La Señora

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¡Hola! Este capítulo explica muchas cosas sobre la historia y algunos datos sobre los demonios, no habla sobre el Kookgi pero si sobre el porqué Yoongi es odiado por la mujer rubia de sus sueños, si les interesa la historia y quieren entenderlo un poco más les recomiendo que lo lean aunque también se lo pueden saltar, de igual manera estaré avisando que capítulos están menos enfocados al shipp y más la historia

¡Cualquier duda o sugerencia pueden dejarme un mensaje en el tablero!

Congelada en el momento, nada se movía mientras moría. Nadie sabe que morí. Nadie, excepto el que me dio la muerte.

CATHY

ME TOMÓ MUCHO, mucho tiempo convertirme en la Señora. La ira y el vacío que sentía aceleraron el proceso, la desesperanza en la que vivía fue mi combustible. Tomó diez años más encontrarlos, a mi Valaya, a los que me ayudarían, y estuvimos listos.

Ese día, pero de hace veinte años, fue cuando me rompieron el corazón, ese día supe que había perdido la luz para siempre. Estaba atrapada en el resplandor de la luz Min, y me convertí en ceniza. Lo único que quedó fue la oscuridad, y aprendí a vivir en ella, como si no fuera más que un recuerdo, un recuerdo doloroso que hubiera que borrar lo antes posible.

«Ya es tiempo de seguir adelante», dijo él.

Yo había sido una Min por un momento, había sido la elegida para llevar la herencia, para ser la hija que habían perdido. Yo, la niña sin padre ni madre que acogieron como propia. Doyun y yo crecimos juntos; él era mi mundo y yo era su mundo, éramos los mejores amigos y la mejor compañía que podíamos tener el uno del otro. Nos enamoramos bajo la mirada aprobatoria de su madre. Todo era perfecto. Nos casamos Yo lo adoraba.

Y después todo se vino abajo.

—Es una niña —dijo Hye sin ninguna duda—. Ahora lo veo.

Estaba sentada junto a mí, como para protegerme, con una mano en mi vientre y los ojos cerrados. No me había perdido de vista desde que se enteró de que estaba embarazada. Ella lo supo primero, antes que yo, antes que Doyun, antes de que cualquier examen médico pudiera registrarlo. Me dijo que yo desprendía una luz. Estaba tan contenta en ese momento que ni siquiera tengo palabras para describirlo.

Todo lo que quería era su aceptación.

Y el amor de Doyun. Lo hice sentir orgulloso. Yo tenía dieciocho años y lo tenía todo. Fuera de nuestra ventana, el mar rompía contra la playa de Islay una y otra vez, y para mí ese sonido era dulce, era el sonido de mi hogar.

Estaba en casa.

—Tú la vas a entrenar y va a ser una Soñadora. —Doyun estaba desbordante de alegría viendo a su madre.

—Sí. Nosotros la cuidaremos. —El rostro de Hye se llenó de dolor por un momento. Supe que estaba pensando en Shin , su hermana perdida. Ésta era otra cosa en la que yo podía ayudarla, ayudarlos a todos a calmar el dolor que sentían por su Mairead perdida.

Esa noche me fui a acostar con las palabras de Hye danzando en mi memoria: es una niña. Mi hija. Min Yung.

A la mañana siguiente me levanté en una cama empapada. Cuatro meses antes, mi hija estaba lista para venir al mundo..., pero su cuerpo no lo estaba, por supuesto.

La sostuve como una muñeca muy blanca, muy quieta. Estaba demasiado impactada como para llorar. Doyun lloraba junto a mi cama; Hye estaba parada junto a la ventana, como si fuera la treceava hada, la que maldice a la Bella Durmiente en su bautizo. Ahora sé que podía ver lo que estaba por venir, lo que el doctor iba a descubrir.

Sueños Secretos - kookgiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora