Capítulo #21

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Estaba sufriendo.

Físicamente y emocionalmente. No se dio cuenta de que perder a alguien además de su madre lo rompería por completo. Tenía demasiado miedo para descubrirlo.

Adrien no recordaba mucho del funeral de Marinette. Todo lo que podía recordar era el sonido de los gritos de Sabine, Alya apenas podía pararse y la mirada pacífica en el rostro de Marinette antes de que cerraran el ataúd y la pusieran tres metros debajo.

Adrien ansiaba estar donde estaba su amada. Quería tumbarse en el suelo con ella. Quería asegurarse de que hubiera espacio dentro para los dos.

A menudo se encontraba simplemente mirando su lápida. Era como si estuviera atrapado en un trance. Realmente estaba en una pesadilla de la que estaba esperando despertar.

Solo quería esconderse. No podía comer, tenía problemas para quedarse dormido y descubrió que tenía problemas para concentrarse en Louis.

Cuando no lloraba, se escondía debajo de las mantas. Debido a que se mantenía despierto toda la noche gritando, pasó la mayor parte de sus días durmiendo.

No se sentía vivo, y la mayoría de las noches no podía dejar de ver a su amor saltar hacia la muerte una y otra vez. Fue traumático. Adrien estaba al borde del suicidio. Se estaba volviendo demasiado para él.

No podía escapar de la soledad. Amaba a su hijo, pero el duelo era mucho peor. La idea de fusionar su Miraculous para traer de vuelta a Marinette cruzó muchas veces por su mente, pero recordó que su difunta prometida le explicó que si deseaba algo, perdería algo más.

Adrien volvería al punto de partida. Estaría eligiendo entre Marinette y algo o alguien más a quien ama. No podía correr ese riesgo en caso de que fuera Louis.

Quizá hablar con Tikki por su sabiduría, pero ella había vuelto a desaparecer en el miraculous en el momento en que Marinette murió.

De cualquier manera, fue enviado de regreso al principio.

Comenzó como nada, y ahora había vuelto a la nada.

"Como diseñador de moda ... uno debe ser capaz de crear diseños para todos los tipos de cuerpos ..."

Los ojos de Adrien se abrieron de golpe, mirando hacia el techo de su habitación ante el sonido de la voz de Marinette en su cabeza. Adrien pudo verla sentada a su lado, dibujando diseños de maternidad en su antiguo salón de clases cuando se enteró de que estaba embarazada.

"E imagino y creo que las mujeres embarazadas necesitan ropa bonita también"

Adrien se congeló, el corazón le dolía al recordarlo.

Cerró los ojos, las lágrimas picaron en sus ojos mientras se giraba en la cama. Se tapó con la manta.

"Quería saber si te gustaría salir conmigo después de la escuela hoy, Me gustaría conocerte mejor"

Adrien frunció el ceño al recordar su propia voz. Recordó lo conflictiva que estaba cuando él se ofreció a llevarla.

Recordó todas y cada una de las lindas pecas de su rostro. La forma en que su flequillo acariciaba su rostro, y la forma en que apartaba la mirada o miraba hacia abajo cuando él se mostraba increíblemente tímido a su alrededor.

"¿Qué?" Preguntó, su expresión permanecía confusa, como si no pudiera creer lo que estaba escuchando.

Ella era tan linda.

"Que si quieres dar un paseo conmigo hoy después de la escuela, no se , como a las 7 de la noche¿ te parece?"

La voz de Adrien sonó en su propia cabeza ante el recuerdo de él teniendo que repetirse, y recordó ese sentimiento ansioso que ella le dio con esa dulce sonrisa que siempre tuvo.

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