Fairy Tail: Los Elegidos de La Llama Eterna (PAUSA INDEFINIDA)

Capítulo 21: Misión en conjunto: Parte 3 La tristeza de Natsu Dragneel

Pov Natsu

Me encontraba en la habitación que los chicos y yo compartíamos, acostado en mi cama viendo el techo indeciso de si ir o no a las aguas termales del hotel. En la recepción nos comentaron sobre ellas y a los demás les pareció una gran idea, ya saben, descansar un poco.

Después de unos minutos decidiendo, fruncí un poco mi cara, hasta que al final me decidí en ir para luego tomar una toalla y un poco de ropa.

Al salir de la habitación me encontré con Erza, Wendy, Charle y... Juvia. Han pasado casi dos semanas desde lo ocurrido y aún no me he disculpado con ella. La noche anterior Gray me contó lo sucedido después de lo que había dicho y también de lo que hablaron.

Las chicas me saludaron cada una de distintas maneras, pero Juvia solo me saludo con la mano, para luego irse junto con las chicas. Fue una sorpresa saber que ella le dejo en claro que ya no trataría de insistir en conseguir su amor, después de todo, es Juvia.

Natsu: Je... - Solté una corta risa, desde lo sucedido en la guerra de Álvarez, algunos amigos y compañeros se han vuelto muy cercanos. Como en el caso del Tornillos y Levy, fue una gran sorpresa que anunciarán que ambos eran pareja y que además ya llevaban tiempo saliendo, y eso no fue lo único, al parecer Levy dará a luz a dos pequeños. Eso si nos tomó por sorpresa a todos y más al tornillos que no pudo evitar llorar de la felicidad.

Es raro, amor, la palabra misma no me genera nada en lo absoluto, aun cuando Igneel me decía que al llegar a cierta edad debía de conocer a la persona indicada, para que ambos pasáramos el resto de nuestras vidas juntos. Se escucha un poco extraño decirlo de esa manera, y aún después de años no consigo entenderlo muy bien.

Natsu: Tal vez debería preguntarle a alguien, pero ¿A quién? - Mientras me preguntaba esto, caminaba en dirección a los baños, y por el camino me encuentro con Lucy - ¡Hola Luce! - La salude con una sonrisa, asustándola un poco.

Lucy: ¡H-Hola Natsu! - Me respondió de la misma manera, un poco exaltada por mi repentino saludo.

En ese momento ambos vemos a Isass caminar en nuestra dirección, quién al percatarse de Lucy desvía su mirada al igual que ella. Ambos con expresiones afligidas y tristes, no me gustaba verles de esa manera, pero tampoco podía entender cómo se sentían. Hasta que una idea llegó a mi mente.

Natsu: Lucy, ¿Vas a las aguas termales? - Le pregunté viendo que ella también tenía una toalla y demás cosas, ella asintió - ¡Entonces vamos juntos! - Con una sonrisa para animarla la tomé por sorpresa.

Lucy: Si, me vendri... ¡Espera! ¡¿No trataras de espiarme, o sí?! - Ante su pregunta fruncí el sueño con clara molestia.

Natsu: ¡¿Ah?! ¡¿Por quién rayos me tomas?! - Con claro disgusto le cuestioné, aunque pude ver que dudaba. Había pasado mucho tiempo desde lo ocurrido en la guerra de Álvarez, y el cómo me había alejado de ella.

Mientras nos dirigíamos a los baños íbamos hablando de cualquier cosa, reíamos o nos molestábamos cómicamente. Ha pasado mucho, mucho tiempo desde la última vez que charlabamos así... tanto que lo echaba de menos.

Lucy: ¡Jajaja! ¡Ha pasado mucho desde la última vez que charlabamos de esta manera! - Escuchaba como reía para luego cambiar a un rostro triste, sabía el porqué de eso, después de todo, me aparte de ella sin decirle nada.

Descubrir que yo soy realmente E.N.D. me afectó demasiado, y aún más la verdad de Zeref y mi pasado. Al terminar la guerra decidí darme un tiempo a solas y pensar sobre todo lo que había descubierto. No fue fácil y eso me llevó a fingir una actitud diferente hacia mis amigos.