Vida

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Shikadai salió del tren a toda prisa en cuanto se abrieron las puertas del vagón y abandonó la estación sin despedirse de nadie. Corrió hacia el hospital, Inojin siguiéndolo de cerca, y pudo notar el chakra de sus tíos en algún punto detrás de ellos dos.

Estaba tan nervioso que le temblaban las piernas. No podía esperar a ver a su hermana. El mero hecho de pensar en ella le hacía sonreír como un tonto. - ¡Démonos prisa, Inojin!

Llegó casi sin aliento y se detuvo en la puerta durante unos segundos para calmarse un poco. Entró al hospital intentando no correr y preguntó en recepción por su madre. En cuanto le dijeron en que habitación estaba, Shikadai e Inojin subieron escaleras tan rápido como pudieron sin llegar a correr. 

Delante de la puerta de la habitación de Temari estaban Sai e Ino. Desde donde estaban, Shikadai solo los veía abrazados, pero a medida que se acercaba a ellos, se dio cuenta de que Ino estaba llorando. De primeras pensó que era de la emoción, pero en cuanto se fijó en la cara de Sai, Shikadai dejó de correr. Se quedó muy quieto en mitad del pasillo, a unos metros de la pareja Yamanaka. Inojin se detuvo junto a él y puso su mano en el hombro del Nara.

Inojin se acercó a sus padres y, antes de que siquiera pudiera formular su pregunta, Ino se abalanzó sobre él y le abrazó, llorando aún más fuerte que antes. Inojin miró a Shikadai con preocupación. Shikadai tuvo que hacer un esfuerzo para no caer al suelo de rodillas. Caminó hacia los Yamanaka.

- Tío Sai... - Dijo Shikadai, casi en un susurro.

- Shikadai, deberías entrar y hablar con tu madre.

Shikadai soltó un suspiro pesado. Su madre estaba bien. Se acercó a la puerta de la habitación y colocó su mano en el pomo de la puerta. Se quedó quieto durante unos segundos, sin saber muy bien que iba a hacer. Era evidente que algo le había pasado al bebé. A su hermana. Shikadai cerró los ojos y se preguntó a sí mismo porque no podía tener una vida simple y sencilla. Respiró hondo, abrió la puerta, entró a la habitación y la volvió a cerrar detrás de él. 

Vio a su abuela y a su madre sentadas en la cama. Temari estaba llorando como nunca antes la había visto llorar. Shikadai sintió una fuerte punzada en el pecho y su visión se volvió borrosa a causa de las lágrimas que amenazaban por derramarse de sus ojos. Pero aun así, observó la habitación y se dio cuenta de que no había una cuna.

Shikadai se dio cuenta de lo que había pasado a la vez que su madre se volteó para mirarlo a los ojos.

- Has perdido a la bebé... - Shikadai susurró. Temari asintió, cerrando los ojos y dejando que las lágrimas siguieran empapando su rostro. Shikadai sintió que iba a perder el control de sus piernas. Retrocedió un paso para apoyar su espalda contra la pared y se deslizó hasta estar sentado en el suelo. De pronto le dolía muchísimo la cabeza y el pecho y sentía como si se estuviera ahogando. Primero papá y ahora... Shikadai no pudo acabar ese pensamiento. Cerró los ojos y se cubrió la cara con las manos. - ¿Por qué...? - Shikadai susurro y dejó que las lágrimas brotaran de sus ojos. - ¿Acaso no hemos tenido bastante? - Shikadai preguntó al aire, con la esperanza de que si algún Dios estaba escuchándole pudiera sentir una mínima parte del dolor que estaba sintiendo él en ese momento. O de todo el dolor que había sentido en el último año. 

Shikadai sintió un brazo rodearle, pero lo apartó con un movimiento que hizo con su hombro. No quería abrazos, no quería palabras de ánimo. Shikadai no quería simpatía. Solo quería que el dolor acabara. 

Shikadai se sobresaltó al oír la puerta de la habitación abrirse. Levantó la cabeza y vio a Kankurô y a Gaara entrar. Kankurô se quedó de pie junto a la puerta mientras Gaara caminaba directamente hacia Temari. Esperó a que Yoshino le hiciera un hueco al lado de Temari y Gaara se sentó junto a ella. Lo único que hizo fue abrazarla y Temari dejó de llorar de inmediato. 

Shikadai notó a Kankurô sentándose junto a él en el suelo. Shikadai le miró a los ojos y vio que estaba muy pálido y muy serio. Volteó la cabeza para ver la cara de Gaara y él tenía la misma expresión que Kankurô. Shikadai no se atrevió a seguir llorando.

- Debería haber sido yo... - Temari empezó a hablar, pero Gaara la interrumpió.

- Ni se te ocurra continuar esa frase. Lo que ha pasado es horrible, pero no puedes hacer nada al respecto.

- Pero... - 

- Temari. - Ahora fue Kankurô el que la interrumpió. Su voz se quebró mientras pronunciaba su nombre. Shikadai vio que su tío tragó saliva antes de seguir hablando. - Deja de pensar. Solo te harás más daño. - Y con esas palabras, Temari rompió a llorar de nuevo. 

Shikadai quería salir corriendo de allí. Quería correr tan lejos como le dejaran sus piernas y llorar en donde quiera que pudiera acabar, pero no se movió de donde estaba. No podía hacer nada más que observar los rostros de sus familiares. Gaara y Kankurô estaban conteniendo las lágrimas y estaban frustrados porque no sabían qué hacer para ayudar a Temari. Yoshino estaba de pie junto a la ventana, observando el cielo con la mirada perdida. La habitación estaba sumida en un horrible y pesado silencio que únicamente era interrumpido por el llanto de Temari. 

Shikadai hizo un esfuerzo para levantarse y alargó el brazo para ayudar a Kankurô a incorporarse también. Su tío lo miró a los ojos por primera vez desde que había llegado. - Vamos - Dijo Shikadai sin llegar a usar su voz. Kankurô tomó su mano y se levantó. Los dos se acercaron a Gaara y a Temari y Shikadai abrazó a su madre a la vez que reprimía el miedo y las ganas de llorar que estaban intentando dominarle la mente. 

- Al menos... Al menos tú estás viva. - Temari abrió los ojos y miró a su hijo. - ¿Qué se supone que hubiera hecho yo solo con mi hermana, si hubieras muerto tú en vez de ella? - Shikadai se aferró a su madre un poco más fuerte. - Ya fue bastante duro perder a papá. No sé que haría si encima te perdiera a ti también. - Shikadai sintió las lágrimas mojando sus mejillas. - Es injusto que mi hermana haya muerto. Es una mierda. - Shikadai sintió los brazos de su madre rodeándolo. - Pero... es lo que hay. 


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Nota de la autora:

Primero que todo, sorry not sorry :P

Segundo, siento haber tardado tanto en actualizar la historia ('·_·), han sido unos añitos complicados jeje. 

Es increíble entrar de vez en cuando a Wattpad y ver que tengo cientos de notificaciones vuestras, tanto estrellitas como comentarios. Agradezco muchísimo el apoyo que ha tenido esta historia y estoy muy contenta de que la estéis disfrutando tanto <3 

A ver si soy capaz de acabar esta historia algún día :3

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⏰ Última actualización: Jul 07, 2022 ⏰

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Shikajin: Repara mi CorazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora