Sobrevivir || Shin Soukoku, Soukoku ||

Un lugar a donde ir

La luna iluminaba las calles, la gente estaba como loca. Gritos y risas, el olor a sangre, el sonido de los disparos. Todo eso podías encontrar en las calles de todo Japón, era un caos total, pero eso era lo que disfrutaban.

Atsushi y Chuuya caminaban entre las calles con sumo cuidado, había autos yendo a increíbles velocidades. Lo único que querían era llegar al puerto lo más rápido posible.

— Chuuya-San, ¿Cómo se siente?

— Me duele un poco la herida, pero estoy bien. No es la primera vez que recibo una bala.

— ¿Podría contarme un poco más sobre esa pandilla? Ryu me contó un poco, pero me gustaría saber un poco más.

— Bueno Fyodor, la rata, le pidió a Osamu que se uniera a ellos, exactamente no se como logró convencerlo pero al final Dazai terminó aceptando. Pues Fyodor lo terminó traicionando.

— Si Akutagawa ya me contó eso.

— Bien, Dazai decidió tomar venganza, destruyendolos. El año pasado fue una masacre completa, al final salimos victoriosos, pero ¿cómo es posible que haya hecho todo esto en solo un año?– Preguntó– Aunque su forma de pensar es muy parecida a la de Dazai, así que tampoco sería extraño que haya logrado tanto.

— ¿A qué se refiere?

— Mira Dazai y Fyodor piensan aterradoramente igual, cuando nos enfrentamos a ellos fue jodidamente difícil acabar con ellos, sino hubiéramos tenido al bastardo de nuestro lado y algo de ayuda extra, lo más seguro es que todos hubiéramos muerto.

El silencio reinó entre ambos, Atsushi trataba de entender lo que Chuuya le acaba de contar mientras que el otro aguantaba el dolor que tenía en su hombro.

Mientras caminaban, pasaron frente de un callejón. El albino sintió como fue arrastrado hacia él, Chuuya que iba al frente se extrañó al no escuchar los pasos detrás de él. Volteó pero se asustó al no ver al más joven siguiendole.

Escuchó unos forcejeos en el callejón que no había pasado hace mucho, sacó el arma que tenía entre sus ropas y se acercó al callejón.

— Vamos hermosura, no hagas esto más difícil– Decía lo que parecía ser un joven junto con otros dos chicos.

 Atsushi estaba contra la pared mientras temblaba de miedo.

— Quiero verle la carita hermosa que tiene– Dijo queriendo retirar la máscara que portaba el albino. Atsushi trató de forcejear.

— Ni lo intentes pequeño, a menos que quieras terminar con un cuchillo en tu estómago.

La rabia de Chuuya era indescriptible— Oigan idiotas.

Al escuchar el grito del pelirrojo los tres chicos voltearon a verle, esa fue la distracción perfecta para que Atsushi lograra golpear la entrepierna del chico que tenía al frente.
Chuuya al ver como los otros dos se distrajeron disparó al que tenía más cerca. Matándolo.

Atsushi corrió hacía Chuuya, mientras uno de ellos se retorcía del dolor por el golpe que le había proporcionado el de cabellos blancos, el otro levantó sus manos en forma de rendición. Cosa que sería inutil, pues si tocas a Atsushi, ten por seguro que vivo no saldrás.

— No...No nos mates solo queríamos pasar un buen rato.

— Tuvieron que pensar mejor con quién se metían– Sin más que decir terminó disparándole a los dos chicos– ¿Estas bien? ¿Cómo te sientes?

— Estoy… Estoy bien.

— Hay que apresurarnos para llegar al puerto.

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