𝑪𝑶𝑵𝑻𝑹𝑶𝑳||The Umbrella Academy|

1.8

Povs Thalia

Nuestros increíbles secuestradores habían salido, no sabía dónde pero tenía cierta sospecha de que lo que había dicho klaus nos había arruinado

Ahora estábamos ambos en un armario, con cinta en la boca y amarrados a más no poder.

Solo veía a klaus que parecía delirar y Ben estaba callado hasta el momento, de pronto klaus empezó a moverse desesperadamente, patee su espinilla llamando su atención. El me miro con ambos ojos bien abiertos, su respiración estaba agitada

-Saben lo malo que es que los secuestran justamente a ustedes? Si solo hubiera sido klaus podría comunicarme con thalia y sacarlos de aquí, pero los tomaron ¡A LOS DOS!-. Exclamó ben sorprendido

Rode los ojos. Algo se escuchó desde afuera, al parecer habían venido a hacer la limpieza en la habitación

Porfavor abra el maldito armario, porfavor abra el maldito armario

Klaus y yo comenzamos a gritar para llamar su atención pero no nos prestaba atención

-Saben que es lo peor de estar muerto? Que los veo como arruinan su vida, que ustedes la desperdician como si fuera cualquier cosa-. Mira a klaus con ambas cejas arqueadas-. Tu no Thalía tu eres perfecta a tu modo y siempre haces las cosas bien

Yo asentí de acuerdo

Povs Diego y Luther

-No puedo creer que hayamos perdido a cinco, si Thalía estuviera aquí nos mataría, descuartiza y nos golpea-. Murmuro el rubio

-No lo perdimos-. Contradijo Diego-. Se que está por aquí

Aquellos hombres se separaron y comenzaron a buscar piso a piso hasta llegar al último

-Encontraste algo-. Pregunto Diego al volver a ver al grandote

-No-. Respondió luther

Ambos se quedaron en silencio por unos segundos, hasta que Diego hablo

-Quieres saber porqué me fui-. El rubio lo miro confundido

-De que hablas-. Murmuro extrañado

-Porque me fui de la academia-. Volvió a repetir el de rasgos latinos mientras se recargaba contra el barandal

-Porque no aguantabas que yo fuera el número uno -. Pregunto en tono burlesco y con una sonrisa llena de ego

-No-. Contraatacó Diego-. Porque eso haces a los 17 años, te mudas, tomas el control de tu vida-. El rubio rascó su barbilla aún sin creer lo que el moreno decía

-Tengo entendido, es solo algo que me dijo vanya, que te fuiste porque después de que Thalía había muerto tu sabías que ella no te quería como amaba a cinco-. El moreno tenso la mandíbula, antes de volver a hablar tronó sus nudillos

-No no fue por eso-. Murmuro Diego tratando de creérselo el mismo-. Yo ya era un adulto

-Por supuesto, eres todo un adulto-. Dijo luther con sarcasmo ganándose una mala mirada de su hermano

-Al menos tomo mis propias decisiones. Nunca has tenido que trabajar o pagar cuentas ¿haz estado con una chica tan siquiera?-. El rubio tragó saliva nervioso ante esa pregunta

-No se de que hablas-. Luther habla incomodo

-Mirá quieres culparme, mejor dicho culparnos por irnos, entonces hazlo-. Diego hizo un ademán-. Pero quizás no es porque me fui, quizás es porque te quedaste-. Se separó de aquel barandal y camino unos pasos mirando fijamente al grandulon

-Me quede porque todo el mundo me necesitaba-. Hablo luther, recibiendo aires de superioridad que número dos odiaba

-No fue por eso, te quedaste porque te aferraste al pasado. Te aferraste a la academia, a papa, a Alison y te aferraste a que tu hermana mayor regresara y te dijera que todo iba a estar bien, porque sabes que lo único que mantenía en pie a nuestra familia era Thalía pero ella se había esfumado de la faz del planeta-. Se defendió Diego

-¿Es que acaso no hiciste lo mismo tu? ¿No te aferraste a Thalía? Aun cuando la lastimabas ¡¿Es que acaso tu no te aferraste a lo que viviste con ella?!

-Esto no se trata de Thalía ni de mi Luther! Papá está muerto y ahora también mamá lo está. Somos huérfanos de nuevo y las cosas jamás volverán a ser como eran antes-. Concluyó el moreno con una pizca de resentimiento , Luther había pasado el límite, había tocado aquel tema que nadie más en la academia tuvo el valor y el privilegio de volver a hablar. Su pasado con Thalía había estado enterrado por años y el rubio lo había desenterrado una vez más

Una queja cerca de ellos llamó la atención de ambos adultos, que por poco se tiran encima del otro

-¿Donde están tus padres?-. Pregunto una voz femenina cerca de unos estantes

-Vaya eso fue fácil-. Alcanzó el rubio a murmurar

-Llamare a seguridad-. Exclamó aquella voz femenina otra vez, la dueña de aquella voz pasó a un lado de los adultos

Fue cuando ambos vieron lo que causó su gran enojo. Cinco muy tomado. Con dolores y dormido

Tenía la edad para hacerlo, peor no la apariencia y tampoco era el lugar