Finding a reason [to stay]

Tranquilo

Notas antes de iniciar:

Después de mucho tiempo revisé los capítulos anteriores y los edité, así que date una vuelta antes de leer este nuevo capitulo <3

Gracias por todo su apoyo! 

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La mañana siguiente llegó más rápido de lo que Reborn pensaba y honestamente, él se sentía como una mierda.

Dormir mal es algo, pero la manera en la que él había pasado la noche era algo tan terrible que no se podía poner en palabras. Afortunadamente esta vez no había tenido pesadillas que lo despertaran a mitad de la noche, pero su cuerpo se sentía pesado, como si no hubiese dormido nada.

Era como si la cama lo hubiese molido a golpes mientras él estaba inconsciente en un limbo en donde no podía tener tranquilidad ni descanso.

Sentándose en su cama, perdiendo su vista en algún punto de la pequeña habitación, aguantó la respiración por algunos segundos y después lo expulsó todo con desgana.

De inmediato se dio cuenta que era uno de esos días. Aquellos días en donde cargaba una nube gris encima de su cabeza, donde sus pensamientos lo traicionaban y el dolor que acumulaba de poco a poco en su pecho estaba por reventar.

La verdad es que había soñado... muchas cosas, tal vez un poco tocado por la nueva compañía que tenía ahora a su lado. Había sido un sueño delirante y obscuro en donde caminaba sin saber a donde ir y solo escuchaba las voces de sus amigos, algunos tristes, algunos enojados. Algunos pidiendo que se quedara y otros, otro pidiendo que se marchara. La sensación era agobiante y al despertar la luz matutina que se colaba por la puerta abierta del refugio el provocaba dolor de cabeza y un ligero mareo que no se quitaría en horas.

Volvió a inhalar y exhalar pesadamente.

En ese momento daría lo que fuera por unos cigarros. Solo que no sabía fabricarlos ni de donde sacarlos.

Al final solo se levantó de la cama, la recogió y salió, observando de reojo a Auron que ya se encontraba activo al cien por ciento.

Auron dirigió su vista a él. Sin duda alguna se encontraba malhumorado y cansado y se notaba a simple vista al ver sus ojos enrojecidos y las tenues ojeras se posaban sobre sus mejillas blancas, además de su manera de caminar desmotivada.

Auron, tan susceptible a notar estas cosas, pero demasiado desapegado a todo como para comentarlo, prefirió no decir nada de momento, sabiendo que días malos los tiene cualquiera, y se puso a preparar un rápido desayuno y a ordenar rápidamente sus cosas para marcharse.

Desayunaron sin mediar palabras más que un escueto saludo mañanero por parte de Auron y un sonido que pretendía ser una respuesta por parte de Reborn y en un abrir y cerrar los ojos, ambos hombres ya tenían sus cosas equipadas de nuevo y se montaban en la gran ave voladora.

El viaje fue menos sorprendente esta vez gracias a que Reborn ya se sentía más acoplado al vuelo, aunque era cierto que el chocobo voló y corrió a una velocidad mayor que la del día anterior. Al notar esto, Reborn se dio cuenta que probablemente Auron había controlado la velocidad del chocobo para no ir extremadamente rápido y este pensamiento volvió a inquietarlo y por su estado actual de mal humor hasta llegó a molestarle la idea de que quizá Auron lo hacía de menos, considerándolo débil o inferior por nunca haber montado en un animal como aquel.

Al final, Reborn se sentía tan cansado que momento prefirió dejar ese hilo de pensamiento en una esquina de su mente y concentrarse en otras cosas como el paisaje que se abría ante sus ojos y el viento que soplaba directamente en su cara, aunque sintiendo un resquemor en el interior de su pecho.