus chakra en un mismo jutsu, donde ambos mezclaron sus poderosos dojutsus y de esta forma penetraran la mente de la fémina, que poco a poco mostró el rinnegan en su mirada.

-Aún vive.
-Sí.
-La dejaremos aquí mientras terminamos lo demás. cuando el tsukuyomi infinito sea definitivo, la reuniremos con sus compañeros.
-Bien, vamos.

Ambos ninjas ignoraron la condición de la chica y sin más desaparecieron, dejándola a su suerte.

...

Después de un rato la olvidada ojiluna comenzó abrir los ojos con una intensa jaqueca, pues el dolor le era punzante y penetrante.

-Agh...maldición, baje la guardia.

Hinata al ver a su alrededor observó un paisaje destruido y solitario.

-¿Que diablos pasa aquí? ¿¡Dónde está Menma y el fanfarrón Uchiha!?

Ella se puso de pie y sintiendo su cuerpo sumamente incómodo, dirigió la vista a su atuendo llevándose una desagradable sorpresa.

-¿Qué con esta ropa de mierda? Paresco una anciana.

Sin dudarlo se retiro el chaleco ninja y se quito la "enorme" camisa de manga larga que la cubría, quedando solamente en una blusa de malla sin mangas.

-Así esta mejor. Ahora estos anticuados pantalones. -decía, mientras se colocaba nuevamente el chaleco shinobi.

Como si nada pasara a su alrededor, empezó a ajustar su pantalón ninja con simples dobleces que lo hacían entallarse más a sus curvas. Se removió las vendas de los pies y noto que su calzado eran una botas, cómodas aunque poco estéticas, y haciendo uso de ello, adentro los "excesos" de pantalón en ellas, asegurandolo perfectamente para que no volviera a holgarse.

-Esto esta mucho mejor. Ahora, ¿a dónde voy y qué diablos hago aquí?

Sin dudarlo la joven uso su byakugan y observó fijamente a "Menma" agotado en medio de lo que parecía un campo de batalla no muy lejos de ella.

Hinata HaremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora