Capítulo 2: Él mes que se fue volando 1ra mitad parte 3

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Hola a todos nuevamente XD, sorry por los que esperaban la parte 3 completa, pero supongo que será de esta manera otra vez, como sea, no estoy seguro si quedo del todo bien editado (ya saben, pereza, pereza, pereza, pereza), pero aquí se los dejo, si hay algún error mayor lo corregiré mas adelante, así que por ahora, espero les guste XD... 


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Cualquiera pensaría que después de la visita de Roswaal, los habitantes de la mansión tendrían un poco más de cuidado en las tareas que realizaría Subaru por algunos días, no obstante para dicha persona, fue completamente lo opuesto.

En cuanto la revisión física y psicológica que Carol había hecho en Subaru ya había finalizado, y según su diagnóstico...

—A pesar de los frecuentes problemas mentales que Subaru tiene como persona, no veo ningún problema físico evidente, por lo que podrá continuar con sus labores diarias y enfrentar sus castigos asignados correspondientes. —Carol le explico a Reinhard de una manera educada y monótona su diagnóstico de Subaru, y aunque el tenia algunas quejas sobre lo primero que dijo, basto una simple mirada de Carol para que se tragara sus palabras.

—Es un gusto escucharlo, entonces comenzaremos nuestro entrenamiento más tarde, Subaru, por ahora lo dejo en tus capaces manos tía Carol. —Subaru no pudo evitar soltar un —Oi — al escuchar a Reinhard reaccionar como si nada al comentario negativo de Carol, pero simplemente ignoro ese ruido y se despidió de Carol formalmente.

En cuanto Reinhard se fue, Subaru suspiro resignándose a su destino, pero después de volver su mirada hacia Carol, con una expresión que indicaba que acababa de darse cuenta de algo.

—Oh, ahora que recuerdo Caro-chin sensei, supuestamente es una abuela, paso tanto tiempo contigo, que me parecías más una bella profesora de unos treinta... auch, auch, auch, ¿qué haces?, lo siento, lo siento, eres toda una abuelita, no, espera, no tan fuerte, mi brazo se romperá, por favor... —Después de hacer su descuidado comentario, de un segundo a otro Subaru estaba en el piso con Carol encima de él haciendo una variación de shoulder lock, mientras ejercía una peligrosa fuerza en su brazo, que lo hizo crujir por unos segundos, o al menos así lo sentía Subaru.

—No deberías ser tan descuidado al hablar con una dama, piensa en el momento y lugar en el que estas, no creas que te puedes librar de tu castigo solo por unos cuantos halagos. —Carol dejo de ejercer presión en el brazo de Subaru, pero si dejar de sujetarlo firmemente.

—Esa no era mi intención, solo dije lo que se me paso por la mente, ¿acaso dije algo malo? —Mientras recuperaba el aliento, Subaru farfullo esas palabras y luego pregunto con una expresión confundida.

—Que no te hayas dado cuenta de tus acciones es el principal problema, supongo que tendré que enseñarte desde lo más básico sobre los métodos y técnicas de conversación más básicos. —Después de un largo suspiro, Carol soltó su agarre y dejo ir a Subaru, mientras le señalaba que debía asistir a clases extra.

Subaru se levantó un poco adolorido y comenzó a mover en círculos su brazo para relajar la tensión que habían impuesto en él, pero se sorprendió al notar algo extraño en su brazo...

—¿Ya no duele? ¿No es un poco extraño?, usualmente el dolor debería durar un par de minuto e inclusive más tiempo, ¿será que desarrolle alguna extraña habilidad regenerativa o una mayor resistencia? —Subaru comenzó a susurrar sus hipótesis de porque su brazo ya no le dolía, lo que causo que Carol frunciera el ceño al escucharlo.

Un inesperado despertarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora