Cómo dejar de ser Homofóbica en 5 besos 💋

Beso #3 -En el cuello pt 2-

Al día siguiente, ya había entablado una gran conversación por móvil con el chico más guapo que encontré en mi vida. Mi padre estaría muy orgulloso de mí. Y, al parecer, yo no era la única que estaba pensando en una relación futura.
SooBin, por su lado, me coqueteaba como el mejor.

-Whoa! Este chico sí sabe halagar-. Comentó Taeyong. Ambos estábamos en mi casa, comportándonos como cuando éramos pequeños-. SooBin... nombre raro, ¿verdad?

-No le envies ningún mensaje -. Le dije al ver que mi celular estaba entre sus manos.

Como acababa de salir de la ducha, no podía moverme como una ninja para quitarle el celular. Por lo tanto, intenté confiar en él lo más que pude.

-¡Di whiskey!-. Exclamó.

No me percate de que me estaba apuntando con la cámara de mi móvil.

Segundos después, me había sacado una foto solo con un mini top y una toalla enredada en mi cintura.

-¿Qué demonios haces?-. Me quejé. terminando de cambiarme.

Con Tae no tenía problema con mostrarme enfrente de él, mientras no sean mis partes inferiores, ya que las boobies no le atraían.

Y menos las grandes.

-Enviando la foto a tu chico. Es un regalo de parte mía.

Me coloqué la última prenda y le arrebaté el celular con rapidez.

-Ups. Creo que debo irme dijo. Nos vemos mañana en clases. Recuerda pasarme los deberes, por favor.

"Regalo de T-Yong" leí en el mensaje que había enviado él.

No alcancé a borrar la imagen, así que, en menos de lo que pude contar aquella ya le había llegado.

-¡Ahora pensará que soy una pervertida!-. protesté-. ¿Eres idiota? ¡Tonto!

- Oye, si está interesado, se le caerá la baba.

Gruñí. Le mande otro mensaje, explicando la situación. Lo que más me sorprendió de todo, fue su sencilla respuesta:

"Qué sexy! :) Dale a T-Yong, las gracias de mi parte"

-Ves? Ya le caigo bien-. Comenta Tae. Salió de la habitación y luego corrió hasta la puerta de salida.

Qué suerte que tenía el muy idiota, de tener a una amiga tan paciente y pacifica como yo. Es decir, cualquiera le hubiera roto el celular en la cabeza.

Mi estómago sonó y decidí salir de compras, algo de comida y un poco de distracción, no estaba nada mal.
Estuve vagando toda la tarde, tratando de encontrar una galería que me habían recomendado hace tiempo, no recuerdo bien por dónde demonios me metí, pero al darme cuenta ya era de noche, debía apresurarme.

No tardé mucho, pero, al salir de la galería, me molestó demasiado lo que me encontré.

De nuevo, como si tuviera un imán en el jodido trasero, YuBin estaba caminando hacia la misma ruta que según yo, llevaba a la parada. Mis esfuerzos por no verla se habían esfumado en un mini cerrar de ojos.

¿Acaso adivinó mi ruta y quería secuestrarme?

La ignore mientras caminaba. Si hacía como que no la veía, no importaba, ¿verdad? Tal vez ella ni siquiera me había notado.
Después de todo, caminaba como una especie de alma en pena.

-¡Deja de seguirme! -.Error mío-.¡Llamaré a la policia, YuBin!

Al parecer ese grito la sorprendió, me miró desconcertada, tratando de reconocerme.