Sobrevivir || Shin Soukoku, Soukoku ||

Cuenta regresiva

Sus manos temblaban levemente, tenía miedo, ¿Qué había hecho? Sus pequeñas manos manchadas delataban el delito que acababa de cometer, el cuerpo delante de él hacía que temblara más. Quería vomitar, quería llorar, quería huir, quería salir de ahí lo más rápido posible.

Sus mejillas estaban totalmente mojadas por el pequeño mar de lágrimas que salía de sus ojos rojos. Cayó al frío suelo, su mirada perdida jamás se despegó del cuerpo inerte que tenía al frente. Un grito desgarrador salió de su garganta, un grito de arrepentimiento y dolor. 

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Se incorporó en la cama de forma abrupta, estaba bañado en sudor y su respiración iba a millón. Sentía que iba a morir, aquel sueño le atormentaba desde hace años. Lo que había pasado aquella noche era algo que no podría olvidar.

Trató de calmarse dándose una ducha con agua fría, cosa que ayudó un poco. Cambió sus ropas a su uniforme escolar habitual, el sonido de su teléfono hizo que su atención pasará a este, era un mensaje, para ser más exactos de su pareja. Se extrañó un poco, su pareja no era alguien que le escribiera en las mañanas, en realidad según él le parecía algo ridículo, así que él era quien escribía primero.

El mensaje era un simple buenos días y un como estaba, rió un poco, A pesar de ser un mensaje simple le hacía sonreír. Escribió una respuesta bastante positiva como era usual, a pesar de no haber empezado bien el día Akutagawa siempre le sacaba una sonrisa. 

Después de unos minutos de conversación, se despidió de él prometiendo que se verían en la en la escuela. Con energías recargadas bajó para preparar su desayuno y terminar de arreglarse para empezar la jornada escolar.

Tomó sus cosas, colocó sus zapatos y dió un último vistazo a su pequeña casa, cerró la puerta detrás de él mientras el sol daba en su cara, miró con fascinación el hermoso amanecer de aquel día, un pequeño sentimiento de angustia se instaló de repente en su pecho. El sentimiento de que quizás sea la última vez que vea aquel hermoso cielo.

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7:53 Am faltan doce horas con siete minutos para la depuración anual.

Los murmullos, ruidosos y extensos era lo único que se escuchaba en los pasillos de la preparatoria Stray Dogs, cosa que estaba empezando a molestar al de cabello oscuro. Algo que no pasó desapercibido por uno de sus amigos.

— ¿Qué con esa cara?– Preguntó el pelirrojo de baja estatura

— ¿Qué cara?

— Ay, Akutagawa no te hagas el que no sabe, desde que llegaste has estado con esa cara. ¿Qué te molesta? 

— No sé de qué está hablando Chuuya-San.

— Dejalo Chuuya, no va hablar si no quiere– Habló el más alto de los tres– Además es obvio de que se trata de Atsushi-Kun, no lo viste como estaba sonriendo como tonto a su telefono.

— Yo no sonrio como tonto– Un pequeño color rosa se apoderó de sus mejillas, trató de disimularlo cubriendo su boca y finjiendo toser.

— Oh, si que lo haces. ¿Quizás debería tomarte una foto?

— Ya deja de molestarlo Dazai.

Para matar el poco tiempo que les quedaba antes de empezar las clases y distraer un poco a Akutagawa, conversaron de cosas triviales pero fueron interrumpidos por el sonoro sonido de la campana.

— ¿Por qué Jinko no llega aún?

— ¿Qué esperabas de Atsushi-kun? Él siempre llega tarde.