imaginas || ONEUS

XION / DONGJU

Dongju miraba atento la escena frente a sus ojos. Sus sentimientos estaban desbordando de una forma increíble.

La chica que rechazó hace menos de una semana estaba durmiendo en su cama abrazada a su peluche de Dumbo. Podía notar la punta de su nariz rojita así que supuso que estuvo llorando.
La culpa lo carcomia por dentro y mucho más con las charlas que tuvo con sus hyungs

Pero como el decía: "Es por su bien"

Tuvo que volver a fingir el papel que hizo hace unos días cuando ella le confesó sus sentimientos.
— Yah —le tocó el hombro y la sacudió un poco. Ella se apretó más al peluche y eso no estaba ayudando. Quería ser Dumbo en ese momento— ¡Yah! —tomó con rudeza el peluche y se lo arrancó de los brazos.

Despertó asustada mirando a su alrededor hasta que lo vió a el parado mirándola con enojo. Tragó saliva.
— M*erda, discu—
— ¿Por qué entraste a la habitación? —soltó. Sinceramente, no sabía que responder— ¡Responde!
Cerró sus ojos de golpe a la vez que se bajaba de la cama.

Iba a salir de la habitación pero Dongju la tomó del brazo con fuerza.
— Te estoy preguntando algo
— ¡Sueltame! —gritó. Estaba harta de su forma de tratarla, de la noche a la mañana la comenzó a tratar horrible, como si la odiara— ¡Y tenme respeto!¡Soy mayor que tu!

Eso definitivamente no se lo esperaba el chico. Sintió una puntada en el pecho al oírla decir eso.
Si, ella era un año más grande que el pero con el tiempo que se conocían y la amistad que tenían... no existían casi los honoríficos.

— Fue mi forma de despedir mis sentimientos. A partir de ahora —la chica tomó aire (y valor)— trátame como una conocida o no me hables. No pienso soportarte más, no me lo merezco.

Esa puntada se hizo más fuerte provocando que desvíe la mirada de sus ojos heridos. Quería llorar.
— Voy a dejar de amarte, así que puedes esperarme a volver a ser la de antes de todo esto.

No, no quería eso.
Pero aún así, soltó su brazo dejándola ir.

Dejando ir a su primer amor.

(...)

Tres semanas.

No aguantaba más.

No aguantaba el verla sonreírle a los chicos y a él solo una leve mueca.

No aguantaba que no lo viera a los ojos.

Odiaba ver que ella se comenzara a dejar abrazar por los demás cuando el era el único.

Tambien estaba cansado de escuchar de parte de su hyung Youngjo: "Iré con MinHa a tomar algo"
Normalmente ellos salían a pasear bastante pero desde que ella implantó el punto final, le molestaba verla con los demás.

— ¿Vas a seguir así? —Hwanwoong lo miraba por el reflejo del espejo de la sala. Al parecer se quedó mirando un punto fijo haciendo notar su molestia luego de que Youngjo se fuera— ¿De verdad es por su bien?
— Ya hablé de esto, Hyung.
— Lo único que haces es lastimarte. Siento que aún hay oportunidad.
— Le haré daño.
— ¿Más del que ya le hiciste? ¿Que fue eso de tratarla todos esos días mal? ¿Como se te ocurrió burlarte de su declaración?

Recordó lo cruel que fue con ella y se tapó el rostro con ambas manos, rompiéndo en llanto.
Hwanwoong se acercó rápido y lo abrazó con fuerzas, el chico temblaba.

— ¿Y si la acosan? —decia entre sollozos
— Ahí estarás para ella, e incluso nosotros.
— ¿Los rumores?
— La conocemos mejor que cualquier persona Dongju-ah

Quedó llorando por un rato hasta que se quedó callado cuando la puerta de la sala de abrió.

Seguido de esa voz...

— Venía a buscar el hoodie de Youngjo —soltó tímida y evitando la mirada de ambos chicos.
Pasó por su lado en dirección al sillón largo con cuatro ojos puestos en ella. Lo tomó y en el camino hacia la puerta se lo fue colocando.
Se iba a colocar la otra manga pero tiraron de ella haciéndola dar vuelva.

Un Dongju roto, con cabeza gacha y temblando estaba frente suya.

— ¿Que quieres? —fría. Tan fría que el sintió como su corazón se estrujaba.
— N..noona —no le salían las palabras. El nudo en la garganta era muy doloroso.
— Dongju, no sé que está pasando pero no me intere—

Se quedó callada cuando en un abrir y cerrar de ojos el la apresó en sus brazos.

Volvió a respirar al momento que lo escuchó llorar con la cara escondida en su cuello.
— ¿Puedes soltarme?
— No lo voy a hacer, sé que no quieres que lo haga —habló el. Ella iba a responder pero el la calló— Tu corazón sigue latiendo a la misma velocidad que cuando te abrazaba.

Se quedó sin palabras, era cierto.
Durante todo este tiempo no avanzó ni un poco en su plan de "olvidar sus sentimientos hacia Dongju".

— ¿Y eso que?
— Basta de ser así conmigo. Ya no más Noona.
— ¿Acaso extrañas que esté como idiota atrás tuyo dándote toda la atención?

Dongju se alejó un poco de ella para tomarla de las mejillas y así lo mirase. Seguro estaba un desastre de cara pero le daba igual, no iba a perder esta chance.

— Extraño a la chica que amo conmigo.

Ella rió.

— Esto tiene que ser una broma —alejó las manos de el de su cara— ¿Luego de humillarme?
— Tenía que hacerlo. No puedo hacerte esto Noona, no quiero que te hagan daño.
— ¿Más del que me hiciste? —suspiró cansada.
— Me voy a arrepentir toda la vida de haberlo hecho, no te das una idea. Pero me di cuenta que es peor el perderte.
— Es tarde Dongju.
— Lo dudo bastante Park MinHa.

— ¡YAH!¡DONGJU-AAAAH! —la voz de Hwanwoong quejándose fue lo que escuchó ella de fondo a la vez que sentía los cálidos labios de Dongju sobre los de ella. ¿¡El seguía ahí!?

— Y lo haré las veces que sean necesarias para demostrarte lo mucho que te necesito —habló sobre sus labios. Ella quería caer al piso de la sorpresa.

Jamás se esperaba eso de el, no lo esperaba tan directo.

— Un beso no lo arreglará todo —tomó las manos del chico para alejarlas de su cintura.
— Lo sé —aun con los ojitos brillosos, Dongju le sonrío ya que con eso dicho, le estaba dando una oportunidad.
— Me tengo que ir —soltó ella evitando sus ojos otra vez— Youngjo me espera.
— Está bien, pero... —tomó la parte baja del hoodie que se puso a medias y se lo sacó. La tiró al piso y el se quitó el suyo— Levanta los brazos.
— No puedo creer que esté haciendo esto, ¿tan celoso estabas? —se escuchó a Hwanwoong hablar de fondo. El testigo clave que iba a contarle el chismento a los demás.
— ¡Yah! —se quejó Dongju olvidando los honoríficos. Dudosa aceptó y le dejó.

El corazón de Dongju comenzó a dar saltos viéndola con su hoodie favorito (que el solía mezquinar), era preciosa y ahora es capaz de regalárselo.

— Gracias Dongju, hablaremos mejor en otro momento—ella tomó el que era de Youngjo y lo abrazó para llevárselo consigo.
Quería irse con su faceta de seriedad pero al final se alejó con una sonrisa boba ya que Dongju no la dejó salir no sin antes robarle otro beso breve.

— Y tu que decías que el beso se daba en la tercera cita cuando vas a en serio con alguien —podia escuchar como se reía bajito.

— Hyung... cállese —todavia le estaba dando la espalda porque quedó en trance viendo por dónde su chica se fue.

— ¿Así de celoso eres? ¿Dándole hasta la prenda que más odias que toquemos todos?

— ¡HWANWOONG! —comenzó a correrlo por la sala para darle un golpe.