𝑬𝒓𝒆𝒔 𝒖𝒏 𝒊𝒎𝒃é𝒄𝒊𝒍 𝑴𝒂𝒕í𝒂𝒔 - 𝑳𝒊𝒕𝒄𝒌𝒐 [EDITANDO]

Con amor y sinceridad, Matías.

Querido Mauro,

Es difícil poner en palabras todo lo que siento en este momento, pero estoy decidido a ser honesto contigo. Desde lo más profundo de mi corazón, necesito que sepas que te amo. Las palabras no pueden expresar completamente la magnitud de mis sentimientos, pero estoy haciendo un esfuerzo sincero para compartir contigo mi verdad.Me disculpo de todo corazón por cualquier dolor que te haya causado. Reconozco mis errores y las veces que pude haber actuado de manera diferente. No soy perfecto, pero puedo asegurarte de que siempre he querido lo mejor para ti. La vida nos ha llevado por caminos complicados, pero no quiero vivir con arrepentimientos.

 Me estoy mudando a otro lugar, esto no significa que quiera olvidarte; de hecho, es todo lo contrario.

No puedo evitar preguntarme si aún sientes lo mismo. Si en algún rincón de tu corazón, persiste el amor que me tenías. Si es así, te pido que consideres venir a buscarme. Mi nuevo hogar está lejos, pero el amor puede superar la distancia si ambos estamos dispuestos a intentarlo.

Mi intención al escribir esta carta no es presionarte ni obligarte a tomar decisiones apresuradas. Simplemente quiero ser honesto contigo y dejar espacio para la posibilidad de un futuro juntos, si ambos estamos dispuestos a trabajar en ello.Sea cual sea tu respuesta, siempre llevaré conmigo tus recuerdos. Eres una parte fundamental de mi vida, y siempre guardaré un lugar especial para ti en mi corazón.Con amor y sinceridad,Matías.

Matías, con el corazón latiéndole con fuerza, selló la carta con un beso en el sobre y la depositó cuidadosamente en el buzón de Mauro. Los días pasaron lentamente mientras Matías esperaba una respuesta que no llegaba. Cada segundo que transcurría parecía una eternidad. Mauro no lo busco

Finalmente, Matías se fue.

En la nueva ciudad, Matías intentó construir una vida diferente, pero su corazón seguía anhelando la presencia de Mauro.En la mente de Mauro, la ausencia de Matías era una sombra que oscurecía cada día. Sin embargo, la herida de la confesión y las disculpas aún estaba fresca. Aunque anhelaba la reconciliación, el orgullo y el miedo a enfrentar la verdad lo mantenían estático.Los meses pasaron, y la distancia entre Matías y Mauro se volvió más que geográfica: se volvió emocional. La ausencia de Matías dejó un vacío que ni el tiempo ni las distracciones pudieron llenar para Mauro. La soledad le recordaba constantemente lo que había perdido, lo que pudo ser y no fue.Matías intentaba seguir su vida, pero la sombra de Mauro lo perseguía. A pesar de sus esfuerzos por seguir adelante, el recuerdo lo mantenía anclado al pasado.