Beso #4 -En el mentón pt 2-

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Pasaron nueve días en total, cuando mis dudas se extendieron

No había visto a YuBin durante todo ese tiempo, pero mi mente cada vez hallaba alguno que otro detalle para volver a pensar en ella. Si no eran las capas rojas de un superheroe de los cómics de Taeyong, eran las camisas azules desaliñadas del profesor.

No me preocupe por ello, hasta que lo confundí con alguien.

Taeyong había faltado a clases y, como no tuve otra opción, me senté sola en mi banco. No me perturbé por que él faltara, ya que no era la primera vez que lo hacía. Sin embargo, me puse un poquito nerviosa cuando un chico nuevo llegó.

Su cabello era rubio y sus miel. Tenía unos brazos extremadamente marcados y perfectos cosa que no podría haber olvidado nunca, y un trasero tan respetable que incluso Rain lo hubiera envidiado. Y no, no exagero.

Era más guapo que SooBin, y no lo negaba.

De alguna manera, no le di atención a su presentación. Gracias a mi hermosa costumbre de distraerme hasta con un pelo fuera de lugar, cuando se sentó en la silla de mi lado, lo observé con curiosidad.

-Hola, mucho gusto-dijo. Agradecí que fuera más social que yo -. Soy Shin Hoseok.

Puse todo mi esfuerzo en no mirar sus pectorales, cosa que me costó bastante, debido a su ajustada camisa. Gracias al cielo, él no parecía darse cuenta de aquello. Esperaba que no estuviera sudando.

-Y yo Gahyeon.- Mencioné con una sonrisa.- ¿Nuevo alumno?

Él bufó y se acomodó en la silla. Qué suerte la mía de que Taeyong hubiera faltado.

-Una larga historia -. comentó-. ¿Crees que me irá mal aquí?

-Solo trata del que el calvo asqueroso no te atrape hablando mientras copia en la pizarra y estarás a salvo.

Sentí una mirada asesina proveniente del profesor y mi piel se volvió de gallina.

¿Acaso todos los profesores tienen una especie de detector de alumnos "rebeldes"? Es decir, incluso aún estando en el último banco, él me escuchaba.

En cuanto abrí la boca para hablar de nuevo, sentí un pequeño golpe en la pierna por parte de Hoseok. Cuando vi lo que quería que notara.

Leí en un papel lo que él habia escrito. Su
boligrafo era de un color azul turquesa.

"Gracias por el ejemplo :)"

Sonreí ante ello y le respondí, junto con un dibujo, en el mismo papel:

"Es un placer, Monsieur. ¿Quiere algún otro ejemplo? Tal vez puedas ver sus nalgas rebotar"

Oí una pequeña risa de su parte y noté como sus hombros se movían; una señal de haber aguantado una carcajada.

"Desde luego, aunque prefiero no verlo a que nos expulsen de la clase por reírnos"

"¡Sería divertido!"

"No, Gah. Quiero empezar bien mi primer día"

"¿Qué tal con un tour de la hermosa Lee Gahyeon por el colegio?"

"Oh, te lo agradezco. Pero ya tengo a alguien que me lo enseñe. Es una gran amiga. Tal vez la conoces, se llama YuBin. Es una pequeña castaña un año mayor que nosotros"

Tragué saliva antes de contestar. De nuevo, tenía una razón para pensar en ella: un compañero reciente mucho más guapo agradable que cualquiera que, por desgracia, era amigo de YuBin.

"Si, la conozco"

Estuvimos hablando por aquella vieja y arrugada hoja hasta que se terminó el espacio. Gracias a él, supe que YuBin fue su amiga de la infancia y que siempre estuvieron juntos a pesar de muchas cosas. También, dándole créditos a mi terrible insistencia, descubrí que su grupo de amigos de la infancia, se había destruido por un problema que la había incluido a ella.

Después de que tocara el timbre para el recreo, no tuve otra cosa para preguntar. No quería meter mis narices en la vida de la chico tomb, pero me daba curiosidad. ¿Extraño, verdad?

Quería saber más de una lesbiana tomboy

Cómo dejar de ser Homofóbica en 5 besos 💋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora